Pamela Avendaño, El Tiempo/GDA
Los dátiles son ricos en hierro, potasio, calcio y magnesio y son una fuente importante de fibra. Por su sabor dulce, se convierten en una alternativa a los azúcares refinados.

Gracias a su aporte en vitaminas y minerales, esta fruta ayuda a combatir la anemia y el estreñimiento. También beneficia la fertilidad masculina: ayuda a incrementar el recuento y la motilidad de los espermatozoides.

El dátil presenta un elevado porcentaje de calorías y nutrientes. Por cada 100 gramos de producto pueden contarse hasta 275 kilocalorías; esto se debe a que su peso está constituido por azúcares como la glucosa y fructosa.

A su vez, tiene un gran aporte de vitamina B5, que hace que los dátiles aporten energía.

Esta fruta tiene alto contenido de potasio, lo que la convierte en el aliado ideal para combatir la retención de líquidos. Ayuda a conciliar el sueño debido a su aporte de triptófano y magnesio.

Su aporte en vitamina B3 y hierro contribuye a la reducción de la presión arterial y el colesterol. Al ser una fuente de hierro ayuda a disminuir a la anemia, los mareos y las uñas quebradizas.

El Centro Médico de la Universidad de Columbia en Estados Unidos, descubrió que los alimentos ricos en potasio, como los dátiles, ayudan a reemplazar los electrolitos que se pierden con la diarrea crónica.

Otro estudio publicado en el Journal of Critical Reviews menciona que los minerales como fósforo, potasio, calcio o magnesio presentes en los dátiles hacen de él un superalimento para fortalecer los huesos y combatir enfermedades como la osteoporosis.

Para hacer una pasta de dátiles casera, solo necesitarás 250 gramos de dátiles y 250 ml de agua. Poné los dátiles en remojo con agua muy caliente como mínimo 15 minutos. Luego, trituralos con el agua de remojo en una batidora o procesador de alimentos hasta obtener una pasta densa y sin grumos. ¡Listo!

Si querés que quede más espesa y con un toque a caramelo, calentá la pasta de dátiles en una olla a fuego medio durante 5 minutos, removiendo continuamente hasta que haya espesado un poco más.

Guardá la pasta de dátiles en un recipiente hermético en la heladera durante unos 10 días. También podés congelarla para conservarla más tiempo.