Cuando corrían 31 minutos de juego la tarde parecía oscurecerse para Peñarol en el partido de este sábado ante Danubio, que vio cómo Sebastián Cristóforo, un titular indiscutido para Alfredo Arias, debió retirarse sentido y generó una alarma. Sobre todo porque el aurinegro tiene una agenda apretada en abril con tres partidos en nueve días entre la disputa por Copa Sudamericana y el certamen doméstico.

Habrá que esperar que el exjugador del Sevilla se haga estudios para conocer la entidad de la lesión. De todas formas, al salir Cristóforo decidió quedarse observando a sus compañeros e incluso se lo vio aplaudiendo al equipo con alegría luego de la apertura del marcador por parte de Abel Hernández. En el complemento llegó el turno del retorno de Carlos “Pato” Sánchez tras recuperarse de la lesión que lo marginó durante siete partidos. Su último juego había sido ante Deportivo Maldonado, pero en ningún momento se percibió esa falta de ritmo de partidos al hilo. Todo lo contrario.

El exjugador de la selección uruguaya le dio aire al equipo y tuvo dos intervenciones claras: primero, a los 70 minutos, le cedió un centro desde la derecha a Abel Hernández, que definió de taco y se topó con Goicoechea. Y luego, tan solo tres más tarde, ejecutó un tiro libre desde la izquierda que terminó en el segundo gol de la Joya, tras una peinada previa del zaguero Yonatthan Rak.

Tras el partido Hernández reconoció que sufre de tendinitis, pero que ser hincha de Peñarol lo lleva a “jugar con dolor muchas veces”.