Así lo reconoció el propio ministerio en una respuesta a un pedido de informe del diputado nacionalista Pablo Abdala.
La discusión seguramente será eterna y universal, pero su intensidad no es ni atemporal ni independiente de la tradición, situación económica o cambios culturales que las sociedades van procesando.
Racionalizar o no los más de 300 programas que nuclea el Ministerio de Desarrollo, esa es la cuestión.
Hace tres años el Mides pide a las ONG con las que trabaja que sus empleados tengan el liceo terminado. Esto desencadenó una ola de juicios por parte de quienes desempeñaban tareas en tercerizadas yfueron cesados. En tanto, la cartera sigue contratando organizaciones sin previo paso por licitación.
El Mides volcó un dineral a planes cuyos resultados dejan mucho que desear, tal vez porque en realidad practicó un embozado clientelismo político.
El Cenatt atendió a más de 15.000 personas que necesitaban prótesis, calzados especiales o silla de ruedas, gracias a un convenio de la cartera con La Habana. Pero expertos cobran bajos salarios, el Tribunal de Cuentas observó el gasto y los pacientes muchas veces no acceden a las rehabilitaciones.