Los minutos de Leo Fernández dan confianza: participación en los tres goles de Peñarol y destellos de su juego

Pocos días antes de un nuevo clásico del fútbol uruguayo, el mediocampista de Peñarol mostró cosas interesantes, más allá de que se le pide más en ofensiva.

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Leonardo Fernández defendiendo la camiseta de Peñarol frente a Progreso.
Leonardo Fernández defendiendo la camiseta de Peñarol frente a Progreso.
Foto: Estefanía Leal.

Por momentos ofuscado, en otros dueño de cada pelota que pasó por el mediocampo de Peñarol. Tras lo hecho en el 2024 y la inversión de US$ 6.3 millones que hizo el club por él, la exigencia a Leonardo Fernández es alta y cada movimiento suyo se analiza al detalle.

Pasaron algunos amistosos, la Supercopa Uruguaya y en la noche del sábado hizo su debut en la Liga AUF Uruguaya y lo cierto es que los primeros 90 minutos que disputó fueron buenos y sin duda que eso le puede otorgar confianza de cara a un nuevo cruce ante Nacional como el de la próxima semana.

Es probable, como ya ocurrió en los duelos anteriores del 2025, que el tricolor no le deje tantos espacios como encontró frente a Progreso, pero lo cierto es que los aprovechó muy bien porque uno de los detalles que muestra el destaque del “10” ante el equipo de La Teja fue que participó en los tres goles de Peñarol y en uno de ellos de manera directa.

En el 1-0, que terminó anotando Jaime Báez, fue quien se hizo la pelota tras la presión de Eduardo Darias y con una asistencia justa antes de que quede en posición adelanta, habilitó a Maximiliano Silvera que le sirvió el gol a la Chinita.

Leonardo Fernández con pelota dominada y encarando en el partido entre Peñarol y Progreso.
Leonardo Fernández con pelota dominada y encarando en el partido entre Peñarol y Progreso.
Foto: Estefanía Leal.

Algo similar ocurrió en el segundo tanto de los aurinegros porque tuvo una gran conexión con Lucas Hernández y tras la jugada por banda izquierda dejó a Báez de cara al gol y dentro del área rival, más allá de que luego el puntero mandó el centro que terminó en los pies de Diego García, tras rebote, y que le permitió poner el 2-0.

Ya en el tercer gol su incidencia fue clave porque dejó el centro del campo, se ubicó como puntero por derecha y tras atacar en velocidad y sacarse un hombre de arriba con un amague, volvió a asistir a Maximiliano Silvera, pero esta vez para que él pusiera el 3-0 parcial.

Al igual que ocurrió en juegos anteriores, tanto el año pasado como en el inicio de este, Fernández se mostró muy movedizo porque más allá de que por momentos bajó a zona central a buscar la pelota y a comenzar allí a tener contacto con ella, en el final del juego se lo vio volcado sobre una banda prácticamente en un 4-3-3 donde se paró en ofensiva junto a Alexander Machado por un lado y Maxi Silvera por el centro.

El festejo de Leonardo Fernández, Diego García, Maximiliano Silvera y Lucas Hernández en el partido entre Peñarol y Progreso.
El festejo de Leonardo Fernández, Diego García, Maximiliano Silvera y Lucas Hernández en el partido entre Peñarol y Progreso.
Foto: Estefanía Leal.

Otro apunte interesante de cara al clásico fue la interesante conexión que volvió a forjar con Diego García, un futbolista que con su velocidad y movilidad puede ser un aliado interesante para que Fernández juegue pelotas en profundidad que, por estilo personal de juego, no se pudo apreciar del todo con David Terans en cancha, un futbolista al que aún se le nota que le falta sumar minutos.

Con la pelota en sus pies, Fernández volvió a demostrar parte de lo que puede dar y aunque se sigue esperando mucho, seguramente ganó en confianza justamente previo a un nuevo partido ante Nacional.

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