Inteligencia artificial

Uruguay debería incorporar escenarios de alta penetración de megademandas y evaluar el impacto de las demandas flexibles en su planificación energética, adecuando su marco regulatorio para atraer inversiones sin comprometer la estabilidad del sistema.
La inteligencia artificial de Google tiene funciones para gestionar la agenda de sus usuarios y simplificar tareas complejas. Estas son cinco de sus nuevas herramientas.
El tema sobre cómo la tecnología aplicada a organismos como la Dirección General Impositiva mejora resultados y evita que los contribuyentes evadan o emitan facturas falsas, fue abordado en las XIII Jornadas Tributarias.
En cinco años el consumo energético del mundo digital podría igualar el crecimiento esperado por la electrificación del transporte o la climatización de edificios.
La IA irrumpe como nueva disrupción, junto a los cambios geopolíticos y el desafío ambiental.
Tras formarse en una de las universidades más avanzadas del mundo en inteligencia artificial, el ingeniero Álvaro Cabrera decidió regresar al país para aplicar sus conocimientos en una startup.
Existen muy pocas investigaciones acerca de programas digitales de apoyo a la crianza que estudien el efecto sobre el desarrollo de los niños y los efectos a largo plazo.
El “Índice Latinoamericano de IA 2025”, elaborado por la Cepal y Cenia, indica también que se está acelerando la integración de nuevas tecnologías en América Latina y el Caribe, pero no lo suficiente.
Si los centros de datos mantienen el ritmo de crecimiento que de la actualidad, sus necesidades energéticas superarán con creces el suministro actual para 2030.
El curso abierto de Ceibal está disponible para cualquier persona con cédula uruguaya. El programa de UTEC junto a BID Lab busca empoderar a mayores de 45 años en el uso crítico de esta tecnología.
La inteligencia artificial brinda varias ideas de frases para demostrarle amor a una amiga durante su aniversario. Estas son 100 maneras de expresar tu cariño de manera sencilla pero conmovedora.
La pregunta no es si los fabricantes de automóviles europeos podrán sobrevivir, sino si Europa puede mantener una influencia significativa en un sector cada vez más definido por la dinámica de poder digital.