Redacción El País
La tercera semifinal que se jugó anoche en el Polideportivo fue uno de esos partidos que los define un jugador, porque está en su noche y le salen todas. Aunque sería injusto hablar de una noche cuando se trata James Feldeine, el jugador más desnivelante y parejo de la temporada tricolor, y de hecho el único extranjero que nunca se bajó (ni bajaron) del equipo desde el comienzo de la temporada.

El americano aportó 33 puntos y Nacional sacó ventaja en la serie, que podría definir el viernes cuando vuelvan a enfrentarse en el gimnasio Magurno, por cuarta ocasión.

El tercer punto, que se postergó desde el lunes a causa de la siempre incontrolable humedad, fue otra vez de ida y vuelta y parejo como el anterior en Welcome, pero al final se quedó en La Blanqueada.

Defensor Sporting dio batalla hasta el final, pero la diferencia de dos cifras que sacó Nacional en el segundo cuarto fue demasiada para un trámite tan igualado. Aún así el Fusionado llegó a ponerse a cinco puntos con dos minutos en el reloj, pero llegó la daga de tres puntos de Feldeine para sentenciar la victoria tricolor.

Como durante toda la temporada, fue la intensidad lo que llevó a Nacional al triunfo. De atrás para adelante: primero en defensa para doblar la marca de los jugadores más peligrosos del Fusionado y reducir su anotación al mínimo posible, como le pasó a Gordon (metió 11 puntos cuando tiró para 12), Wright (16 y tiró para 27) y McClanahan, que nunca tiró cómodo y apenas pudo aportar 15 puntos con un pobre 30% de precisión desde el campo. Además, el tricolor convirtió 17 puntos tras pérdidas contra siete de Defensor Sporting, el factor que más se reflejó en el resultado final.

Pero la intensidad también se vio en ofensiva porque aunque el rival continuamente se venía, Nacional falló poco y pudo mantener esa ventaja que sacó antes del entretiempo.

Además de Feldeine, se destacaron Sarni, Méndez y Semiglia con 11 puntos, los dos últimos desde el banco. El brasileño Maozinha no tuvo su mejor noche y anotó apenas tres puntos con un pobrísimo 11% de eficacia, pero al menos 10 rebotes.

Foto: Ignacio Sánchez

El primer cuarto del partido fue parejo y de más estudio que juego. Se destacó James Feldeine entre los tricolores con 8 puntos y Mauro Zubiaurre con dos triplazos cruciales para el Fusionado.

El segundo cuarto fue todo tricolor (26-15) y sirvió para llevarse una ventaja de 12 puntos al descanso largo, que si no hay reacción del visitante puede ser demasiada grande.

En la primera parte apareció Feldeine en todo su esplendor con 17 puntos para los locales, con 53% de eficacia en lanzamientos de campo.

Otra vez, la intensidad en la defensa tricolor complicó a los anotadores del Fusionado. Dexter McClanahan no pudo pasar de nueve puntos (25% de LC) y Dion Wright no ha tenido libertad para tirar (suma apenas cuatro puntos).

Hubo básquetbol de alto vuelo en el tercer cuarto de la noche y se fueron al último cuarto con 10 puntos de diferencia a favor del local.

Esa diferencia de 10 puntos podría explicarse exactamente por los puntos tras pérdidas, en los que Nacional hizo 14 contra apenas 4 del Fusionado, y que apunta justamente a la intensidad defensiva tricolor.

A pesar de que fue un partido parejo hasta el final, Nacional tuvo de su lado a la gran figura de la noche que fue el americano James Feldeine, que aportó 33 puntos en total y cuando el Fusionado se acercó sobre el final, puso la daga de tres puntos para sentenciar la historia.

El tercer round entre tricolores y fusionados se iba a jugar ayer lunes, pero el exceso de humedad obligó a que se postergara para la noche de este martes.

No obstante, anoche sí se jugó el tercer partido de la otra serie semifinal entre Aguada y Malvín, que terminó con victoria del Aguateron en su gimnasio de la Av. San Martín por 93-80. El Playero lidera la serie 2-1 y el jueves vuelven a enfrentarse en el gimnasio Juan Francisco Canil.

El equipo de Álvaro Ponce fue netamente superior en el primer punto: ganaron en su casa por 97-61, por 36 puntos de diferencia para dar una señal de autoridad ante su rival que no dio la talla.

Pero al igual que durante la serie de cuartos de final frente a Peñarol, el equipo de Gonzalo Brea demostró una vez más su carácter para ganar el segundo punto de local en Welcome, por 87-77.