Varios de los shows más importantes de la televisión argentina pasaron, literalmente, por sus manos: fue director de cámaras de Gran Hermano, Operación Triunfo y Showmatch. Este último fue en el que ganó mayor exposición a partir de sus diálogos al aire con Marcelo Tinelli y también el programa por el que ganó su propio premio Martín Fierro. Reconocido como uno de los principales referentes de la industria, Alejandro Ripoll creó una consultora de análisis de audiencia bajo la marca Research y suele viajar a Montevideo para ofrecer capacitaciones y charlas sobre tendencias de consumo de televisión.
La semana pasada cruzó el Río de la Plata convocado por Trimax Media para el lanzamiento de su nuevo estudio de straming y dio una presentación sobre nuevos consumos de contenidos on demand. El vínculo con Uruguay data de hace años e incluso llegó a dirigir la versión local de El Último Pasajero que se grabó en Buenos Aires para Canal 12. La relación podría ser incluso más estrecha en breve en caso de que forme parte de la versión local de Gran Hermano, tal como trabajó para la adaptación chilena.
Sobre la inminente llegada de Gran Hermano Uruguay, el impacto de los canales de streaming sobre la televisión abierta y su distanciamiento de Tinelli, el experto en pantallas habla con El País. Y de yapa, revela cuál programa de la televisión uruguaya no lo convence. "Parece que lo hacen por capricho", dispara.
-¿Cómo estás viendo la convivencia entre la televisión abierta y los nuevos canales de streaming?
-El streaming no está enfrentado a la televisión, sino que hay una convergencia en la que se potencian las dos. No compiten. En televisión tenés un programa y en el streaming se ve la reacción a ese mismo programa. El 67% de los televisores que hay en Uruguay son inteligentes. Hoy todos miran televisión: ahí se ve Netflix, Amazon, You Tube, los canales de la televisión abierta y cable.
-¿Se está consumiendo más televisión, entonces?
-Sí, se consume más televisión. No hay que confundir televisión con televisión abierta. Hay una baja en la visualización de la televisión abierta porque hay una mayor oferta en otro tipo de plataformas, pero todas convergen en el televisor que está en la casa. Se incorporan nuevas generaciones y nuevos lenguajes y todo suma.
-Todo suma en cuanto a la audiencia, ¿pero no compiten en lo comercial?
-No, también se potencian. Hay que hacer los análisis de audiencia adecuados y para eso hay herramientas muy potentes por parte de Kantar Ibope. En Uruguay se puede analizar quién te ve por aire, quién por cable y quién por streaming. Entonces comercialmente si necesito ubicar mujeres de determinada edad lo puedo hacer a través de ese software y sé certeramente en qué programa está ese público. Hay mercado para la televisión abierta, para el streaming y para la comercialización 360 que es en conjunto.
-¿Cómo se reinventa el rol del director de cámaras en este nuevo formato?
-Es un lenguaje totalmente distinto. Los planos son más cerrados, más estáticos. La imagen es la de una foto carnet. Se muestran las caritas que van hablando y se compone una sola imagen con todos los conductores a la vez. No vas a ver el despliegue del plano general con una grúa, ni una cámara siguiendo a alguien.
-¿No se pierde lenguaje audiovisual de este modo?
-No, es otro tipo de lenguaje audiovisual. Es como decir que de la prosa de Cervantes con oraciones extensas pasamos a una oración unimembre de relato breve. Se relata de otra manera. Esta época marca que vamos a las oraciones unimembre.
-Llegaste a Montevideo para hablar de estos temas en un evento de Trimax Media.
-Siempre vengo invitado por Trimax, que me convoca para dar cursos de capacitación. Esta semana fue para una masterclass en el marco del lanzamiento de su nuevo estudio de streaming. Pusieron auriculares, cámaras, micrófonos y todo de primera línea. Quedé gratamente sorprendido por lo bien montado que está el estudio.
-¿Cómo surge tu vínculo con Uruguay, donde venís seguido a realizar capacitaciones?
-Es una relación de más de 10 años. Empecé viniendo a dar un curso de dirección de cámaras en Trimax en 2015. A partir de ahí quedó una relación. Después hice una asesoría para Canal 4 y en 2022 trabajé en El Último Pasajero de Uruguay en Buenos Aires para Canal 12. Se hizo con la lógica de tener un estudio en Argentina y usarlo para hacer varias versiones con el objetivo de bajar los costos y que nos sirva a todos.
-¿Cómo recordás esa experiencia?
-Muy buena. Lo hicimos con la conducción de Coco Echagüe, que es un crack. Me acuerdo que en un momento nosotros decíamos “dale, que se apure” y Ana Laura González, que es la gerente de producción de Canal 12, cortó la grabación para decir que los uruguayos tienen otros tiempos para comunicar. Aprendimos cómo teníamos que comunicar a nivel de la idiosincrasia de Uruguay.
-¿La versión uruguaya de Gran Hermano también se va a hacer de ese modo?, ¿usando la casa instalada en Buenos Aires?
-Exacto. Así hicimos la adaptación para Chile. Tuvimos que aprender mucho de su idiosincrasia para hacerla, y ahora vamos a tener que aprender más sobre la uruguaya.
-¿Vas a dirigir Gran Hermano Uruguay?
-Nada está confirmado (risas).
-Armaste mucho revuelo cuando en el programa Ángel Responde (Bondi) le dijiste hace meses a De Brito que el año que viene se realizaría la versión uruguaya del reality.
-Nadie lo sabía. Nosotros tuvimos una primera reunión en junio del año pasado. Habían convocado a uno de los productores originales del programa para hacer un relevamiento sobre la viabilidad del proyecto. Nosotros estamos con muchas ganas de hacerlo. Sería como volver al primer Gran Hermano que hicimos hace 25 años. Teóricamente sería una versión corta de 12 participantes y con la esencia original. Le tengo mucha fe.
-Vos has sido crítico de los cambios que ha tenido el formato en Argentina.
-Es que el secreto de Gran Hermano es el aislamiento. Hay que tratar de que no reciban información externa. Si hacés pases de comedia y los dirigís ya estás interactuando con ellos. Hay que dejar que convivan y generen su propio ecosistema. Que fluya. Siempre hay un crecimiento, una meseta y un crecimiento final. Si querés acelerar la meseta es como acelerar el asado. Va a quedar negro por fuera y crudo por dentro. Son procesos que hay que respetar porque sin propios del formato y del ser humano.
-¿Cómo sería la dinámica de la versión uruguaya?, ¿el estudio estaría en Montevideo?
-El estudio es en Montevideo. Los participantes se aíslan en un hotel de Buenos Aires antes de entrar a la casa y la gala de presentación es con un móvil en vivo desde Buenos Aires mostrando a los que van ingresando. Los fanáticos irán al estudio que ponga el canal en Montevideo con su conductor. Cuando quedan eliminados, hay un móvil que los recibe a la salida de la casa y llegan en Buquebus al estudio al otro día.
-¿Tenés una opinión formada sobre la televisión uruguaya?
-Sí, es muy buena. Me gusta lo que hace Canal 12 de dividir la mañana entre Desayunos Informales parte 1 y parte 2. Eso le da dinamismo. En los noticieros, Subrayado se despega mucho en audiencia, pero es por un tema de gustos porque Telemundo tiene más power. Los formatos internacionales están perfectamente adaptados. El único que me hace ruido es Fuego Sagrado. Si todos hacemos asado, ¿para qué hacer un formato para ver gente haciendo asado? Por algo triunfa Masterchef y no triunfa Fuego Sagrado: en Masterchef hacen platos que no hacemos todos. Esa es la novedad. Canal 12 insiste con Fuego Sagrado, una temporada, otra, después con famosos, y cada vez mide peor. No sé si hay un capricho detrás. En cuanto a los conductores me gustan Coco Echagüe, que lo amo, y (Luis Alberto) Carballo, a quien conozco de cuando participó en las cámaras ocultas de Showmatch que yo dirigía. De los nuevos talentos me gusta mucho Juli Pintos, que me parece que es un valor sin explotar.
-¿Cómo recordás tu salida de Ideas del Sur, donde trabajaste durante años con Marcelo Tinelli y terminaste haciéndole un juicio por incumplimiento de pagos?
-A mí me echaron. Yo no me fui ni ofendido ni despechado. Me echaron después de hacer un reclamo por una deuda que tenían conmigo de siete meses de trabajo. Yo les dije que no trabajaba gratis: “páguenme lo que me deben y después vemos cómo seguimos”. Y Marcelo tomó la decisión de echarme. Él no me lo dijo y me enteré 48 horas después. Todavía estoy en juicio. Estoy esperando la sentencia.
-¿Cómo has visto los recientes reclamos a Tinelli que tomaron estado público?
-Tengo contacto con mis excompañeros que me cuentan que no les cumplen y la pasan muy mal. Si soy el dueño de una empresa y no sé con quién estamos al día y con quién no, habla muy mal de mí o de mi empresa. Además la empresa es él. Si no sabés las deudas que tenés no sos un buen empresario.
-Él dijo hace poco que no estaba al tanto del día a día de las cuentas de la empresa.
-No le creo eso. Él siempre quiso saber todo y siempre supo todo.
-¿Te gusta lo que está haciendo en streaming?
-Me da tristeza. Nosotros viajábamos a Las Vegas a ver shows para implementarlos en el programa. Hacíamos traer equipos de luces de Estados Unidos y se innovaba tecnológicamente todos los años. Él se hacía traer trajes a medida de Europa que valían siete mil dólares. Pasó de ser el número uno indiscutido y la persona con mayor peso de opinión en el país a terminar haciendo un streaming de remerita a las risas. Me parece triste.
-
¿Quién será el conductor de Gran Hermano Uruguay?; la lista ultra secreta de Canal 10 y un as bajo la manga
Escándalo en la tv argentina con ex Gran Hermano que enfureció y abandonó un programa: "Me trajeron engañada"
Ulises Apóstolo, el ex "Gran Hermano" pasó por Uruguay y habló de su vínculo con Tato Algorta: "Vamos a..."
La tajante respuesta de Selva Pérez a la excompañera que le quiere hacer un juicio por su obra: "Yo no..."
Rosina Beltrán, la uruguaya de "Gran Hermano" que se abre lugar en la tv: "Me identifico con Yuyito González"
Tato Algorta: por qué perdió peso en la casa, el mensaje de Wanda Nara y el bullying que recibió en el colegio
Darío Turovelzky: el liderazgo de Telefé, el futuro de la tv y la posibilidad de hacer "Gran Hermano" en Uruguay