Casi la mitad (47%) de los alumnos de 15 años de liceos públicos, sin rezago, no llegó a las competencias mínimas de Matemática en las pruebas PISA 2022. En las instituciones privadas, en tanto, el porcentaje de quienes no lo lograron fue del 21%.

Estos datos surgen de la publicación hecha por PISA Uruguay en el último mes, donde se muestra en mayor detalle el rendimiento de los alumnos uruguayos en Matemática, asignatura en la que se puso la lupa en esta evaluación.

El volúmen 4 titulado “Logros en Matemática: marco conceptual, resultados y contexto particular”, describió dicha competencia y expuso los resultados en los sistemas públicos y privados locales, con o sin rezago de alumnos. La prueba, que se hizo en 2022 en 81 países, reflejó notorias diferencias.

En esta edición de PISA, evaluación de la que Uruguay participa desde 2003, se definió a la competencia como “la capacidad de un individuo para razonar matemáticamente y para formular, emplear e interpretar la matemática para resolver problemas en una variedad de contextos del mundo”.

Un 47% de los estudiantes de Educación Media Superior (EMS) -ciclo educativo sin rezago- de los liceos públicos “tienen niveles de logro en Matemática por debajo del umbral mínimo para su inclusión social y ciudadana según PISA, correspondiente a los niveles 1a, 1b y 1c de desempeño”, de un total de ocho valores, indicó el informe. Esta cifra es menos de la mitad entre quienes concurren a privado (21%).

El nivel 2, definido por PISA, es aquel “básico de competencia que los estudiantes necesitan para participar plenamente en la sociedad”. Tomando en cuenta este umbral, un 48% alcanzó nivel 2 o 3 en los liceos públicos, frente a un 58% en las instituciones privadas.

La diferencia se observó además en los niveles 4 o superior, de “altos niveles de desempeño”. Mientras un 5% de liceales públicos llegó a este buen rendimiento, en los centros privados fue 21%. Para determinar “qué son capaces de lograr los estudiantes en Matemática”, PISA estableció ocho niveles que van desde el 1c al 6, marcando una subdivisión en el nivel 1 en 1c, 1b y 1a.

En Uruguay, el 43,5% de los liceales y de UTU, de 15 años, puede “hacer interpretaciones literales de los resultados” y “extraer información relevante de una o más fuentes que incluyen tablas o gráficos con dos variables”, entre otros aspectos. Estas competencias, en tanto, las alcanzan, en promedio, un 69% de estudiantes de los países de la OCDE, y un 25% de los alumnos latinoamericanos.

Con el fin de comprender mejor el rendimiento, PISA informó el puntaje obtenido en la prueba, junto al porcentaje de quienes alcanzaron competencias mínimas. Uruguay tuvo, en promedio, 408,7 puntos -nueve menos en 2018-, lejos de los 490 del promedio OCDE.

Al comparar los dos sistemas, en los liceos públicos llegaron a 427 puntos, en promedio, frente a 482 en los liceos privados. “En Matemática, los puntajes aparecen estrechamente asociados al nivel y grado escolar que cursa el estudiante, con diferencias promedio de 55 puntos entre grados contiguos”, acotó el informe.

Con este escenario, se planteó también otra dimensión: el resultado de quienes cursaron con rezago, en Educación Media Básica. La competencia de estos alumnos llega a 345 puntos, en promedio, frente a 433, de aquellos sin rezago.

Al poner el foco en el rendimiento de los rezagados, el 87% de estos alumnos, de liceos públicos, no llegó a las competencias mínimas. Mientras que el porcentaje fue de 43% en los centros privados. La distancia es igual de marcada entre quienes alcanzaron los niveles 2 o 3 (12% en públicos y 43% en privados), así como en niveles 4 o superior (0,3% versus 14%).

“Solo un 13% de los estudiantes con rezago escolar logró el nivel 2 de suficiencia en la prueba, frente a un 55% entre los que cursan el grado esperado para su edad”, graficó el informe de 100 páginas.

El relevamiento indicó que no hay “diferencias significativas entre el Ciclo Básico Tecnológico y la Educación Media Básica secundaria pública o privada, ni entre los bachilleratos de secundaria (públicos y privados) y la Educación Media Tecnológica, una vez que se considera el contexto socioeconómico junto con otros factores de inequidad”. Por otro lado, alcanzaron “menores desempeños” también quienes asistieron a las ofertas a la Formación Profesional Básica (FPB) y la Educación Media Profesional (EMP).

Fuentes de ANEP indicaron a El País que está previsto que Secundaria comunique en febrero y no antes, por una “estrategia específica”, diversas medidas que se prevén implementar. En diciembre, el Codicén solicitó al área de Planificación Educativa, que dirige Adriana Aristimuño, un balance de los resultados en las PISA 2022. El País consultó, sin éxito, a autoridades de Secundaria y UTU sobre los resultados puntuales de Matemática en PISA 2022, y para conocer cuáles son las medidas.