Redacción El País
Para avanzar en estas instancias hay que hacer partidos casi perfectos y eso fue lo que hizo Peñarol que le ganó 3-0 San Lorenzo de Almagro por los cuartos de final de la Copa Libertadores de futsal 2024. Ahora el Manya enfrentará a Barracas Central en semifinales el próximo sábado.

El aurinegro había perdido a una de sus figuras, el español Manuel María Suazo, por una denuncia de uno de sus rivales luego del partido y, en una situación sin precedentes, Conmebol decidió suspender al jugador con una fecha.

"Nos pasaron muchas cosas en este torneo pero Peñarol va contra todo, tiene un sentido de pertenencia muy grande. Eso nos fortaleció como grupo y adentro de la cancha se notó", dijo el arquero aurinegro Mathías Fernández una vez finalizado el partido.

Al minuto ya había tenido que intervenir pero el partido fue ganando en imprecisión, a eso quería llevar Peñarol a San Lorenzo y lo logró. Como también ponerse en ventaja.

Sobre la mitad de la primera parte Maximiliano Navarro cruzó mitad de cancha y sacó un derechazo muy fuerte que se metió al ángulo del buen arquero Luka Benjik que comenzaba a ser figura.

El equipo argentino estaba molesto y no le encontraba la vuelta al partido, mucho menos después de recibir otro golazo. Nicolás Ordoqui, el capitán e histórico goleador, pivoteó notable y descargó para la llegada del juvenil Lucas Paroldo que se llenó su talentosa zurda para otra definición esquinada. Y restaban 9:50 para el descanso.

Paroldo tuvo su doblete después de un gran pie a pie pero tapó Benjik y Pescado Fernández no quiso ser menos. En una jugada que pareció de fútbol 11 tapó un cabezazo contra el palo luego de un centro y luego un mano a mano. San Lorenzo encontró su mejor versión después de ir perdiendo por dos.

El aurinegro controló el ritmo del partido cada vez más, el Ciclón realmente estaba incómodo y molesto y hasta la suerte estuvo del lado del mirasol porque casi cometen un blooper entre Navarro y Fernández.

Entonces, hubo tiempo para que se luciera otra de las figuras de Peñarol que más allá de destaques ofensivos, a la hora de marcar, todos se ponen el overol.

Brandon Díaz recuperó en mitad de campo propio y haciendo honor a su apodo, Picante cruzó la mitad de la cancha con un diagonal hacia la derecha, hacia donde fue todo San Lorenzo, y a último momento cruzó el remate al otro palo sobre la salida e Benjik. Golazo sobre la mitad del complemento.

Un 3-0 no es ventaja en este deporte y San Lorenzo apostó por el arquero jugador pero hasta eso hizo bien Peñarol. Defendieron 8 minutos notables porque el Cuervo solo generó peligro cuando el peruano Sebastián Obando salvó milagrosamente y en dos intervenciones de Fernández que nunca faltan.

Sonó la chicharra. Peñarol aguantó el último embate de San Lorenzo pero algunos jugadores no resistieron la emoción y se fueron con los ojos empañados a festejar con la gente que los acompaña en el polideportivo de Tortuguitas en Buenos Aires, Argentina.

Ahora el aurinegro al local Barracas Central mientras Magnus de Brasil e Independiente Barranquilla será el otro duelo por un lugar en la final del torneo que Peñarol ya jugó en 2022.

Foto: Conmebol