Por Sofía Berardi
Lateral izquierdo, 24 años. Uruguayo con más títulos ganados en Palmeiras (5), uno cada 15.6 partidos. El cuarto con más encuentros (78), el tercero con más triunfos (49) y 10° extranjero con más victorias. Se llama Joaquín Piquerez y se convirtió en una pieza fundamental del verdão.

"Voy a pelear por un lugar en las Eliminatorias", dijo el futbolista a Ovación, mientras trabaja para volver a la selección uruguaya. Piquerez habló acerca de la obligación de ganar títulos con Palmeiras, cómo fue su adaptación al fútbol brasileño y qué tuvo que cambiar. A su vez que confesó su sueño de que lo dirija Klopp, por qué no se fue a España y a quiénes ve en el fútbol uruguayo.

-¿Después de casi dos años, te acostumbraste completamente al fútbol brasileño?

-Hay una diferencia muy grande y todo proceso lleva su tiempo. Al principio me costó por las canchas, el estado de los campos, la cantidad de partidos, los rivales y el nivel que hay acá. En julio cumplo dos años y creo que ya estoy adaptado tanto físicamente como mentalmente. Estoy tranquilo, ahora comenzó el Paulista y venimos primeros, así que vamos por el buen camino en 2023.

-¿Para un uruguayo es difícil entrar en un plantel brasileño? Me refiero a si hay cierto recelo con el extranjero.

-Difícil no, creo que cuestión de acostumbrarse y encajar bien en el equipo y sí, en ese sentido, creo que nace un poco desde el jugador, mismo del país, el decir este extranjero qué está haciendo acá. Pero es cuestión de adaptarse, de hacerse sentir parte y de ser uno más. Al principio fue un poco difícil pero había un par de extranjeros, un chileno (Kuscevic) y el paraguayo (Gómez), que me ayudaron y me recomendaron cosas. Ni bien llegué ganamos la Copa Libertadores, conquistar títulos ayuda a que el grupo se sienta más unido, de ahí para adelante fue todo muy positivo a nivel grupal.

-¿Cómo viviste coronarte campeón de la Copa Libertadores 2021 en Uruguay?

-Fue tremendo, una experiencia única e inolvidable, con ese plus de ser en el Centenario, siendo uruguayo y anfitrión. Muchas personas de Uruguay me apoyaron y por suerte pudimos ganarla.

-¿Sentís que Palmeiras está obligado a levantar títulos?

-Sí, en Brasil Palmeiras es uno de los equipos grandes, obvio que no es como Uruguay que tenés a Nacional y Peñarol, que sacan mucha diferencia institucional con el resto de los equipos, acá es más peleando. Es el más ganador de Brasil y tiene muchos hinchas, constantemente está obligado a ganar.

-¿El hincha brasileño es exigente como el uruguayo?

-Son muchos más que en Uruguay y bastante fanáticos; si perdés dos partidos seguidos aunque vengas primero te van a marcar los puntos a los entrenamientos, pero es costumbre, estamos en un equipo grande y es parte de eso.

-¿Hubo algo que te costó cambiar desde lo táctico o en cuanto a hábitos?

-Llegué (de Peñarol) con el sistema de Mauricio Larriera, siendo más ofensivo y acá cambié un poco. Cuando nosotros tenemos pelota en salida acostumbro a hacer la salida como un tercer zaguero. Todo cambio lleva un tiempo, voy por ese camino. Este 2023 me ha tocado empezar más retrasado, que no es tanto lo que me gusta a mí, pero hoy en día el fútbol es muy versátil y hay que adaptarse a todo, apoyar al equipo desde donde toque.

-¿Sentís que el hecho de que Palmeiras mantenga el plantel es una clave para el éxito?

-Este año salieron dos titulares y dos reservas y no vino nadie. Salió una estadística que comparaba los primeros 10 partidos de este año con los del año pasado y ahora tenemos mejores resultados. Es un buen trabajo que se hace desde presidencia y cuerpo técnico para mantener al plantel enfocado en un camino que está dando sus frutos.

Foto: Prensa Palmeiras.

-Hace un mes ganaste la Supercopa de Brasil ante Flamengo, ¿cómo viviste el 4-3?

-Empezamos perdiendo, pero estamos acostumbrados a cualquier tipo de circunstancia. Fue una final muy linda de ver, pero no tanto de jugar. 4-3 en una final es medio loco. Por suerte pudimos ganarla y llevar una copa más para el club.

-¿Qué tan importante es el apoyo de tu familia y qué lugar ocupa tu padre que se ha convertido en una celebridad para los hinchas?

-Estamos a dos horas de vuelo, mi padre me ayuda mucho en la parte empresarial, mi hermana vino en enero y mi madre es a la que le cuesta un poco más venir, pero cada dos o tres meses intento que vengan porque es lindo compartir, más para uno que está todo el año solo. Mi padre tomó ese rol, acá en Brasil se hizo muy conocido por el tema de las redes sociales, a él le gusta y el hincha lo comparte. Él se divierte con eso. Hace todo tipo de memes, cuando ganamos, cuando pierden rivales. Esa relación que tiene con la hinchada es muy gracioso.

-¿Le llamaste la atención por alguna publicación?

-Al principio le dije que cuando las cosas van bien está todo bien, pero va a haber momentos que no va a estar todo bien y hasta a él le van a caer. Pero es grande, sabe lo que hace y se tiene que hacer cargo de las consecuencias.

-¿Cómo hace un futbolista para encarar el día siguiente en su club cuando se queda afuera de la lista de la selección?

-Fue un bajón bastante grande porque tenía mucha ilusión, el buen rendimiento a nivel deportivo durante el año estaba. Uno se viene imaginando desde antes si va a ser citado o no, porque hay llamadas previas o algún tipo de indicio que te indica si vas a estar o no, pero uno nunca pierde la fe hasta el momento en que ve la lista. Sí me bajoneé, por suerte estaba acá (en Brasil) con mis amigos y fue un Mundial que se jugó en diciembre, entonces estuve de vacaciones bastante cerca de la fecha y pude ir para Uruguay para despejar un poco la cabeza. Hay que seguir para adelante, si bien el Mundial es cada cuatro años, algo atípico, hay que seguir trabajando de la misma manera, que eso fue lo que me trajo hasta acá y seguir peleando por un sueño. Empiezan las Eliminatorias (2026), voy a pelear un lugar para poder estar ahí.

-¿Qué es lo que trabajás día a día para asegurarte estar en la próxima convocatoria?

-Hago lo mismo que vengo haciendo desde que llegué al club, que es entrenar, mantener la cabeza, tratar de dar lo mejor en los partidos, independientemente de que se den los resultados o no. Mejorar lo que se hace bien, ser autocrítico con lo que no y mejorarlo con al siguiente partido.

-¿Crees que el posible cambio de DT es una chance para que regreses?

-Estoy un poco distante de la resolución, venga el técnico que venga, o si sigue Diego (Alonso), es como te digo, voy seguir trabajando, primero para mí, y si después llega una citación, bienvenido sea.

-¿Seguís a los equipos en los que jugaste?

ESTEFANIA_LEAL

-Sí, cada vez que puedo los miro. No sé si es que soy uruguayo, pero me gusta el fútbol de allá. Obviamente que miro a Peñarol, ahora trato de ver a Boston River, que tengo un amigo muy cercano que juegue ahí (Emanuel Beltrán) y tengo a mi primo en Liverpool (Leandro Otormín), así que tengo bastantes allegados, excompañeros y amigos en el fútbol uruguayo.

-Con Beltrán quizá te podés cruzar en Libertadores

-Ojalá. Hablo siempre con Ema de cruzarnos en fase e grupos contra Boston River. Me puedo cruzar para pegarle alguna patada, como juega de lateral derecho seguro que nos cruzamos en la cancha.

-Hablando de clubes pasados, ¿sentís que Defensor no te aprovechó como debía?

-No me fui como quería, me fui mal, a ningún jugador le gusta irse así de un club en el que estuvo años. Yo me formé en Defensor, pero es parte del pasado, son decisiones que se toman y bueno, por suerte salió todo bien, me fui a River, un club que me recibió muy bien, estuve poco tiempo, pero se generó cariño y hasta el día de hoy estoy 100% agradecido.

Foto: Archivo El País.

-Me enteré de que te gustaría ser dirigido por Jurgen Klopp, ¿por qué?

-Lo empecé a seguir en 2013, por la Champions que hizo con el Borussia, que es un grande, pero no compite con las potencias, e igual llegó hasta donde llegó (perdió la final ante Bayern). Luego ganó todo lo que ganó con Liverpool, y también algunas declaraciones de él, como que ‘su fútbol es rock and roll’. Me gusta mucho su manera de vivir el fútbol y por qué no un día ser dirigido por él.

-En un momento estuviste por irte al Betis de España, ¿qué pasó?

-Tuve la oportunidad, pero acá en Palmeiras son muy estrictos, si dicen no, es no. Soy un jugador importante para el club, así que la posibilidad de ser transferido no estaba.

-Tenés en tus redes sociales la frase "si nos olvidamos de dónde venimos, no sabemos hacia dónde vamos", ¿qué significa para vos?

-Es una frase que me parece muy real, que uno puede llegar a ser un futbolista exitoso, pero no se puede olvidar de todo lo que pasó para llegar hasta ahí. Hay que valorar el esfuerzo que uno hizo para estar ahí, no dejarse estar y seguir subiendo en la escalera de los sueños.