Dirigentes de la coalición de gobierno criticaron la actuación de la anterior administración vinculado al tiempo en prisión y posterior fuga del capo de la mafia italiana, Rocco Morabito. Estos cuestionamientos se dan luego de que El País informara ayer que el jefe de la Policía de ese entonces, Mario Layera, declaró ante la Justicia que las visitas del narcotraficante mexicano Gerardo González Valencia -apodado “El Cuini”- a la celda de Morabito eran “responsabilidad” del exministro del Interior, el fallecido Eduardo Bonomi.

En su cuenta de Twitter, el senador nacionalista Sebastián Da Silva dijo que se trató de “la trama de corrupción más vergonzosa de los últimos tiempos en el Ministerio del Interior”.

El también integrante del Partido Nacional y diputado Pedro Jisdonián eligió la misma red social para criticar los hechos que declaró Layera en la Justicia. “Los que dan cátedra de seguridad estaban todos al tanto de los traslados del Cuini a cárcel central a tomar café con Morabito, que casualmente se escapó caminando de esa cárcel”, dijo.

Por su parte, el diputado nacionalista Juan Martín Rodríguez aseguró también en Twitter que “las autoridades del Frente Amplio se siguen haciendo las desentendidas” y recordó un pasaje de su intervención en la Cámara de Representantes realizada en setiembre de 2021 donde advertía sobre “visitas conyugales” que realizaba “El Cuini” en cárcel central.

Otro de los que opinó fue el abogado de la causa y dirigente colorado, Andrés Ojeda. En su cuenta de Twitter escribió ayer pidió “que la piola no se corte más por el lado más fino”. Y recordó: “No olvidemos que por este tema se formalizó injustamente a un subalterno de la Guardia Republicana”.

En tanto, Diego Sanjurjo, coordinador de Estrategias Focalizadas de Prevención Policial del Delito del Ministerio del Interior, dijo que “todo lo relacionado con este episodio es un escándalo” y “parece difícil que pudiera suceder sin complicidad y connivencia policial y política al más alto nivel”.