Peñarol se despertó a tiempo, mostró rebeldía y le regaló un triunfo a sus hinchas para el aniversario

Lo jugó incómodo desde el arranque cuando Ignacio Sosa le sirvió un pase a Franco Rossi y solo un resbalón salvó a Peñarol. Los 40 minutos siguientes fueron de dominio absoluto de Cerro Largo, aunque al principio le costó traducir la superioridad en situaciones ofensivas.

Sin embargo, pegó primero a los 21‘ después de una definición de Lucas Correa dentro del área. En primera instancia, fue anulado por fuera de juego, pero luego el VAR lo terminó convalidando con justicia.

Cinco más tarde llegó el susto para el Carbonero luego de una pared entre Rossi y Lautaro Vázquez, que reventó el palo con su definición cruzada. En la jugada siguiente, el propio Vázquez volvió a avisar con su volea. Y el clima de partido era hostil para el Mirasol, que padecía el encuentro y no lograba hacerle llegar pelotas de gol a Matías Arezo. La hinchada le hacía sentir el rigor a Peñarol cantando en pleno ataque: “Un poco más de huevo...” y su equipo no fluía. Incluso el propio Diego Aguirre se molestó con la demora de un alcanzapelotas.

Con la presión de tener que salir a buscarlo y no perder pisada en el Clausura, el Manya adelantó sus líneas y tuvo su primera ocasión de peligro a los 45‘ con un cabezazo de Maxi Silvera a las manos de Gino Santilli.

Cuando parecía que el primer tiempo se apagaba, Eric Remedi sacó un golazo de la galera. La clavó al ángulo desde unos 30 metros como si estuviera emulando aquella anotación frente a Olimpia por Copa Libertadores. Fue su punto de inflexión para un complemento distinto.

Foto: Leonardo Mainé.

Los ingresos de Leandro Umpiérrez y Diego García le dieron vitalidad al equipo. Tomaron el protagonismo y empezaron a someter al rival. La presión de Ignacio Sosa fue efectiva a los 55', se la cedió a Leo Fernández y él volvió a mostrar su faceta de asistidor con un pase filtrado para Silvera, que hizo su decimotercer gol en el año.

Foto: Leonardo Mainé.

La superioridad del Mirasol se sostuvo y Santilli le tapó el mano a mano a Diego García. Luego Leo Fernández forzó al arquero con su tiro libre y, en la última, Jaime Báez marcó en su regreso a la competencia por Liga AUF Uruguaya.

La hinchada recobró el protagonismo comenzando a celebrar de forma anticipada su aniversario al lanzar fuegos artificiales. “A pesar de los años, los momentos vividos...”, entonaron.

Peñarol despertó a tiempo, ganó 3-1 y se asegura la cima en soledad del Clausura por al menos una fecha más. A su vez, le pone presión a Nacional en la Anual al quedar a tres puntos a la espera de su compromiso.