Cuando hay calidad no necesita demasiado tiempo para brillar. O al menos para mostrar destellos de talento. Y eso fue lo que hizo Thiago Helguera en el triunfo de Nacional ante La Luz. El mediocampista sanducero hizo su debut de forma oficial en el tricolor con apenas 17 años al ingresar a los 67 minutos de juego en reemplazo de Diego Zabala, una de las figuras del partido.

Al entrar compartió el centro del campo junto con Marcos Montiel y Diego Rodríguez. Y el estar bien rodeado le permitió jugar con soltura para mostrar pinceladas de calidad. En una de sus primeras intervenciones arriesgó con un pase cercano que fue interceptado por el rival a los 72‘, pero lejos de agachar la cabeza y frustrarse por el error fue con prisa a recuperarla. ¿Y qué hizo? La recuperó. Podría habérsela sacado de encima con un pelotazo hacia adelante, pero escogió mostrar su fútbol.

Con un rival asediándolo, hizo un rodeo que lo dejó absolutamente solo con toda la perspectiva de campo hacia adelante y luego entregó un pase preciso a la derecha. Para el Gran Parque Central eso no pasó desapercibido. Y se lo hicieron notar con una lluvia de aplausos justo el día de su estreno.

Foto: Juan Manuel Ramos.

Por si eso fuera poco, Thiago recibió palabras de apoyo del capitán Sergio Rochet y Diego Polenta una vez que se terminó el partido mientras se tomaba una foto con la tribuna Abdón Porte de fondo. Los dos experimentados jugadores del tricolor lo esperaron para abrazarlo.

Y tras el partido Álvaro Gutiérrez no dudó en elogiar su capacidad: “Es un gran jugador, tiene unas grandes herramientas y hay que ir con cuidado y despacio para que las pueda desarrollar. Era un partido propicio, íbamos ganando, no teníamos prácticamente obligaciones y jugábamos en casa con nuestra gente. Y por eso era propicio para su debut. Creo que lo hizo con una nota excelente”, inició el técnico de Nacional, que luego expresó en qué lugares del campo se puede desenvolver mejor Thiago Helguera: “Él de cinco es un gran distribuidor, capaz le falta físico, pero tiene 17 años y parece una mojarrita, como a veces le digo yo, porque cambia de dirección en fracciones de segundo y es chiquito. Estamos muy contentos con él. Hay partidos que se van a dar para que entre y otros no tanto, pero en cualquiera de las tres posiciones del medio puede jugar”.