Llegó al remo sin saber nadar, brilló en Tokio 2020 y es oro mundial: la increíble historia de Felipe Klüver

Suena el Himno Nacional de Uruguay y de fondo de escucha la voz de Felipe Klüver entonando esas estrofas. La bandera está en lo más alto del podio gracias al remo y la alegría del mercedario es enorme. “¡Vamo Uruguay, vamo!”, grita al finalizar la ceremonia.

Con un tiempo de 6 minutos, 54 segundos y 10 décimas, el olímpico en Tokio 2020 se consagró campeón del mundo en el single scull peso ligero en China, logrando así la primera medalla de oro para Uruguay en un Mundial senior de esta disciplina que tanto le ha dado a la Celeste. Y le sigue dando.

Oriundo de Mercedes, egresado de la UTU y actualmente defendiendo al Club de Regatas Flamengo de Río de Janeiro, Felipe estampó su nombre en la más rica historia del deporte uruguayo.

Klüver ganó la Final A en Shanghái y quedó por delante del austríaco Julian Schoeberl y el irlandés Thomas McCarthy. Fue épico. Pero más épico es cómo el remo se metió en la vida de varios deportistas, entre ellos Felipe, y cómo los deportistas se brindan a una disciplina que volvió a poner a la Celeste en órbita.

Foto: EFE.

En 2015 y con 15 años, Klüver tuvo su primer contacto con el agua a nivel deportivo. Antes había jugado al fútbol, básquetbol y rugby.

Pero una tarde cualquiera en Mercedes, un amigo le pidió que lo acompañara a verlo entrenar ya que estaba haciendo remo. Y, como buen amigo, allá fue Felipe. Vio todo el entrenamiento y al finalizar, recibió una invitación especial: “Uno de los profesores, Carlitos Melendrez de la ciudad de Mercedes que estaba en la escuelita, me dijo si quería subir a la canoíta. Yo de corajudo porque no sabía nadar y no había tenido contacto con el río, me subí, y desde ese momento me encantó”, le recordó Klüver a Ovación en 2021.

Tanto le encantó la “canoíta” que no se bajó más y ahí comenzó una carrera meteórica. “Tenía que estar todo el día entrenando, salía al agua y se me olvidaban los problemas. Me encantó y me dediqué a eso”, confesó.

Foto: EFE.

Al poco tiempo vino la charla con los padres con un pedido claro: dedicarse al remo de manera profesional. Y así fue. Ahí empezó Felipe a hacerse un nombre, a competir, a brillar y a demostrar todo su potencial.

En 2020, pandemia mediante, llegó una decisión clave: mudarse a Montevideo. ¿El responsable? Osvaldo Borchi, argentino que por entonces era entrenador de la selección uruguaya y se lo llevó a vivir a su casa. Y tanto pulió a Felipe que lo ayudó y mucho a clasificarse junto a Bruno Cetraro a los Juegos Olímpicos de Tokio 2020, donde hicieron historia con un sexto puesto —y Diploma Olímpico— en la Final A del doble scull peso ligero.

Luego de Tokio 2020 hubo vaivenes, pero el remo no se fue de la vida de Felipe, ni Felipe del remo. Las cosas cambiaron, la categoría también. Pasó al single scull peso ligero —no es olímpica— y vinieron tiempos dorados.

En 2022 fue campeón del mundo Sub 23 en Varese, Italia y medalla de plata en el Mundial de Polonia. En 2025 ganó la medalla de oro en las dos primeras etapas de la Copa del Mundo —torneo diferente al Mundial— en Varese y en Lucerna y ahora, disfruta de ser el mejor remero del mundo en el single scull peso ligero. El disfrute es totalmente merecido.

En la noche del lunes 22 de setiembre (hora uruguaya), Felipe Klüver hizo su estreno en el Mundial de remo de Shanghái, China, y con un tiempo de 7 minutos, 05 segundos y 58 décimas ganó su serie clasificatoria en el single scull peso ligero y avanzó directamente a las semifinales de esa prueba.

Volvió a salir a escena en la noche del miércoles 24 y otra vez volvió a ser primero en el heat 2 de las llaves de semis. Con un tiempo de 7 minutos, 28 segundos y 40 décimas, fue primero y pasó a la Final A, la que iba a definir las medallas del Mundial de remo en tierras asiáticas. Y como no podía ser de otra manera, el mercedario de 25 años fue primero otra vez y con un registro de 6 minutos, 54 segundos y 10 décimas se colgó la medalla de oro. ¡Épico!

Marzo de 2018. La selección uruguaya de remo, con Ruben Scarpati como uno de los entrenadores, brilló en la Copa América de Nordelta, en Argentina, conquistando 18 medallas: siete de oro y 11 de plata.

Felipe Klüver integró ese plantel con apenas 17 años —en esa selección también estaban Bruno Cetraro, Marcos Sarraute, Zoe Acosta, Romina Cetraro y Martín González, entre otros— y ganó un oro en el dos sin timonel junto al Colo Leandro Rodas. Como dato particular, en ese torneo Scarpati no fue el técnico celeste por su condición de director de esa Copa América, pero estaba ahí. Estuvo en el proceso. Y lo sigue estando.

Foto: EFE.

Los años pasaron, los eventos también. Hubo alegrías, tristezas y tragos amargos. Pero las buenas siempre llegan y el sábado llegaron. ¡Y de qué manera!

Klüver conquistó el oro en el single scull peso ligero y entre tantas publicaciones de redes sociales, no se olvidó de quien ahora —después de tantos años compartidos en la selección— es su entrenador en Flamengo: “Solo palabras de agradecimiento a la persona que me trajo y creyó en esta medalla, que confió en mí y me levantó la cabeza y me mostró el camino cuando no sabía cómo seguir. Hoy esta medalla se la dedico a él por todo el trabajo que hace día a día. Simplemente gracias Ruben”.