Redacción El País
El presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, afirmó ayer sábado que el jefe del Kremlin, Vladímir Putin, no es quien decide sobre el cuándo y el formato de las elecciones en Ucrania y rechazó cualquier influencia rusa en el resultado de las mismas.
En otro orden de temas, se están llevando a cabo conversaciones diplomáticas en Miami para avanzar en temas que podrían llevar a la finalización de la guerra, sin resultados visibles por el momento.
“No le corresponde a Putin decidir cuándo ni en qué formato se celebrarán elecciones en Ucrania, porque estas elecciones son exclusivamente para los ciudadanos ucranianos. Por lo tanto, no influirá en nada, y mucho menos en el resultado”, aseguró en su cuenta de X.
Agregó que la votación la realizan los ciudadanos de Ucrania que se encuentran dentro del país, en territorio controlado por Ucrania. “Aquí podemos garantizar unas elecciones justas y transparentes. También existe la práctica del voto en el extranjero. En los territorios no controlados por Ucrania no se pueden celebrar elecciones, porque es evidente cómo se llevarían a cabo: tal y como siempre hace Rusia”, señaló.
Precisó que, en general, las elecciones dependen de dos factores: la seguridad y la legislación, y aludió a la necesidad de abordar la seguridad, que calificó de la máxima prioridad. “Es importante que nuestro personal militar, que defiende el país, pueda votar. Todos los ciudadanos tienen el derecho absoluto a votar”, afirmó. Indicó que esta cuestión ya ha sido discutida con los socios estadounidenses, que son los que la plantearon.
“Esto podría implicar, ante todo, un alto el fuego o el fin de la guerra, o un alto el fuego, al menos mientras durante las elecciones”, dijo.
Putin aseguró el viernes durante su gran rueda de prensa de fin de año que está dispuesto a garantizar la seguridad en caso de convocatoria de elecciones presidenciales en Ucrania, al tiempo que descartó un posible cese total de las hostilidades.
En el frente diplomático, Washington había propuesto una nueva reunión trilateral entre los emisarios ucranianos, estadounidenses y rusos, pero dijo que no estaba “seguro” de que aportara resultados nuevos.
“Estados Unidos propone ahora una reunión trilateral de asesores Estados Unidos-Ucrania-Rusia”, explicó Zelenski al responder a preguntas de periodistas, pero añadió que no estaba “seguro de que vaya a surgir nada nuevo” tras anteriores encuentros en Turquía este año que sólo lograron intercambios de prisioneros.
Mientras que se reúnen diplomáticos en Miami para relanzar conversaciones destinadas a poner fin a la guerra, Zelenski dijo que Washington propuso una reunión con “el siguiente formato: Ucrania-Estados Unidos-Rusia” con la eventual presencia de representantes europeos y que “sería lógico mantener dicha reunión conjunta”.
Hace más de un mes, Estados Unidos propuso un plan para terminar la guerra. El texto inicial, percibido por parte de Ucrania y sus socios europeos como ampliamente favorable a las demandas del Kremlin, ha sido desde entonces revisado tras consultas con Kiev.
En Miami
Las conversaciones para encontrar una salida al conflicto de Ucrania continuaban ayer sábado en Miami, donde se encuentran representantes ucranianos, europeos y norteamericanos, a los que se unirá una delegación rusa, sin que esté prevista una mesa redonda con todas las partes.
El emisario ruso Kirill Dmitriev anunció ayer que iba camino de esta ciudad de Florida, donde el enviado especial estadounidense Steve Witkoff y el yerno del presidente Donald Trump, Jared Kushner, ejercen de mediadores.
La participación de rusos y europeos en estas conversaciones en Florida marca un paso adelante respecto a la etapa anterior, en la que los norteamericanos mantuvieron negociaciones separadas con cada parte en diferentes lugares. No obstante, es improbable que Dmitriev converse directamente con los negociadores ucranianos y europeos, dada la distancia que aún existe con ambos. Moscú, que lanzó su ofensiva en Ucrania en febrero de 2022, no ve con buenos ojos la participación de los aliados europeos de Kiev, y la considera un obstáculo para la paz. AFP, EFE
Rusia ataca a la región de Odesa
Rusia atacó instalaciones de almacenamiento de aceite de girasol en la región ucraniana de Odesa, en el mar Negro, en una serie de bombardeos que continuaron por segundo día consecutivo, informaron ayer sábado las autoridades en Kiev y una fuente del sector.
Una serie de ataques rusos causaron estragos en la región costera en las últimas semanas, alcanzando puentes y puertos, y cortando el suministro de electricidad y calefacción a miles de personas en medio de temperaturas gélidas. “Rusia está intentando una vez más restringir el acceso de Ucrania al mar y bloquear nuestras regiones costeras”, declaró el presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, sobre los ataques.
Añadió que ordenó la rápida implementación de “soluciones temporales de infraestructura para que la gente tenga todos los recursos necesarios”. Moscú había anunciado previamente que ampliaría los ataques contra los puertos ucranianos como represalia por los ataques contra sus petroleros que evaden las sanciones. AFP