La historia de "¡No sea nabo!", la insólita frase que Mujica soltó una noche en Canal 12 y pasó a la historia

Redacción El País
A lo largo de su vida pública, José Mujica —que murió este martes a los 89 años, tras padecer un cáncer de esófago— protagonizó decenas de momentos memorables. Pero hay uno que se volvió emblemático, por lo que representó y por cómo caló en los uruguayos, hasta volverse parte del acervo popular. Ocurrió en televisión, en 2003, cuando Pepe aún era senador y Néber Araújo lo entrevistó en Agenda confidencial (Canal 12).

Exguerrillero y preso político, Mujica destacaba en el Parlamento por su estilo informal y singular. No usaba traje, llegaba al Palacio Legislativo en moto y hablaba, como lo hizo toda su vida, en un lenguaje popular y llano. Pero ese viernes 10 de octubre, cuando se sentó frente al serio Néber Araújo, nadie imaginó que la entrevista terminaría transformándose en uno de los momentos más recordados de la televisión uruguaya.

Es que en un momento, cuando el entrevistador le preguntó sobre la postura del Frente Amplio respecto al agro, Mujica lanzó: “¡No sea nabo! ¡Eso es lo que marcha!”. El comentario, directo e insólito en la pantalla, llamó la atención de inmediato. En calma, Araújo le respondió: “Se lo tolero porque tiene más canas que yo”.

Durante los 50 minutos del programa hubo otras tensiones o "chisporroteos", como los llamó el propio Mujica, pero la cordialidad nunca se perdió. Se despidieron brindando y Araújo prometió que iba a volver a invitarlo "muchas veces", porque lo respetaba "mucho". No ocurrió: a fines de ese mismo año dejó Canal 12, y desde entonces mantiene una vida alejada de los focos. Hoy tiene 87 años.

Aquel episodio de Agenda confidencial se convirtió en mito. La frase “¡No sea nabo!” fue repetida hasta el cansancio y tomada por el Carnaval. Quedó instalada entre los uruguayos con una versión que, en verdad, nunca existió: un "¡No sea nabo, Néber!". La frase original no incluía el nombre del periodista.

Foto: Captura "Agenda confidencial".

Aquella entrevista tuvo de todo. Desde el inicio, Araújo planteó un enfoque frontal. En un momento le dijo: "Cuando el movimiento tupamaro tomó las armas, querían el poder. Hoy por las vías de las urnas, ustedes quieren el poder. No me tome por ingenuo”, y Mujica replicó: “¿Qué va a ser ingenuo, usted? Usted fuma adentro de una garrafa”.

Más tarde, al hablar del referéndum por la ley de Ancap, Mujica defendió al ente público y apuntó a la carga impositiva. “El problema no es Ancap. El problema es del Estado uruguayo”, dijo. Y cuando Araújo retrucó con que el FA siempre quiso más Estado, Mujica replicó: “Yo soy anarquista, usted sabe”.

Entonces llegó el momento clave. Araújo planteó una larga pregunta que terminaba con una referencia al agro: “¿Cómo va a hacer con la vaquita, la lanita y unos granos?”. La respuesta fue tajante: “Si es lo único que está creciendo. No desprecie, que lo único que camina es eso. ¡No sea nabo! Eso es lo que marcha”.

“Escúcheme, se lo tolero porque tiene más canas que yo… Yo vengo del campo, no repugno de eso”, dijo el anfitrión. “Usted viene de Melo. A ver las manos… Usted nunca cruzó un alambre”, redobló el invitado. “Usted privatizó su chacra, usted la dio en concesión”, cerró el periodista.

En 2009, Araújo dijo a El País que en el momento del exabrupto, pensó en darle a Mujica una respuesta que nunca esbozó: “Si le respondía ‘usted es un viejo coprófago’ como había pensado, estaría a su altura. Un periodista no debe perder la perspectiva de que, tratándose de un político, representa a una porción de nuestra soberanía que lo votó”.

Hoy, tras la muerte de José Mujica a los 89 años, muchas huellas de su vida —su moto, su Fusca, su perra Manuela de tres patas, su historia de amor con Lucía Topolansky e incluso aquel espontáneo “no sea nabo”— vuelve a resonar como uno de sus momentos más recordados, un fiel reflejo de una personalidad que, en lo bueno y lo no tanto, jamás pasó desapercibida.