Jonathan Urretaviscaya

Después de disputar 40 encuentros con la Escuelita de Sayago durante 2024, el extremo de 34 años defenderá su camiseta número 12 a lo largo de su carrera profesional.
Y hay más para La Escuelita: en las próximas horas busca cerrar a un volante central de Argentina que prefirieron no nombrarlo "para no aumentar la inflación".
El golero de la selección de Panamá regresa al Campeonato Uruguayo tras su pasaje de un año y medio por la Unión Española de Chile.
El futbolista explicó por qué salió de Boston incluso antes de finalizar el Torneo Intermedio y confesó cómo fue el contacto con el tricolor. No descarta la opción de River Plate, pero hay otro club más cerca.
El exjugador de River Plate y el de último paso por Fénix continuarán en el certamen local para la temporada 2023 y sus respectivos clubes le dieron la bienvenida en redes sociales.
MERCADO Jonathan Urretaviscaya en su regreso a River Plate. Foto: @cariverplateuru. Y casi 15 años después de su debut en la Primera División de River Plate, Jonathan Urretaviscaya retorna al Darsenero al que defenderá durante la temporada 2022 tras convertirse en una de las altas para el Chavo Díaz. Luego de disputar la temporada 2022 en Rentistas, en lo que fue su tercer cuadro en el fútbol uruguayo ya que también vistió la camiseta de Peñarol, retorna al club que lo vio nacer y con el que se estrenó en la máxima categoría. ?? ¡Bienvenido al Darsenero, Jonathan!
CAMPEONATO URUGUAYO DANIEL ROSA Con el Campeonato Uruguayo ya finalizado, que vio a Peñarol coronarse como el campeón, quedaron en la retina algunos jugadores que deslumbraron por su buen juego, pero también otras grandes apuestas que jugaron menos de lo esperado durante el 2021. ¿De quiénes se trata? Fue el gran nombre en el mercado de pases antes de iniciar la temporada. Sud América, que venía de Segunda y necesitaba asegurar la permanencia, trató de armar un gran equipo y apostó por el argentino, de 34 años, que brillara en el Boca Juniors de Carlos Bianchi. Le costó mucho los primeros partidos pero se entendía, ya que la IASA jugaba de local en el estadio Lavalleja de Minas que tenía un muy mal piso, pero luego se mudó a Jardines y nunca Mouche terminó de convertirse en el dueño del equipo, por más que al final terminó llevando la cinta de capitán. Disputó 28 partidos (solo se perdió dos por sanción), fue titular en 24, jugó 2069 minutos (74’ por juego) y anotó 3 goles. Anotó el penal decisivo en la definición de la semifinal por el Campeonato Uruguayo para darle el título 2021 a Peñarol y así se lo recordará, pero su paso por el aurinegro dejó muy pocos buenos recuerdos. Llegó con una larga inactividad, se lo esperó, pero estuvo más afuera que adentro del campo. Solo participó de 10 encuentros, una sola vez fue titular y completó 193 minutos, es decir que su promedio en cancha fue de apenas 19’ por partido. Ante la urgencia de ganar el Clausura para pelear por el título, Peñarol fue a buscar a este zurdo argentino de 33 años pensando en desnivelar en los minutos finales, pero casi no lo disfrutó, aunque terminó festejando gracias a él. Para celebrar la primera participación en la Copa Libertadores, Rentistas armó un plantel competitivo, compuesto por futbolistas de experiencia y uno de ellos fue Jonathan Urretaviscaya, quien había quedado libre de Peñarol luego de haber jugado poco en 2020 por la lesión de ligamentos cruzados que sufrió. Debió haber sido la estrella del Bicho Colorado, pero lejos estuvo de ello. Disputó 32 encuentros (27 de titular), completó 2.100 minutos (66’ por partido en promedio) y anotó tres goles. Poco para un jugador de su categoría y en buena edad (31). Rentistas fue último en su grupo de la Libertadores y recién se salvó del descenso faltando una fecha. Un concepto similar al de Urretaviscaya se debe dar de Tabaré Viudez, el volante que con 32 años también llegó a Rentistas con la misión de ser uno de los líderes futbolísticos del equipo. En su defensa se puede decir que mientras Martín Varini fue el técnico lo uso menos de lo deseado, pero terminó con 22 presencias (se perdió varios juegos además por lesiones) y apenas 732 minutos en cancha, lo que da un promedio de 33’ por encuentro. En Copa Libertadores, por ejemplo, solo tuvo 28 minutos, lo cual refuerza lo antedicho del poco uso que le dio el técnico que inició la temporada. Anotó un solo gol y fue importante, pues fue para el triunfo 1-0 sobre River Plate. Debió aportar mucho más. Llegó para aportar experiencia, calidad, pegada, manejo y asumir la responsabilidad en los momentos de presión. Sin embargo, su aporte fue casi nulo. Tuvo 30 presencias entre todos los torneos y sumó 1.027 minutos, promediando apenas 34’ por partido. Fue titular solamente en cuatro ocasiones y convirtió un único gol. Muy poco para lo que se fue a buscar. Nacional fue a buscarlo para que fuera una especie de Marcelo Gallardo en 2010 y a partir de su figura ir en busca del tricampeonato. No se logró el objetivo local, tampoco le fue bien en Copa Libertadores (eliminado en fase de grupos) ni en la Copa Sudamericana, donde se quedó en octavos de final. Peñarol depositó grandes expectativas en su llegada, porque precisaba un futbolista que marcara la diferencia por afuera cuando los rivales se cerraran. Llegó en medio del Apertura, se puso a punto porque no estaba jugando en Almería y debutó. Sin embargo, nunca fue el futbolista desequilibrante que había aparecido en el Rentistas campeón del Apertura 2020. Terminó con 13 presencias y solo 708 minutos en cancha, con ocho apariciones como titular y cuatro partidos completos. La última vez que fue tenido en cuenta fue el 18 de setiembre ante Fénix, cuando jugó 7 minutos. No aportó goles, aunque sí alguna asistencia. ¿Lo positivo? Tiene solo 19 años. Fue para muchos el mejor lateral izquierdo de la temporada 2020 en Liverpool, Nacional lo fue a buscar y lo trajo. Empezó como titular y bien, pero fue decayendo. Fue a la Copa América con la selección, volvió en el famoso vuelo pago por el club para jugar el clásico e hizo un gol en el 2-0 a Peñarol en el Gran Parque Central. Era su momento, pero no se consolidó. “Precisamos más desborde de Camilo”, decía el DT Martín Ligüera. Incluso probó con ponerlo como volante por izquierda, pero nunca llegó a meterse en el equipo. Tanto fue así que terminó como suplente, perdiendo el lugar con su excompañero en el negriazul, Christian Almeida, quien con gran actitud y hasta goles se ganó además el cariño del hincha.