“Falta uno”, le avisó el diputado Sebastián Valdomir del Frente Amplio (FA) a la coordinadora de su bancada, Lucía Etcheverry, cuando el reloj daba las 15:15 horas. Faltaba un diputado para lograr el quórum para iniciar la sesión de la Cámara de Representantes, citada para la hora 15:00, por lo que, unos minutos después de la alerta, el presidente de Diputados, Gustavo Olmos, anunció que “no habiendo número, se levanta la sesión”. Así, al no asistir al plenario, blancos, colorados y el Partido Independiente frenaron el proyecto de la oposición que otorga créditos laborales para extrabajadores de Casa de Galicia por hasta US$ 30 millones, porque no logró ser tratado en la cámara baja en el plazo requerido ni podrá ser aprobado con la redacción que salió el miércoles del Senado.

De todas maneras, el senador nacionalista Sergio Botana, que lo votó en la cámara alta junto a frentistas, cabildantes y el blanco Juan Straneo (suplente de Juan Sartori), le presentó ayer al FA una alternativa, la que fue anunciada por la oposición tras la trunca sesión.

“Ya hay equipos nuestros trabajando porque creemos que todavía hay caminos que pueden dar un mínimo de satisfacción a trabajadores de la salud que en la pandemia aplaudimos todos, el gobierno también, y hoy se les dio la espalda”, dijo Etcheverry en conferencia de prensa, y agregó que “con celeridad” la iniciativa aprobada en el Senado será derivada a la comisión de Asuntos Laborales de Diputados para que se le realicen cambios que habiliten su votación en los próximos días.

El plazo para aprobar proyectos de ley que impliquen aumento del gasto público caducó ayer, puesto que no se puede incrementar el presupuesto estatal en el año previo a las elecciones nacionales, agendadas para el 27 de octubre de 2024. Sin embargo, según Botana, la iniciativa votada en el Senado sube el gasto solo en el artículo 7, que establece que “los extrabajadores de Casa de Galicia que aún no hayan sido reinsertados por las instituciones prestadoras de salud obligadas a ello por la ley N° 20.022, del 14 de febrero de 2022, deberán ser contratados por la Administración de los Servicios de Salud del Estado (ASSE)” o por otros prestadores de salud “en un plazo máximo de 60 días”. Por esa razón, la comisión de Asuntos Laborales debería aprobar el proyecto sin este artículo, enviarlo al plenario de Diputados para su votación y, si logra mayorías, regresaría al Senado para su sanción definitiva. Este es el plan B que ayer Botana propuso a la bancada del FA y que se pondrá en marcha en la sesión del próximo miércoles de la comisión de Asuntos Laborales.

El senador blanco, que había presentado un proyecto similar al impulsado por el FA (que fue el que se aprobó en la cámara alta), considera que el primer artículo de la iniciativa, que crea “en el BPS un fondo adicional para el pago de créditos laborales post concursales (...) de la exmutualista Casa de Galicia a efectos de dar cumplimiento a lo previsto en la ley N° 19.690, del 29 de octubre de 2018”, no implica un incremento del gasto, porque ese “fondo adicional” ya está comprendido en la mencionada ley, que creó el Fondo de Garantía de Créditos Laborales en el ámbito del BPS.

El proyecto establece además que estos créditos laborales “se garantizarán hasta por un máximo equivalente a 105.000 Unidades Indexadas por trabajador” y deberán ser abonados en un único pago en el plazo máximo de 180 días desde la promulgación de la ley. En definitiva, cada extrabajador podría cobrar hasta $ 600.000, unos US$ 15.000, lo que suma una erogación de unos US$ 30 millones para el Estado. El Poder Ejecutivo, en cambio, solo está dispuesto a pagar hasta US$ 8 millones ($ 174 mil por cada exempleado), como propuso en otro proyecto de ley, que no fue tratado.

Con el cambio que le introducirían en comisión de Diputados, quitando el artículo 7 del proyecto de ley, unos 300 extrabajadores de Casa de Galicia que siguen desempleados perderían la oportunidad de ser contratados por ASSE o por otro prestador de salud en los próximos dos meses, estimó Botana.

Uno de esos 300 extrabajadores que no ha podido reinsertarse laboralmente es Bruno Medeiros, quien siguió la sesión de ayer afuera del Palacio Legislativo y fue por nueve años oficial especializado en mantenimiento de la exmutualista y dirigente de la Asociación de Funcionarios de Casa de Galicia (Afuncag). “Los que somos mayores de 50 años, y yo tengo 54, tenemos seguro de paro hasta octubre; hay gente que se le terminó antes y otra que lo tendrá hasta enero o febrero. Yo el mes que viene tengo que abandonar el lugar donde vivo, que alquilo. La situación diaria es remarla para comer”, dijo Medeiros a El País.

El proyecto no fue tratado ayer en Diputados porque blancos, colorados y el Partido Independiente no ocuparon sus bancas, lo que impidió lograr el quórum, y que se aprobaran licencias y suplencias que permitirían haberlo alcanzado solo con votos frentistas y cabildantes. Estuvieron en sala 38 representantes del FA, siete de Cabildo, César Vega del PERI, Daniel Peña del Partido de la Gente, y dos blancos liderados por Botana, Carmen Tort y Marcos Portillo. Sumaron 49. Faltó uno para llegar a los 50 necesarios para sesionar.