Redacción El País
Luego del Mundial de Clubes, del que no tuvo una buena despedida, Boca Juniors encadenó la peor racha negativa de su historia con doce partidos sin victorias. Esa marca se cortó y el Xeneize lleva ahora tres victorias al hilo y se acomodó en el Clausura, pero por momentos no parece ser tan entretenido para Miguel Ángel Russo que sufrió las consecuencias del clima y del partido en el banco de suplentes.
¿Quién no se durmió mirando un partido de fútbol un domingo, a la hora de la siesta y con una tarde fría y lluviosa? Más de uno, pero pocas veces un entrenador y eso fue lo que le sucedió al de Boca en el partido frente a Aldosivi por el Torneo Clausura del fútbol argentino.
El Xeneize ganó 2-0 gracias a los goles de Lautaro Di Lollo y Rodrigo Battaglia y quedó tercero en su zona cuando clasifican ocho en cada una de las dos. El equipo azul y oro pudo volver a sumar de a tres y está dejando atrás un comienzo de semestre para el olvido, pero aún así el partido en Mar del Plata no fue nada entretenido.
El Tiburón, como le dicen al equipo marplatense, salió a incomodar a Boca intentando presionar la salida Xeneize y el clima ayudó al planteamiento del equipo local. El césped del José María Minella aguantó bastante bien, pero cayó mucha agua, el clima era muy hostil y así fue el partido hasta que Di Lollo, de cabeza, abrió el marcador luego de un error en salida de Aldosivi.
Hasta entonces el partido había sido muy aburrido y Miguel Ángel Russo sufrió las consecuencias. Sobre la media hora del encuentro, la transmisión oficial enfocó al entrenador de Boca y era el que estaba cabeceando. El director técnico primero pestañeó y luego mantuvo los ojos cerrados unos segundos. Las imágenes recorrieron la redes sociales y, más allá de si el entrenador se quedó dormido o no, algunos se preocuparon por su salud y lo dejaron ver en los comentarios.
"Miguel Ángel Russo"
— Tendencias en Deportes (@TendenciaDepor) August 31, 2025
Porque se quedó dormido en el banco en medio del partido de Boca Juniors ante Aldosivi en Mar del Plata. Está que no puede más el viejito y Riquelme lo lleva para todos lados, dejen tranquilo a ese pobre señor, la concha de la lora. pic.twitter.com/uEUpDcl3bF
Russo tiene 69 años y en 2017 superó un cáncer de próstata que se le diagnosticó cuando dirigía a Millonarios de Colombia. Más allá de su edad, su salud necesita atención constante y dirigir a Boca Juniors es exigente. De cualquier manera su hijo Ignacio, actualmente jugador de Tigre, se ha referido al tema.
"Se hablan cosas porque él tampoco dice nada. No tiene por qué hacerlo, y está bien. Miguel está bien de salud y contento. En lo deportivo, un día perdés y otro ganás. Obviamente que se hablan muchas cosas de más, que varias se inventan, pero entiendo que el Mundo Boca es así y vende eso”, dijo el delantero de 24 años en declaraciones a DSports radio.
Por su parte, su padre Miguel, habló luego del triunfo de Boca frente a Aldosivi. “Los triunfos ayudan, es bueno. Seguimos dentro de nuestra postura de trabajo en busca de lo mejor siempre. Todos están parejos, eso no cambia. Están todos competitivos y cuesta elegir a los 23. Esta es la idea y la forma en la cual buscamos trabajo siempre”.
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