Lubetkin explicó al FA la posición del gobierno sobre Israel y destacó votación de resoluciones de condena

Redacción El País
La postura del Frente Amplio (FA) —y varios de sus sectores— sobre la guerra en Medio Oriente es más crítica que la que mantiene el gobierno de Yamandú Orsi, una diferencia que ha generado inquietud dentro de la coalición de izquierda, que considera que lo que Isreal está cometiendo en la Franja de Gaza contra el pueblo palestino es un "genocidio", palabra que sin embargo la Cancillería de Mario Lubetkin no ha utilizado.

Las posturas son diferentes y seguirán siéndolo, porque mientras el Frente Amplio emite declaraciones de "tinte político", las del gobierno siguen la línea de una "cartera de Estado", remarcó este lunes Fernando Pereira, en una rueda de prensa que dio desde la Huella de Seregni luego de que el Secretariado Ejecutivo del partido de gobierno recibiera al canciller para que informara sobre la gestión que viene llevando adelante desde que asumió el actual gobierno.

Fuentes de la coalición de izquierda señalaron a El País que este tema estuvo entre las consultas que realizaron dirigentes, y que el ministro transmitió en la reunión los fundamentos de la "posición del gobierno", que a la hora de calificar las acciones de Israel en Gaza se ha referido a "masare" —o ha dicho, en palabras de la embajadora ante la ONU Laura Dupuy, que el Estado judío comete contra palestinos "violaciones al derecho internacional humanitario" consideradas "evidentes". Asimismo, explicó que para interpretar la postura de Uruguay en este conflicto debía analizarse lo que el gobierno "ha votado" en el último tiempo en foros internacionales, ya que se "ha acompañado resoluciones de condena", como por ejemplo la Declaración de Nueva York sobre el Arreglo Pacífico de la Cuestión de Palestina y la Aplicación de la Solución de Dos Estados, aprobada a fines de julio, agregaron los informantes.

"Desde el punto de vista del FA, lo que está pasando en la Franja de Gaza es muy grave —dijo Pereira—. Entendemos que se han generado una cantidad de mecanismos que nos llevan a pensar que se está cometiendo un genocidio y una afirmación de este tipo no la está haciendo el gobierno sino el Frente Amplio".

No obstante, siguió el presidente del FA, "el gobierno ha sido coherente en votar en todos los organismos de Naciones Unidades para que haya un alto al fuego". "Hay una posición coherente, pero obviamente el partido político puede ir más allá de lo que puede ir el gobierno", remarco´.

El tema de agenda en relación al conflicto entre Israel y el grupo terrorista Hamás, sobre el que se ha hablado reiteradamente en las últimas horas, es la decisión del gobierno de poner un "impasse" —es la palabra que prefieren utilizar en el Poder Ejecutivo—al acuerdo que se había firmado en la administración pasada entre la Agencia Nacional de Investigación e Innovación (ANII) y la Universidad Hebrea de Jerusalén para que Uruguay y el Estado judío colaboren en ciencia, tecnología e innovación.

Y junto a esto, el insulto que le propinó a Lubetkin Salomón Vilensky —le dijo "judío de mierda" al canciller—, quien presentó su renuncia como asesor de la futura Oficina de Innovación de Uruguay en Israel, muy molesto con la decisión tomada.

El Secretariado abordó este tema y le transmitió una "fuerte" solidaridad a Lubetkin, señalaron las fuentes consultadas.

Y a esto también se refirió Pereira en rueda de prensa. "La expresión 'judío de mierda' en el Uruguay es un delito y un delito de odio", dijo el presidente de los frenteamplistas.

Sobre el tema de fondo, la postura del partido de gobierno es que el acuerdo firmado durante la gestión de Luis Lacalle Pou "no es favorable para el Uruguay" y que la decisión tomada no busca atentar contra la Universidad Hebrea sino revertir la "señal política" que en su momento se dio a Israel. Esa "señal política primera que se quería dar desde el gobierno anterior —dijo Pereira en este sentido— era instalar la embajada en Jerusalén, en un lugar donde se supone que hay una capital común, y la segunda señal que se dio fue hacer este convenio, que finalmente no es nada". En este sentido, Pereira dijo que nadie podía decir "una" ventaja que este acuerdo de cooperación haya traído a Uruguay. "No es un acuerdo de calidad", remarcó.

Pero en la reunión con Lubetkin también se aprovechó para abordar prácticamente todos los grandes temas que han hecho a la gestión de Relaciones Exteriores, que van desde la participación de Uruguay en la Celac, pasando por el estado de situación en el Mercosur y hasta el acuerdo de libre comercio en proceso con la Unión Europea. Sobre todo esto el canciller dio un informe detallado, remarcaron los consultados.