Redacción El País
La defensa del expresidente brasileño Jair Bolsonaro solicitó al Supremo Tribunal Federal (STF) el fin de su prisión domiciliaria y del resto de medidas cautelares, impuestas dentro de una investigación por intentar obstruir el juicio que lo condujo a una condena de 27 años de cárcel por golpismo. Bolsonaro está bajo arresto domiciliario desde el pasado 4 de agosto.
Sin embargo, los abogados del exmandatario protocolaron el martes un recurso ante el STF para solicitar la “revocación de las medidas cautelares”, entre ellas la prisión domiciliaria.
En un primer momento, la corte ordenó a Bolsonaro el uso de tobillera electrónica, le prohibió utilizar las redes sociales y acercarse a embajadas, y le obligó a pasar las noches y los fines de semana en casa.
Posteriormente, decretó su prisión domiciliaria, situación que se ha mantenido hasta la fecha.
Este caso es una pieza separada del proceso por el que fue condenado a 27 años y tres meses de prisión por “liderar” una trama golpista con antiguos ministros y mandos militares, tras perder las elecciones de 2022 frente al presidente Luiz Inácio Lula da Silva.
Se trata de una investigación puesta en marcha a partir de las supuestas maniobras del diputado federal Eduardo Bolsonaro, uno de los hijos del expresidente, para incentivar al Gobierno de Estados Unidos a sancionar a Brasil para ayudar judicialmente a su padre.
Paulo Cunha Bueno, abogado de Bolsonaro, argumentó que como el exmandatario no ha sido acusado por la Fiscalía, “se elimina la necesidad de cualquier medida cautelar”. EFE