CORONAVIRUS

Luego de la confirmación de los primeros casos de coronavirus en Uruguay, el gobierno anunció en conferencia de prensa una serie de medidas. Entre ellas, se informó que se instalaba la emergencia sanitaria y también que se suspendía desde ese momento la realización de todos los espectáculos públicos.

Además, en la conferencia el presidente de la República Luis Lacalle Pou dijo que “la exhortación es a no juntar gente”. y agregó: “Lo mejor es, en estos tiempos, inclusive quien habla, abstenerse de reuniones multitudinarias”.

Tras esto, la Policía recibió instrucciones para hacer cumplir las disposiciones del Poder Ejecutivo anunciadas el viernes pasado.

Una fuente del Ministerio del Interior indicó a El País que esa cartera “hará cumplir las medidas dispuestas por el presidente de la República respecto a la suspensión de espectáculos públicos o las aglomeraciones de gente, con el objetivo de minimizar el riesgo de contagio por el Covid-19”.

El informante agregó que “la Policía desalentará cualquier iniciativa contraria a la exhortación presidencial y, en caso de que algún ciudadano no cumpla con el pedido, se dará cuenta a Fiscalía”.

Esto quiere decir que la Policía tiene la orden de salir a controlar que no se incumpla la medida anunciada por el presidente Lacalle Pou.

“Lo que está prohibido es la aglomeración de gente en espacios públicos”, indicó la fuente y explicó que si la Policía visualiza una aglomeración de gente en un espacio público se le da cuenta a las personas que no se están incumpliendo con las normativas y luego se notificará a la Fiscalía.

Los fiscales entonces son los encargados de definir qué pasos se debe seguir.

“Si el organizador de un evento público o el responsable ya está notificado se da cuenta a Fiscalía y ellos dispondrán”, explicó la fuente.

Pero el principal trabajo de los efectivos policiales es detectar esos eventos públicos para después notificar a los responsables. De no hacer caso a dispersar a la aglomeración de personas, se da intervención a la fiscalía. “Son espectáculos públicos o similares donde haya aglomeración de gente”, explicó la fuente”.

En ese sentido la orden que tiene que cumplir la institución policial es la de recomendar cuando se detecta concentración de varias personas.

Ayer varios efectivos policiales salieron a patrullar por la avenida 18 de Julio. Los efectivos tienen la orden de prestar atención a lugares donde haya mucha concentración de público.

Por su parte, en la página web de la Jefatura de San José se publicó el pasado sábado un comunicado en el que se anunció que, en caso de no cumplirse con la suspensión “de todos los espectáculos públicos y/o reuniones de esa índole en espacios abiertos o cerrados”, la Policía actuará, teniendo en cuenta la Ley de Procedimiento Policial e informará a la Fiscalía correspondiente. “El jefe de Policía de San José ha dispuesto la inmediata fiscalización del cumplimiento de lo decretado. Se exhorta a toda la población del Departamento a actuar con responsabilidad y conciencia para evitar males mayores. En caso de que no se dé cumplimiento a lo establecido, la Policía actuante dispondrá la inmediata disolución de la reunión y de ser necesario actuará con los incumplidores bajo la figura delictiva de desacato”, indicó el comunicado.

Por otra parte, según indicaron fuentes policiales a El País, en el departamento de Rivera se suspendió un evento que se iba a realizar en el autódromo.

El Comité Departamental de Emergencias de Rivera le retiró la autorización a aquellos eventos públicos donde se esperaba una importante concentración de personas.

En lo que refiera a eventos privados (cumpleaños de 15 o casamientos, por ejemplo) no se requiere de un permiso estatal para poder realizarlos y tampoco existe una prohibición. Lo que sí existe es una “recomendación por sentido común” a que no se lleven adelante.

“No hay una norma que habilite a prohibirlos”, indicó la fuente. En ese sentido explicó que, si bien no existe una prohibición a concurrir a bares o locales bailables, “siempre se recomienda o se exhorta” a que no suceda por el riesgo que puede existir estar en un lugar donde haya aglomeración de personas.