OCTAVOS DE FINAL

Fue un 2-0 sólido, merecido, que bien pudo haber terminado en una ventaja mayor sobre el final del partido. Nacional ganó con autoridad en la ida de los octavos de final de la Copa Sudamericana contra Unión de Santa Fe en el Parque Central.

Fue un muy buen primer tiempo de Nacional, con intensidad, concentración, precisión en los pases y ganando la mayoría de los duelos individuales, lo que le permitió sacar ventaja rápidamente.

A los 38 segundos, Nacional ya había exigido al uruguayo Santiago Mele con una media vuelta bien dirigida de Alfonso Trezza. Y a los 4’ ya estaba en ventaja, luego de una jugada por derecha, un pase del floridense y un tiro a colocar de Franco Fagúndez, que se metió contra el palo izquierdo del exarquero de Plaza Colonia.

Pese al impacto de gol, Unión tuvo una jugada clara de gol, con un pase de Machuca y un remate de Gallegos que encontró bien parado a Sergio Rochet, que también atacó bien el rebote para que Zenón no defina con claridad.

Fue un sensacional primer tiempo de Leandro Lozano, no lo pudieron desbordar y ganó todos los duelos. Anoche jugó como lateral derecho y encontró el segundo gol de Nacional: tiro de esquina tricolor, despeje de la defensa y el exjugador de Boston River la agarró de sobrepique para sentenciar el 2-0 con un golazo al ángulo.

Desde ese momento, Nacional manejó los tiempos del partido, paró bien a sus líneas e intentó no dejar espacios contra un equipo cuya principal fortaleza son las transiciones rápidas. Aunque el equipo de Gustavo Munúa no estuvo fino con la pelota.

De destacar también el primer tiempo de Fagúndez, quien en cada partido va ganando en confianza y muchas veces por sus pies pasan las principales ideas de ataque. Si bien es cierto que de una pérdida suya llegó la situación más clara de gol de los santafecinos, también lo es que estuvo claro en la generación.

Como era de esperarse, en el inicio del segundo tiempo Unión se paró más arriba y fueron los minutos donde la visita generó más riesgo sobre el arco tricolor, aunque le costó dar de manera certera el pase final. Luna Diale aprovechó una mala defensa de Mario Risso (de buen partido), pero cuando quedó de frente al arco definió débil, a las manos de Rochet. Después hubo una jugada en la que Gallegos quedó mano a mano con el arquero albo, pero definió mal.

Nacional se fue acomodando nuevamente en el trámite y a Unión ya le costó mucho más profundizar. En el tramo final del juego, el tricolor aprovechó los espacios y generó varias situaciones claras de gol, con un Camilo Cándido que se soltó y que generó muchísimo peligro. Juan Ignacio Ramírez, que había entrado por Emmanuel Gigliotti (de lo más bajo del equipo) tuvo dos mano a mano con Mele, pero en ambos casos fueron bien resueltas por el guardameta, pese a las buenas decisiones del centrodelantero.

Noche muy positiva para Nacional. Porque le faltaron cuatro jugadores que venían siendo titulares (por covid) y el equipo tuvo una buena actuación a nivel colectivo, con rendimientos individuales que fueron destacados.

Lozano y Felipe Carballo (hizo todo bien, manejando la pelota y ocupando espacios) quizás fueron los que más se sostuvieron durante los 90’, pero hubo rendimientos sólidos de Risso y Leo Coelho, destacado complemento de Cándido, notable primer tiempo de Fagúndez con gol incluido y una actuación pareja de Trezza, quien se fue aplaudido por todo el Gran Parque Central, que estuvo lleno.

Nacional jugará en Santa Fe con una ventaja de dos goles y con la confianza de lo que viene mostrando a nivel colectivo. El gol de visitante ya no tiene la incidencia de antes, pero el Bolso volvió a dejar su arco en cero y a Sergio Rochet siguen sin anotarle un gol.

El tricolor está en racha positiva, respaldada por el rendimiento colectivo y con figuras que están en un nivel alto.