Cada febrero (y, a veces marzo, como este año) Uruguay se llena de color, música y baile, un estallido de energía que recorre desde las calles de Montevideo hasta los rincones más alejados del país. El carnaval no es solo una fiesta; es una celebración de la identidad nacional que congrega a miles de personas en las principales ciudades y pueblos. Y, más allá de Montevideo, algunos festejos del interior como los de Melo y Artigas convocan mucho, con sus idiosincracias bastante alejadas a las del carnaval capitalino. Pero detrás del brillo de las comparsas, los desfiles y las murgas hay un esfuerzo logístico y económico considerable por parte de las intendencias de muchos departamentos. Que suelen ser cuestionadas, además, por la oposición a esos gobiernos departamentales.

Cada intendencia tiene su propio guión sobre cómo fomentar el carnaval como una tradición viva, que aporta al desarrollo local.

El País relevó datos sobre cuánto invierten las intendencias de Montevideo, Maldonado, Canelones, Cerro Largo, Artigas y Salto, y qué impacto tienen estas inversiones en la cultura y economía regional. Algunas de esas intendencias organizan celebraciones que a esta altura ya son emblemáticas.

Montevideo, con el carnaval más largo, que incluye el concurso en el Teatro de Verano, lidera el camino con una inversión cercana a 1.427.100 dólares. El detalle de los gastos, que incluye desde los desfiles al apoyo al mencionado concurso de murgas, parodistas, humoristas, revistas y negros y lubolos, está en un recuadro más abajo.

Pablo Barletta, gerente de Festejos y Espectáculos de la Intendencia de Montevideo (IMM), dice que esta festividad forma parte esencial de la idiosincrasia nacional. “Es parte de nuestra cultura y por eso se promueve desde la intendencia en todas sus manifestaciones”, afirma Barletta, resaltando la importancia de los desfiles, los tablados y el carnaval en los barrios.

¿Cuán masivos son los desfiles y el concurso oficial? Barletta dice que más de 40.000 personas asistieron a las etapas iniciales del concurso en el Teatro de Verano Ramón Collazo, “lo que refleja el interés y la convocatoria que genera este evento”. Esto a pesar de que, según supo El País, en algunas etapas durante este largo concurso el recinto estuvo lejos de llenarse y ha habido pocos días con entradas agotadas (el teatro también aumentó su capacidad tras la última reforma, eso también es cierto).

También está el carnaval en los barrios con los escenarios populares. Su programa tiene un importante componente social, ya que “los vecinos organizan los tablados de manera voluntaria y presentan proyectos para destinar los fondos obtenidos a fines solidarios, como donaciones a escuelas o trabajos comunitarios”, dice el jerarca de la IMM. Así, la intendencia paga las actuaciones de los conjuntos, pero los vecinos tienen que hacerse cargo de una parte y organizar la cantina.

Barletta dice que la participación en el carnaval no solo beneficia a los vecinos y al público asistente, sino que también tiene un impacto económico directo y genera trabajo. “El evento genera empleo en sectores como la producción artística, la escenografía, la vestimenta, la música y la organización de los espectáculos. Es muy importante para los artistas, técnicos y otros rubros relacionados con el arte, que ven un incremento en su actividad laboral durante esta temporada”, indica.

Se estima que unas 40.000 personas trabajan en el carnaval de Montevideo, según cifras que maneja Directores Asociados de Espectáculos Carnavalescos Populares del Uruguay (Daecpu). Ahí entran desde churreros y choriceros hasta los componentes de las agrupaciones, las maquilladoras y los que hacen los vestuarios, entre tantos otros.

Foto: Daecpu.

El presupuesto del carnaval de Canelones ronda los 559.900 dólares, según datos oficiales a los que accedió El País, de los cuales la mitad se destina a la parte artística y la otra mitad a infraestructura, incluyendo sonido y luces.

Es el segundo carnaval de mayor inversión, en este relevamiento realizado por El País.

Santiago Recalde, encargado de la gestión del carnaval, explica cómo han transformado el evento en una festividad de carácter anual, en contraste con otros lugares. Desde 2016, bajo el gobierno del exintendente Yamandú Orsi, se instauró un enfoque más organizado, con un trabajo continuo durante todo el año que incluye talleres, monitores y la colaboración con el área de formación cultural. Además, la planificación del carnaval empieza con la inscripción y pruebas de admisión de los grupos en octubre, un proceso que se organiza de manera estructurada.

Y se integró a los 30 municipios del departamento, sin importar la localidad o el partido político, dice Recalde. En cuanto a los concursos, se potenciaron las instancias más grandes, como las Llamadas de la Costa, que este año contará con 11 comparsas y se transmitirá por televisión este sábado.

Todas las actividades son de acceso libre y gratuito, tanto en tablados como desfiles.

Foto: Ignacio Sánchez/El País.

Un poco más al este, la cifra que invierte la Intendencia de Maldonado es de unos 500.000 dólares. El Carnaval de Maldonado incluye la participación de más de 40 conjuntos —llegan desde Montevideo e incluso de Argentina—, y 1.500 artistas para desfiles, tablados, corsos barriales y concursos de murgas.

La fiesta popular en el departamento se extiende durante 45 días. Los ocho municipios tienen sus escenarios, por lo que se suman más noches de actuaciones durante este año como, por ejemplo, en el balneario Buenos Aires, El Tesoro, y Barrio Hipódromo, entre otros lugares. También hay escenarios en Aiguá, Pueblo Garzón, José Ignacio, Pan de Azúcar, Piriápolis, Punta del Este, San Carlos y Solís Grande.

Todas las actividades organizadas por la intendencia también cuentan con ingreso libre y gratuito.

Los próximos desfiles son en Aiguá este sábado, Piriápolis el sábado 1º de marzo, Maldonado el lunes 3 de marzo y Pan de Azúcar el sábado 8 de marzo. Antes se realizaron el Samba en Punta, el Encuentro de Tambores de Punta del Este y el desfile de San Carlos.

El concurso de carnaval de San Carlos se lleva a cabo en el Teatro de Verano Cayetano Silva. Hay dos partes: el concurso departamental de murgas, que va del 18 al 23 de febrero, y el concurso de murgas del interior, del 24 de febrero al 2 de marzo. Además, conjuntos de Montevideo se presentan en el escenario Perucho Cairo de Maldonado, en el Centro Atlético Fernandino, entre el 25 de febrero y el 1 de marzo.

Foto: Ignacio Sánchez/El País.

El Carnaval de Artigas es, sin dudas, uno de los eventos culturales más destacados de la región, no solo por su colorido y vibrante despliegue sino también por el impacto económico y social que genera. El director de Cultura de la Intendencia de Artigas, Javier Bertalot, resala la importancia del apoyo del gobierno departamental para que este evento se lleve a cabo cada año, en la capital y en otras localidades como Gomensoro, Baltasar Brum y Bella Unión.

La comuna contribuye con una inversión que ronda los 368.000 dólares, según datos oficiales. No solo se realiza un aporte económico directo, sino que la intendencia también se encarga de toda la logística del evento. Esto incluye la instalación del vallado, la organización de escenarios y la infraestructura necesaria para los desfiles de las escuelas de samba, todo ello para “garantizar la seguridad y el confort de los miles de espectadores que se concentran en la ciudad durante las festividades”, señala Bertalot.

El Carnaval de Artigas se organiza en conjunto con la Federación de Escuelas de Samba, que se encarga de la producción artística y la coordinación de las competiciones. En el interior del departamento las comisiones locales juegan un rol crucial en la organización de los espectáculos, aportando una visión descentralizada que permite que el carnaval llegue a todos los rincones de Artigas. Bertalot destaca también que el aporte de la intendencia al carnaval “no solo es una inversión en cultura, sino en empleo y economía local”. La preparación de las escuelas de samba y los ensayos previos movilizan una gran cantidad de personas y generan fuentes laborales durante los meses previos al evento. Según el director de Cultura, “este impacto económico se extiende más allá de las noches de carnaval, ya que la actividad que se genera durante los tres meses de preparación y ensayo beneficia a una variedad de sectores, desde la contratación de servicios hasta la venta de productos relacionados con el evento”.

Pero, claro, el Carnaval de Artigas no solo es un evento para los residentes locales; su magnitud ha ido en aumento, atrayendo a miles de personas de todo Uruguay, además de Brasil y Argentina. Entre 15.000 y 20.000 personas se concentran cada noche en la avenida Carlos Lecueder, donde se desarrollan los desfiles, consolidándose como una atracción turística que genera un importante retorno económico. Este crecimiento es, según Bertalot, “una muestra del éxito del evento, tanto a nivel cultural como económico”.

Foto: Ignacio Sánchez/El País.

El carnaval se desarrolla durante el fin de semana largo que arranca el sábado 1º de marzo y culmina el martes 4, con los resultados de la competencia de las escuelas de samba. Este formato se ha convertido en una tradición que mantiene la identidad cultural de Artigas y que ha transformado a la ciudad en un punto de encuentro.

Para la Intendencia de Artigas, el carnaval representa “un patrimonio cultural y turístico que debe ser preservado y fortalecido”. El evento cuenta con una serie de tradiciones “que lo enriquecen”, como la elección de la reina, la princesa y el rey momo, “figuras representativas que contribuyen a la mística del carnaval”, dice Bertalot.

Además de los desfiles, cada escuela de samba tiene su cuadra de ensayo, lo que genera una interacción constante entre las comunidades, fortaleciendo los lazos sociales y creando una atmósfera particular.

Con menos fama, el carnaval de Salto intenta despegar. La intendencia ha destinado unos 280.000 dólares para la realización de todas las actividades de este año. En cuanto a los premios para las agrupaciones que desfilan, en las categorías de samba y lubolos se entregarán unos 2.500.000 pesos a los primeros puestos.

Juan Pablo Cesio, coordinador general de la intendencia y presidente de la Comisión de Carnaval, relata “el importante apoyo” que la intendencia ha brindado a través de sus diferentes servicios, como tránsito, luz, obras, maquinaria, personal, además del respaldo de la Policía y la Prefectura.

Entre otros eventos, el carnaval salteño incluye un escenario al aire libre que es rotativo, el concurso de escuelas de samba en Costanera Norte, las llamadas locales, un concurso regional de murgas, un desfile en Pueblo Belén, otro en Termas del Arapey el mismo lunes de Carnaval y uno de cierre por la calle Uruguay el viernes 7 de marzo.

Carnaval de Melo: el misterio de cuánto cuesta

Como cada año, la expectativa por el Carnaval de Melo es grande pero hay hermetismo sobre la inversión que se destinará a la fiesta popular. El intendente de Cerro Largo, Fernando Gamarra, dice a El País que el impacto del carnaval es tan grande que se empieza a notar incluso antes de que comience: “A esta altura, faltando solo una semana, ya están agotadas las reservas en hotelería, lo mismo las mesas para los eventos y los camarotes”.

Claro, el carnaval mueve la economía local, con muchas personas trabajando durante esa semana, sobre todo en los puestos ambulantes. “El carnaval crea una inmensa fuente laboral”, agrega el intendente, destacando lo positivo que es para la comunidad.

Pero Gamarra prefiere no informar cuánto destinó la comuna en esta edición y lo justifica diciendo que estamos en medio de la campaña electoral rumbo a las elecciones departamentales: no quiere que el carnaval se politice. De hecho, es un tema que siempre es seguido de cerca por la oposición frenteamplista.

En la edición de 2023, hace ya dos años, la inversión fue de unos 500.000 dólares, según publicó El País en aquel momento.

Este año el carnaval tendrá algunas novedades. “Decidimos apostar más por lo local, con samba y candombe, géneros más representativos de nuestra cultura”, cuenta Gamarra.

Foto: Estefanía Leal/El País.

En otras ediciones estuvieron presentes figuras argentinas, como Moria Casán y José María Listorti, lo que generó críticas de la oposición. Esta vez será un carnaval con figuras uruguayas con “mucha música y alegría”, dice el intendente. Y, aunque se salga un poco de la lógica de los años anteriores, la idea es no perder el atractivo. Habrá siete escuelas de samba, candombe y bandas locales como The La Planta, Lucas Sugo, Martín Piña, Los Fatales, Mariano Bermúdez y Agatha, entre otros.

Los desfiles serán a partir del sábado 1º de marzo hasta el sábado 8, con el cierre encabezado por Claudia Fernández, que nuevamente será la madrina del carnaval. Kenia Acosta y Rihanna Montenegro serán las encargadas de abrir el evento, mientras que Cecilia Comunales, Nadia Valverde, Jessica Zunino, Karen Sánchez (mejor vedette de Llamadas 2025) y Josy Semeão (reina del Carnaval de Belo Horizonte) desfilarán el resto de los días. Habrá otros eventos especiales, como el Concurso Regional de Murgas en el Teatro de Verano el 4, 5 y 6 de marzo.

Desde Artigas a Melo, en estos días las calles se transforman, los vecinos se convierten en protagonistas y las agrupaciones carnavaleras, que durante todo el año se preparan en talleres y ensayos, sienten el respaldo de las intendencias, muchas veces cuestionadas por las sumas invertidas, mucho más en un año electoral. La polémica nunca falta.

Foto: Ignacio Sánchez/El País.