Policía herido por bengala náutica en el clásico del Intermedio entre Peñarol y Nacional fue dado de alta

Redacción El País
El 6 de julio fue la final del Intermedio entre Nacional y Peñarol y recién este domingo 3 de agosto fue dado de alta el Policía de 47 años que fue herido por una bengala náutica, producto de que una persona la lanzó desde la Tribuna Colombes, motivo que desencadenó una sanción para los tricolores que consta en la quita de tres puntos en la Tabla Anual y el Torneo Clausura y cuatro partidos sin la posibilidad de jugar con público en el Gran Parque Central. Esto a la espera de la confirmación del Tribunal de Apelaciones, que podría fallar esta semana.

Según confirmó Ovación con fuentes de la Policía, el hombre fue dado de alta, pero no se descarta una nueva intervención quirúrgica, ya que tiene lesiones importantes en su pene. Vale recordar que en la primera operación se le extirpó un testículo.

La bengala náutica impactó directamente en este Policía que se encontraba en la zona de la bancada de prensa, y dio de lleno en la zona de los genitales, provocándole varias lesiones complejas, a tal punto que estuvo casi un mes internado, después de estar los primeros 10 días en el Centro de Cuidados Intensivos del Hospital Policial.

Por otro lado, continúa la investigación para encontrar a la persona que lanzó la bengala náutica desde la hinchada de Nacional. Han existido avances.

Cabe recordar que los incidentes registrados en el encuentro clásico derivaron en el lanzamiento de tres bengalas náuticas —dos del lado de Nacional y una de Peñarol— y también en un segundo policía herido, pero en este caso por un proyectil lanzado desde la Tribuna Ámsterdam.

Los hechos que se dieron llevaron también a que el ministro del Interior, Carlos Negro, lleve a cabo una reunión con autoridades de Peñarol, Nacional y la Asociación Uruguaya de Fútbol donde se manejaron distintas medidas a futuro, para evitar nuevos incidentes.

Entre ellas, que los clásicos en las canchas de los grandes se jueguen de manera definitiva sin hinchas del club visitante, así como también una mayor firmeza en los tamaños de banderas que se ingresan y permitir un relevamiento exhaustivo de cada rincón del escenario deportivo donde se desarrolle el encuentro.