Tomás Peiro, El Tiempo/GDA
Texas es uno de los principales aliados que tiene el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, en su política migratoria basada principalmente en realizar deportaciones masivas contra inmigrantes indocumentados, siendo muchos de ellos latinos en EE.UU. El estado sureño está liderado por el gobernador republicano Greg Abbott y tiene una mayoría republicana en ambas cámaras legislativas estatales, y existe una nueva agencia de seguridad en el estado de Texas que podrá detener a migrantes, por lo que muchos están bajo alerta.

De acuerdo a un informe del medio Telemundo, desde el sábado 1 de marzo, agentes de la Guardia Nacional podrán hacer detenciones migratorias para colaborar en el plan de la administración Trump de realizar deportaciones masivas.

En concreto, 60 miembros de la Guardia Nacional participaron de una ceremonia junto a agentes de la Patrulla Fronteriza, en la que se les encomendó arrestar y procesar a toda persona que cruce ilegalmente la frontera para expulsarla con prontitud.

Esto se realizó bajo el Título 8, que establece que los migrantes que sean atrapados cruzando ilegalmente la frontera entre México y Estados Unidos pueden ser arrestados y procesados para una deportación acelerada.

El lunes 24 de febrero, operativos del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE, por sus siglas en inglés) provocaron temor en la comunidad migrante de Texas y California, donde se registraron serias denuncias contra las autoridades.

Foto: ICE

En Texas, específicamente en la zona de Houston, agentes del ICE arrestaron a dos trabajadores de origen mexicano y hondureño en sus sitios de trabajo, según un informe de Telemundo.

Mientras tanto, en California, la familia de un migrante identificado como Ulises Peña denunció que el viernes 21 de febrero fue detenido por agentes de ICE cerca de San José. De acuerdo con declaraciones de sus familiares, más de 10 oficiales lo esperaban fuera de su domicilio y lo arrestaron sin mostrarle una orden.