Bordaberry planteó aumentar controles en transferencias de jugadores de fútbol para evitar lavado de activos

Redacción El País
Las operaciones de compra y venta de jugadores de fútbol representan un ¨peligro¨en lo que al lavado de activos refiere, según manifestó el senador Pedro Bordaberry en la Comisión de Hacienda del Senado.

El gobierno busca aprobar cambios a la Ley Integral contra el Lavado de Activos y esta tarea la lleva adelante el prosecretario de Presidencia Jorge Díaz.

En ese marco, el jerarca, junto a autoridades de la Secretaría Nacional Contra el Lavado de Activos y Financiemiento del Terrorismo (Senaclaft), concurrieron días atrás a la Comisión de Hacienda del Senado para brindar explicaciones de los cambios propuestos y la nueva normativa que se busca aprobar.

Uno de los legisladores más activos en dicha instancia de la comisión parlamentaria, según consta en la versión taquigráfica a la que accedió El País, fue el senador del Partido Colorado Pedro Bordaberry, quien puso sobre la mesa consideraciones respecto a la actividad comercial en el fútbol y los millones de dólares que mueve. ¨El fútbol es un peligro¨, afirmó Bordaberry.

El líder de Vamos Uruguay planteó la necesidad de poner el foco en las operaciones de compra y venta de futbolistas, como un tema central para controlar el lavado de activos y consideró insuficiente enfocarse solo en los sujetos obligados como las SAD o los clubes.

En el artículo 13 literal L del proyecto, relativo a los sujetos obligados, aparecen incluídas las SAD, Sociedades Anónimas Deportivas.

¨Adelanto que me parece muy bueno que sean sujetos obligados, o sea que estoy de acuerdo, pero me da la sensación –ustedes saben que estuve involucrado en el tema– de que de repente se está poniendo el énfasis bien en los sujetos obligados y no tanto en las operaciones. Eso me parece muy importante porque uno ve que se habla de fútbol y de fútbol, y es cierto que el fútbol es un peligro, pero si solamente se lo incluye como sujeto obligado, como el sujeto puede cumplir o no siempre vamos a andar corriendo de atrás", afirmó.

Y luego quien estuviera al frente del gerenciamiento de Montevideo City Torque y de la Asociación Uruguaya de Fútbol cuando fue intervenida agregó: "Existe en el fútbol –y se los puedo hacer llegar– una reglamentación muy estricta acerca de quiénes pueden participar en las operaciones. Hace un tiempo, en el año 2015, la FIFA prohibió que terceros sean propietarios de los derechos económicos y federativos de los jugadores, y tienen que ser los clubes. A su vez, después avanzó y estableció un registro de agentes; luego de eso, quienes participan obviamente tienen que declarar todo como es".

Y por último presentó una propuesta: De repente, si todas estas operaciones, que en el caso de Uruguay representan, diría, el 80% o el 90% de los ingresos de los clubes, se registraran en la Secretaría Nacional del Deporte –algunas se registran– y se pusiera la obligación de declarar cada operación ahí, habría un buen entrecruzamiento de información. Me refiero a no ir solo al sujeto obligado –está bien ir hacia él–, sino también a las operaciones¨.

Para Bordaberry, hay un alto porcentaje del dinero de las transferencias de los futbolistas que no se sabe en dónde termina.

"Todos podemos leer en la prensa: se vendió a Jorge Díaz al Real Madrid en 20 millones, pero al club le llegaron seis. ¿Qué pasó en el medio? No sé. No sabemos a dónde va a dar. A su vez, hay un porcentaje establecido por convenio laboral que le corresponde a los jugadores, pero nunca va a los jugadores. Entonces, si se obligara a hacer esa declaración, creo que gran parte del problema se empieza a solucionar. Ustedes saben que los mayores ingresos de los clubes uruguayos no son por las camisetas, las entradas ni la televisión lamentablemente por ahora, sino que son por las transferencias de jugadores¨, ejemplificó el colorado.

El líder de Vamos Uruguay incluso se ofreció a redactar un artículo en ese sentido y dijo que además de las SAD, aquellas instituciones que no lo son también deberían ser sujetos obligados "porque muchos de ellos están en una situación precaria, entonces terminan aceptando a terceros que vienen a negociar por fuera, hacen sus negocios y se la llevan".

"Lo otro que me parece importante, como sujeto obligado, es que sean los clubes, pero también que sean las federaciones y asociaciones, porque ahí sí hay mucho dinero. Quizás las asociaciones tienen que ser socias de la Senaclaft en estos controles", concluyó Bordaberry.