Caso Danza: la Jutep define hoy y oposición levantaría interpelación si jerarca renuncia a mutualistas

Todo el sistema político espera con expectativa la postura que la Junta de Transparencia y Ética Pública (Jutep) mostrará este jueves de tarde en torno a la situación que atraviesa desde hace meses el presidente de ASSE, Álvaro Danza, cuestionado por la oposición por tener varias otras tareas profesionales —que en algún caso se superponen con el cargo público—, especialmente las que desempeña en al menos tres mutualistas como médico tratante.

El tema se viene manejando con hermetismo en el directorio de la junta anticorrupción, formado actualmente por mayoría frenteamplista: Ana Ferraris, su presidenta, y Alfredo Asti, su vicepresidente, son quienes responden al oficialismo, mientras que el vocal Luis Calabria —director general de Secretaría del Ministerio del Interior durante gran parte del gobierno de Luis Lacalle Pou— figura como representante del Partido Nacional.

La Jutep ya cuenta con un informe técnico que menciona que hay una "incompatibilidad" en el accionar de Danza —como adelantó ayer El País—, y la resolución que adopte en esta jornada —por consenso o por mayoría— será clave para el oficialismo, pues la decisión política que se defina estará alineada con el señalamiento del organismo contralor. Así fue adelantado esta semana por la bancada de diputados del Frente Amplio e importantes jerarcas del gobierno como el secretario de Presidencia, Alejandro Sánchez, y la ministra de Salud Pública, Cristina Lustemberg.

Lo que resuelva el gobierno, a su vez, también será determinante para definir los pasos que dará la coalición republicana, que este martes definió —con el voto de los 47 legisladores de la oposición, lo que incluye también a Cabildo Abierto e Identidad Soberana— llevar adelante una interpelación a Lustemberg, que estará a cargo del diputado del Partido Independiente, Gerardo Sotelo.

Porque en caso de que el gobierno acuerde con Danza que el médico renuncie a su trabajo en las mutualistas —que es en donde los informes jurídicos que encuentran "incompatibilidad" ponen el foco, y donde se configuaría un "conflicto de intereses", al decir del director del Instituto de Derecho Penal de la Universidad de la República, Jaime Sapolinski— para varios legisladores opositores el llamado a sala perdería sentido. Esto sería así porque la finalidad de la convocatoria era, justamente, "demostrar una incompatibilidad" que, a criterio de blancos, colorados e independientes, sería aceptada por el gobierno si Danza abandona sus trabajos en el ámbito privado.

"Si hace eso (renunciar a las mutualistas), lo que Danza está reconociendo es que nosotros teníamos razón", dijo a El País el diputado Sotelo, que días atrás, y en varias oportunidades, declaró que, en ese escenario, "caería el objeto" de la convocatoria a Lustemberg.

"Pero no es lo ideal —agregó—. Creo que debería dejar el cargo por el desgaste que ha sufrido su figura y que también ha implicado a la ministra".

Que Danza siga ese camino es algo que en filas del Partido Nacional visualizan como más probable, en función del diálogo informal mantenido con actores del oficialismo.

Por eso hay quienes como el senador nacionalista Martín Lema, ya se adelantaron este miércoles a hacer valoraciones sobre esa posibilidad.

"Sería un gravísimo error que quieran disfrazar esta situación de resuelta con la renuncian a los privados —sostuvo en rueda de prensa—. Y creo que se compran un problema, porque el presidente de ASSE va a estar absolutamente cuestionado en caso de que lo mantengan en la presidencia".

Lo cierto es que, en las últimas horas, sobre todo a nivel de senadores de los partidos Nacional y Colorado, han habido reuniones con el fin de analizar los pasos a seguir y la estrategia de "presión" contra el gobierno para el caso de que Danza continúe en el cargo luego de que la Jutep marque su postura.

Y esa estrategia, en principio, prescinde de interpelaciones parlamentarias, e incluye la posibilidad de recurrir a medidas extra parlamentarias, dijo a El País una fuente nacionalista, con la meta de que el jerarca "sea destituido".

"Hubo un momento oportuno para que renunciara a sus trabajos en el sector privado; hacerlo ahora será tomado como una tomadora de pelo", dijo un legislador opositor.