Guillermo Selves, profe de Los Teros: en qué se elevó el nivel y cómo se aprontó el juego ante los All Blacks

ENVIADO / LYON, FRANCIA
Con 29 años, Guillermo Selves empezó a estudiar Educación Física y encontró una pasión que supo combinarse con otra que ya tenía desde chico como el rugby. Hoy, a los 48, vive un nuevo Mundial con Los Teros y todo lo define con una palabra: disfrutar. Y no solo lo dice, lo siente, lo transmite y también lo demuestra.

En cada entrenamiento del equipo de Esteban Meneses, en cada instancia en el hotel, viaje en tren, avión o en ómnibus, Guille siempre está contento y le traslada su alegría a todos.

Pero también transmite el conocimiento que adquirió a lo largo de los años y que lo llevaron a ser parte de un staff celeste que en la preparación física cuenta con otros dos grandes profesionales como Federico Izeta y Santiago Alfaro.

“Nosotros nos propusimos disfrutar desde el primer día de la pretemporada en Uruguay, pero cuando llegamos al Mundial volvimos a decirnos entre todos ‘disfrutemos esto porque es único y somos privilegiados por está acá’”, le contó Guillermo Selves a Ovación.

Pero hay algo que todos tienen claro y es que no solo se trata de pasarla bien: “Disfrutar va de la mano con trabajar todo el tiempo también, entrenar, estar charlando, en reuniones. Hemos aprendido como staff a disfrutar de cada instancia ya sea en los momentos de trabajo en los ratos libres”.

Y ese disfrute del trabajo se fue transformando también en más y mayor exigencia porque la vara del rugby uruguayo se elevó a todo nivel en los últimos años: “Fuimos viendo que las demandas eran cada vez más altas y creo que la competencia es lo que te hace realmente dar cuenta que te tenés que ir superando, innovando en cosas, exigiéndote en otras áreas y la verdad que en esta preparación para Francia 2023 elevamos los números y los niveles de entrenamiento. Nos propusimos subir dos o tres escalones en todas las áreas”, explicó Selves.

El Mundial de Rugby 2023 es el cierre de un proceso de cuatro años y así lo dejó en claro el preparador físico que además de ser parte del staff de Los Teros, también trabaja en su club, Trébol de Paysandú: “Esta preparación fue única porque nos clasificamos como Americas 1. Lo supimos de entrada, entonces empezó al momento de conseguir el cupo y ya con Peñarol, las ventanas internacionales y obviamente la competencia al nivel que nos expuso World Rugby con rivales más duros, nos ayudó a ser un poquito mejores cada vez más”.

Foto: Enrique Arrillaga.

Y en la antesala al último partido de Uruguay en el Mundial aún no hay balance en concreto, pero sí aspectos que se dejan ver en cuanto a lo físico en el plantel.

“Después del tercer partido hay 32 de 33 jugadores disponibles y el que no está es por suspensión, no por lesión. Y eso es muy importante y valorable. Son indicadores de que se hizo una buena preparación”, dijo Selves.

“Siempre hay cosas para mejorar, pero estamos convencidos de que el camino es este y la convicción que nosotros le transmitimos también a los jugadores es muy importante sobre los planes que tenemos y sobre nuestra forma de juego”, agregó.

Hoy Los Teros cerrarán el Mundial enfrentando a Nueva Zelanda en Lyon y acerca de cómo se preparó desde lo físico el juego ante los All Blacks y de lo que significa enfrentar a un rival de ese calibre, Guillermo Selves cerró diciendo: “Nosotros como staff lo vamos a plantear como contra cualquier equipo, obviamente con alguna diferencia pero tenemos que entrar convencidos de nuestro plan, de que estamos bien preparados y que por algo estamos acá. Lo vamos a enfrentar de igual a igual pero sobre todo con algo que siempre dice el Mono (Esteban Meneses): disfrutar. Disfrutar de esos 80’ porque van a ser únicos”.