Mauricio Larriera arriesgó, pero hizo una jugada que le salió bien en Peñarol

Mauricio Larriera, entrenador de Peñarol. Foto: Juan Manuel Ramos.

TORNEO APERTURA

El equipo carbonero volvió a la victoria después de tres partidos sin triunfos y ahora tendrá un duro desafío por Copa Libertadores.

En el partido frente a Liverpool, Mauricio Larriera arriesgó. Puso un equipo alternativo a pocos días del juego ante Olimpia por Copa Libertadores y a pesar de los vaivenes que tuvo el encuentro del sábado, Peñarol logró su objetivo: ganar.

El entrenador arriesgó porque mandó a la cancha a jugadores que no son habituales titulares y en la previa despertó varias críticas, pero en los hechos, los futbolistas respondieron y estuvieron a la altura de la circunstancia. El mirasol ganó 2-1 en el Estadio Campeón del Siglo y volvió a la victoria luego de tres partidos sin triunfos si se tiene en cuenta el plano local e internacional.

Y si bien resulta difícil creer y mucho más explicar cómo jugadores profesionales en el fútbol uruguayo aún no pueden jugar dos partidos por semana, es válido que el técnico los reserve y además, le de la chance a otros futbolistas del plantel.

Pero por esa vía optó Mauricio Larriera el sábado. Cuidó a los titulares, intentó no utilizar jugadores que vienen algo complicados y los que ingresaron tuvieron su oportunidad para mostrarle al entrenador por qué están jugando en Peñarol.

Esa maniobra le salió bien al técnico carbonero porque los futbolistas respondieron, estuvieron a la altura, superaron a un rival que venía arriba y el equipo sumó los tres puntos de oro para seguir soñando con pelear por el título de campeón del Torneo Apertura.

¿Encontraste un error?

Reportar

Te puede interesar