COPA SUDAMERICANA

Pablo Repetto tomó la decisión de no mandar a Luis Suárez desde el inicio del segundo duelo por los cuartos de final de la Copa Sudamericana ante Goianiense. Nacional arribó a Brasil con la presión de ganar para ser semifinalista y el Pistolero se perfilaba como una pieza importante para volcar su experiencia y juego en el segundo tiempo.

El tricolor sabía que no iba a ser fácil, pero no se imaginó nunca que iniciaría abajo desde el minuto número 5, cuando por intermedio de Luiz Fernando (el mismo que marcó en Montevideo), Goianiense se puso en ventaja. Pese a que el tricolor intentó rearmarse y ponerse a tiro, los norteños convirtieron el segundo previo a ir al descanso, lo que empeoró la situación.

Afuera esperaba Suárez, que vivió los dos primeros tantos desde el banco de suplentes. Mientras calentaba vio el segundo y fue allí cuando el salteño se llevó las manos a la cintura, suspiró y no ocultó la preocupación en sus gestos mientras la parcialidad local festejaba. 

Nacional nunca se recuperó de los golpes y ni con Luis Suárez en cancha, que logró un remate peligroso, pudo remontar las serie que finalizó 4-0.