OGlobo (GDA)
Los nuevos resultados de la encuesta Genial/Quaest, publicados el jueves, muestran un alto nivel de rechazo tanto al presidente Luiz Inácio Lula da Silva como al expresidente Jair Bolsonaro.
En el nivel más bajo de apoyo a la reelección jamás registrado por las encuestas del instituto, el 66% de los brasileños no quiere que el candidato del PT se postule para un nuevo mandato el próximo año. El mismo porcentaje (65%) cree que Bolsonaro -inelegible por decisión del Tribunal Superior Electoral (TSE)- debería renunciar a una posible candidatura ahora y apoyar a otro candidato en 2026.
Este escenario anima a los candidatos de derecha que buscan consolidarse en la contienda. Gobernadores y miembros del clan Bolsonaro se esfuerzan por conseguir el apoyo del expresidente en busca de este segmento del electorado, especialmente tras las sucesivas caídas en los índices de aprobación de Lula, que han reducido su favoritismo en la contienda electoral. El candidato del PT parece estar ahora técnicamente empatado en las simulaciones de una segunda vuelta con Bolsonaro, el gobernador Tarcísio de Freitas (SP) y la ex primera dama Michelle Bolsonaro.
Por primera vez, el rechazo al gobierno se está convirtiendo en rechazo electoral a Lula, impulsando las candidaturas de los posibles herederos de Bolsonaro. Los votantes se han familiarizado con nombres como Tarcísio, Ratinho (Júnior) y (Romeu) Zema, y comienzan a verlos como opciones para las elecciones presidenciales, analizó el director ejecutivo de Quaest, Felipe Nunes.
Perdiendo el aliento
En una hipotética repetición de la segunda vuelta de 2022 entre Lula y Bolsonaro, cada uno tendría actualmente el 41% de la intención de voto, según la encuesta. En la ronda anterior, en marzo, el candidato del PT tenía una ventaja numérica, con un 44% frente a un 40% de Bolsonaro.
En el escenario de un enfrentamiento entre Lula y Tarcísio, el presidente obtiene un 41% contra un 40%, lo que también supone un empate técnico, considerando el margen de error de dos puntos porcentuales. El candidato del PT aparecía seis puntos por delante del gobernador en la encuesta anterior (43% frente a 37%), y había comenzado el año con una ventaja de nueve puntos (43% frente a 34% en enero).
Si la disputa es entre Lula y Michelle, el candidato del PT alcanzaría el 43% (un punto menos que en la simulación realizada en marzo), contra el 39% de la ex primera dama (un punto más que en la encuesta anterior).
Tarcísio tiene la ventaja de ser menos rechazado que su exjefe (el actual gobernador fue ministro del gobierno de Bolsonaro) y la ex primera dama. El 33% de quienes afirman conocer al gobernador de San Pablo, pero no votarían por él, en comparación con el 55% que apoya a Bolsonaro y el 51% que apoya a Michelle. Por otro lado, la ex primera dama es la favorita del sector del electorado que se declara “bolsonarista” si Bolsonaro no logra inscribir su candidatura.
El rechazo a Bolsonaro y Michelle solo es superado por el de Lula, que ahora alcanza el 57%. Esto es ocho puntos porcentuales más que la cifra registrada en enero, cuando el 49% afirmó que se negaría a votar por el actual presidente.
Herederos de Bolsonaro
Tarcísio y Michelle aparecen en cabeza en las preferencias de los brasileños como posibles sustitutos del expresidente como candidatos. El nombre de Michelle es la opción preferida del 44% de quienes se declaran simpatizantes de Bolsonaro, más del doble de los votos que recibió Tarcísio en este grupo (17%). El gobernador obtiene mejores resultados en el grupo que no se declara simpatizante de Bolsonaro, pero vota más a la derecha, donde aparece con el 32%, en comparación con el 24% de la ex primera dama.
La encuesta Genial/Quaest muestra que Eduardo se estanca. El congresista aparece con un 34%, el mismo porcentaje registrado en las dos encuestas anteriores. Al ser evaluado como sustituto de su padre, el congresista fue la opción elegida por el 4% de los entrevistados. “El único nombre que no parece ganar fuerza con el paso de los meses, ni mostrarse competitivo frente a Lula, es el del diputado federal Eduardo Bolsonaro”, evaluó Felipe Nunes, en X. (Nicolas Iory, Luis Felipe Azevedo y Rafaela Gama)
“iré con la verdad de nuestro lado”
El expresidente brasileño Jair Bolsonaro afirmó ayer viernes que acudirá la semana próxima al Tribunal Supremo “con la verdad”, para declarar como acusado de liderar una supuesta trama golpista. Bolsonaro dijo que no pretende “desafiar” al Tribunal Supremo cuando responda las preguntas de los magistrados, en lo que definió como una “inquisición”.
“No voy allá para desafiar a quien sea, estaré allá con la verdad de nuestro lado”, dijo durante un discurso en un acto del Partido Liberal (PL), su fuerza política. Además, convocó a sus seguidores para que vean su declaración, que será retransmitida en vivo y tendrá lugar probablemente entre el martes y miércoles que viene.
De forma paralela, el Tribunal Supremo rechazó ayer viernes una petición presentada por la defensa de Bolsonaro para aplazar la declaración, alegando que no había tenido acceso a todas las pruebas del proceso. EFE
Avanzan evangélicos a costa de católicos
Los evangélicos ganan terreno en Brasil y representan ya el 26,9% de la población, mientras que el catolicismo retrocede a mínimos, aunque se mantiene como la religión mayoritaria del país (56,7%), según un informe divulgado ayer viernes por el Gobierno.
El contingente de seguidores de las diferentes corrientes evangélicas avanzó 5,2 puntos entre 2010 y 2022, según los datos del último censo realizado por el Instituto Brasileño de Geografía y Estadística (IBGE).
Ese crecimiento se produjo principalmente a costa de los feligreses católicos, que en los últimos doce años pasaron de ser el 65,1% de la población al 56,7%.
En número absolutos, en 2022 había unos 100 millones de católicos y cerca de 50 millones de evangélicos en Brasil, cuya población ronda los 213 millones de habitantes. Los datos indican que Brasil cuenta actualmente con la menor cantidad de fieles católicos de los últimos 150 años, de acuerdo con la oficina de estadísticas del Gobierno, que tiene información al respecto desde 1872.
El informe refleja además que las religiones espírita, umbanda y candomblé, estas dos últimas de raíces africanas, siguen siendo minoritarias al no sobrepasar el 3% de la población brasileña en su conjunto.
Entre 2010 y 2022 también aumentó el número de brasileños que declararon no tener religión, del 7,9% al 9,3%. Con todo, el catolicismo aún lidera en todas las regiones del país, pero cada vez ve más amenazada su posición ante el empuje de las corrientes evangélicas, especialmente en la región amazónica, donde estas alcanzan ya cerca del 40% de la población. Los católicos todavía son mayoría en todos los grupos etarios, sobre todo entre la población con más edad. EFE
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