Un hombre fue imputado por incendiar una vivienda y una gomería, ambas propiedad de su expareja, provocando pérdidas totales. En primera instancia se creyó que había sido un accidente, pero el informe de Bomberos descartó esa hipótesis e involucró el factor humano. La defensa del sospechoso apeló, pero un Tribunal de Apelaciones confirmó la imputación ya que existen elementos para ubicarlo en el lugar.
En la noche del 3 de setiembre, el destacamento de Bomberos de Las Piedras recibió un llamado que alertaba sobre un incendio en la calle Conrado Möller, esquina Ramón Álvarez, en La Paz. Al llegar, se encontraron con que estaban prendidas fuego una gomería y una vivienda, ubicada en el fondo del mismo terreno. Las pérdidas eran totales.
Si bien al comienzo todo apuntaba a que no había personas involucradas —ni la dueña de casa ni sus hijos se encontraban en ese momento en el lugar—, la línea de investigación dio un giro con el informe de Bomberos. Este determinó que "el patrón de quemado o punto de origen" no concordaba con un accidente.
Los investigadores analizaron cámaras de vigilancia de vecinos, y así vieron al hombre ingresar a la casa minutos antes del incendio. Si bien no se le llega a ver el rostro, se lo puede identificar por su complexión física y forma de caminar.
Según el relato de la Fiscalía de Las Piedras de 4to Turno, al que accedió El País, el hombre llegó caminando "con actitud sumamente tranquila" e ingresó a la vivienda con una llave. Estuvo en el interior durante 17 minutos y se retiró sin nada en sus manos, pero con una actitud "más apurada" y trotando.
Minutos después de su retirada se ve humo saliendo de la casa, que de a poco se fue intensificando hasta la aparición de las primeras llamas. El fuego se propagó rápidamente hasta la gomería.
Se realizó un seguimiento a través de cámaras para reconstruir el recorrido que hizo el sospechoso para escapar. Se tomó un ómnibus, bajó algunas paradas después y se dirigió hacia su casa. De la investigación surgió que el hombre es expareja de la víctima: había mantenido una relación de 24 años con dos hijos en común. Además, era conocido en el barrio por ser dueño de otra gomería y organizar bailes.
En marzo ella lo había denunciado por violencia doméstica. La mujer dijo haber recibido agresiones y lo acusó de romper una puerta a golpes, además de amenazarla con que la iba a matar cuando le comunicó que lo iba a denunciar.
A raíz de estos episodios Fiscalía solicitó la imputación del hombre con la medida cautelar de prisión preventiva argumentando que existe riesgo para la víctima y peligro de fuga, lo que fue admitido por la jueza con un plazo de 90 días. Los delitos imputados fueron incendio, violación de domicilio agravada, desacato y violencia doméstica.
La defensa del hombre, a cargo de Andrea Nalerio, apeló asegurando que la medida cautelar era "muy gravosa". También puso en duda que las pericias fueran concluyentes sobre si el incendio fue con intención, y señaló que el expediente de violencia doméstica había sido archivado. Pidió, además, que la medida cautelar fuera cambiada a arresto domiciliario.
Fiscalía respondió citando el informe de Bomberos, en el que se deja clara la presunción de "participación humana". Con respecto al expediente por violencia doméstica, señaló que su archivo fue un "error administrativo", pero las medidas seguían vigentes.
Finalmente, el Tribunal de Apelaciones de 1er Turno resolvió mantener la formalización con la medida de prisión preventiva.
La pena máxima que podría recibir el hombre es de 16 años, por lo que presumen que existe riesgo de fuga. Además, se comprobó que el imputado viajó a Argentina luego del hecho, "lo que demuestra facilidad para evadir a la Justicia", según la sentencia a la que accedió El País.
Según redactaron los ministros del Tribunal, "la argumentación fiscal es firme". "Estos elementos son suficientes para colmar el estándar requerido, en especial el de la individualización del sospechoso, y de la mano de ella, la ocurrencia de los demás delitos", señalaron.
Víctima pidió ayuda por las pérdidas
Luego del incendio, la mujer dueña de la gomería y la vivienda incendiadas pidió ayuda. "Lo que sea, porque no tenemos absolutamente nada. Cualquier cosa sirve, viene bien, porque quedamos con lo puesto", dijo. Si bien el comercio no es la fuente laboral de la mujer, sí es la de su hijo. "Por suerte nos habíamos ido hacía 15 minutos", dijo luego del incidente.
El jefe de Bomberos de Las Piedras, Pedro Moreira, también hizo referencia al tema el día después del incendio. "Cuando llegamos estaba todo en franca propagación y nuestra intención era evitar que eso se trasladara a una vivienda o a una leñera que quedaba del otro lado", dijo a Canal 10.
"El control del incendio fue en poco más de media hora y nuestro trabajo duró más de tres horas", explicó.
El número para colaborar con la familia afectada es 093870781.
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