Inumet y meteorólogos anuncian fin de semana de "mucha inestabilidad": cuándo llegan las lluvias

Se viene un fin de semana con "mucha inestabilidad", tal como lo definió el Instituto Uruguayo de Meteorología (Inumet). Lluvias y mejoras temporarias se intercalarán durante sábado y domingo, mientras se mantendrán altas las temperaturas, aunque ya no será el calor agobiante de este viernes.

Natalía Bentancor, directora de Servicios Meteorológicos de Inumet, fue la encargada de dar el pronóstico del tiempo para este fin de semana. Según dijo, habrá "temperaturas elevadas pero jornadas inestables, con lluvias, tormentas y mejoras temporarias".

Para este viernes pronosticó una "jornada calurosa", con escasa nubosidad la mayor parte del día. "Sin embargo, en la tarde, debido a las altas temperaturas, pueden formarse algunos chaparrones aislados y tormentas principalmente en la región centro y este del país. Esta situación puede continuar hasta la noche en la región costera del este", advirtió.

"El sábado también será una jornada calurosa e inestable. Desde la madrugada en el litoral oeste y centro-sur comenzarán a formarse lluvias y tormentas, algunas podrían ser localmente fuertes. Estas tormentas durante el día comenzarán a dispersarse al resto del territorio. Es importante aclarar que no se desarrollarán de forma simultánea en todas las zonas y que se esperan mejoras temporarias", señaló.

Para el domingo, también advirtió sobre una "jornada calurosa e inestable". "En el litoral oeste, centro y norte esperamos tormentas puntualmente fuertes con mejoras temporarias. En el resto del país, si bien los modelos muestran mayor incertidumbre, es probable que se generen lluvias aisladas y tormentas con mejoras temporarias", dijo Bentancor, y llamó a estar atentos ante la "probable emisión de advertencias meteorológicas".

En diálogo con El País, el meteorólogo José Serra dijo que se trata de "una inestabilidad bastante rápida", porque si bien para este sábado se esperan "cielos nubosos y algo nubosos, algunas precipitaciones escasas y aisladas", la mayor inestabilidad "se va a dar el domingo y algo el lunes de mañana". Además, afirmó que se trata de una lluvia "nada significativa salvo alguna tormenta muy localizada".

Por otro lado, destacó que ya el lunes "la situación mejora sensiblemente" y por tanto se mantiene el pronóstico sin lluvias para 24 y 25 de diciembre, Nochebuena y Navidad.

En cuanto a las temperaturas, Serra indicó que este viernes se esperan 32°C en Montevideo y el área metropolitana, y el sábado habrá una caída. A partir de allí, los próximos días la máxima oscilará entre 28° y 30°. "Después de Navidad creo que volveremos a tener un ascenso superando los 30°", adelantó.

Foto: Francisco Flores/El País.

Por su parte, su colega Guillermo Ramis dijo en Informativo Sarandí (AM 690) que para este fin de semana "no hay hasta ahora nubes significativas", por lo que, en principio, solo se prevén "chaparrones y alguna célula de tormenta" de poca relevancia.

Para el sábado las principales precipitaciones se esperan al sur del Río Negro, lo que incluye a Montevideo y el área metropolitana. Precisamente en la capital estas lluvias se anuncian para la tarde. El domingo "son todos chaparrones dispersos" también en otras zonas del país, "lo mismo el lunes".

Acerca de la temperatura, Ramis dijo que "prácticamente han desaparecido las máximas bajas" y de aquí en más estarán siempre cerca de 30°. "Solamente el lunes aparece un 26°", destacó.

Por otro lado, Serra aseguró que "el fenómeno de La Niña ya está entre nosotros". Consiste en un enfriamiento anormal de las aguas superficiales del océano Pacífico tropical que produce consecuencias en zonas como Uruguay. La Niña, en un caso muy extremo, fue el marco de la sequía que duró tres años en Uruguay y que derivó en el vaciamiento de la Represa de Paso Severino, y por tanto afectó el suministro de agua potable en Montevideo y el área metropolitana. Este no sería el mismo caso porque se prevé que sea "de débil a moderada", según el especialista.

De todas formas, La Niña "está dando lugar a estas altas temperaturas y precipitaciones no tan abundantes", un efecto doble que continuará durante todo el verano.

"No significa sequía, significa una merma en los volúmenes de precipitación. Esas precipitaciones no van a satisfacer las necesidades hídricas de los cultivos ni de la sociedad", apuntó y añadió que durante todo el verano habrá "alto riesgo de incendio forestal".

Entonces, si al estiaje habitual del verano "le sumamos la llegada de La Niña, que es de débil a moderada, la situación se complica y mucho en el futuro inmediato" porque se producirá un "déficit hídrico" producto de la merma en los volúmenes de precipitación.