Jefe de Río Negro fustigó al PN, blancos analizan retirarse de diálogo por seguridad y Negro evalúa respaldo

El futuro del jefe de Policía de Negro, Sergio Solé, luego de haber participado de una reunión con la Mesa Política del Frente Amplio local la semana pasada, es incierto. Haberse reunido con la dirigencia del partido de gobierno generó una enfática reacción de dos diputados nacionalistas y del presidente de los blancos, Álvaro Delgado, quienes solicitaron al ministro del Interior, Carlos Negro, que dispusiera en forma "inmediata" su renuncia. Todo se complicó aún más en las últimas horas, y en el Partido Nacional analizan los pasos a seguir, luego de sentirse "agraviados" por declaraciones públicas de Solé.

El inicio de este martes, la disposición del titular de la cartera de seguridad era respaldar al jerarca, en gran parte porque en la cúpula del Ministerio del Interior no compartieron el análisis jurídico que habían hecho los nacionalistas al esgrimir que un jefe de Policía estaba incumpliendo la Constitución y la Ley Orgánica Policial al participar de una actividad política. La visión de la cúpula ministerial es que esto está lejos de ocurrir ya que Solé —más allá de ser jefe de Policía, en un cargo que es de particular confianza— lleva ocho años como retirado policial, con lo que no tiene ninguna inhibición al respecto —la ley de urgente consideración del gobierno de Luis Lacalle Pou dispuso que tras dos años desde el cese de la actividad, los funcionarios policiales quedan eximidos de la limitante constitucional y legal.

Según supo El País, estaba pautada para este miércoles una reunión entre Negro y Solé en Montevideo, en el despacho del ministro, para luego manifestar el respaldo. Sin embargo, a la mañana el jerarca hizo declaraciones públicas en una radio de Río Negro que complicaron doblemente el panorama, porque los blancos intensificaron sus críticas y las consecuencias que analizan en caso de que Solé no sea removido, y porque ahora la postura de Interior sobre el eventual respaldo es algo que está bajo análisis.

"Está en proceso de decisión el tema y se maneja con absoluto hermetismo para el cuidado de las personas y las instituciones", dijo a El País una fuente del Ministerio del Interior.

Los blancos, mientras tanto, entienden que las afirmaciones de Solé de este martes son "gravísimas", dijo el diputado Pablo Abdala —subsecretario de Interior durante el anterior gobierno—, que estaba al aire en el programa Encarando la mañana, de Radio Impacto de Fray Bentos, cuando Solé envió un mensaje por escrito preguntando si la "vara ética" con que el Partido Nacional estaba midiendo su accionar era la misma que midió "a los que mintieron en el Parlamento" en 2024, en referencia a la interpelación que promovió entonces el Frente Amplio por el caso Marset.

Pero Solé no se quedó en eso. Preguntó también por "los que entraron por el garaje de la Torre Ejecutiva, (y) los que rompieron un documento en el piso 11", en alusión a la reunión mantenida entre los subsecretarios Carolina Ache y Guillermo Maciel, y el asesor Roberto Lafluf —en la que en un momento también participó Lacalle Pou— y cuyo contenido hoy investiga la Fiscalía por la presunta destrucción de un documento público. También hizo referencia a "los que se robaron la mitad de Artigas" o "los que se metieron 30 ediles en Salto Grande".

Esto ahora "condiciona" la participación de los blancos en el diálogo nacional por seguridad que convocó el gobierno, que ya tuvo un encuentro días atrás y que tendrá otro la semana próxima.

"En última instancia, será el directorio el que tomará una decisión, pero me parece que es de sentido común —dijo Abdala a El País—. Es muy difícil que por un lado te inviten a dialogar y el mismo que te invita, te agravia".

El senador Javier García fue por la misma línea, en un tuit publicado esta tarde: "Diálogo por seguridad y jefe de Policía de Río Negro agraviando al Partido Nacional es incompatible. La pelota está en cancha del presidente. Así no".

Delgado, por su lado, mantuvo una conversación con el ministro Negro también en las últimas horas. Y también en X dio a entender lo mismo: "Mientras el gobierno convoca a los partidos políticos a un diálogo por seguridad, una jerarquía policial se dedica a polemizar y a agraviar al Partido Nacional. Eso es inadmisible".

Si Solé no renuncia, los blancos tratarán formalmente la posibilidad de retirarse del diálogo en la sesión de su directorio el próximo lunes.

A su vez, esperan la asistencia de Negro este jueves en la comisión de Seguridad y Convivencia Ciudadana de Diputados, convocado de urgencia por este tema.