Por qué cantar en la ducha es la mejor "medicina" gratuita para tu cerebro

Redacción El País
Cantar es mucho más que una expresión artística: es una poderosa herramienta para la salud integral. Esta actividad estimula directamente el nervio vago, considerado la clave del bienestar y un aliado fundamental para reducir el estrés y la ansiedad. La ciencia confirma que, al activar este nervio, se desencadena una respuesta de relajación en el cuerpo, beneficiosa incluso si desafinás.

Foto: Pexels.

El nervio vago (o décimo par craneal) es el nervio más largo del sistema nervioso autónomo. Actúa como una autopista de comunicación bidireccional entre el cerebro y órganos vitales como el corazón, los pulmones y el intestino. Es el principal componente del sistema nervioso parasimpático, responsable del modo "descansar y digerir", que contrarresta el estrés del modo "lucha o huida" (simpático).

La eficacia de este nervio se mide a través del tono vagal. Un tono vagal alto significa que el cuerpo puede recuperar la calma rápidamente tras un evento estresante, lo que se asocia con:

· Mejor regulación emocional.

· Digestión más eficiente.

· Menor inflamación.

· Frecuencia cardíaca más baja.

Por el contrario, un tono vagal bajo mantiene al cuerpo en un estado de alerta crónico, vinculado a ansiedad, depresión y problemas digestivos como el síndrome de intestino irritable.

Foto: Captura de Twitter @teledoce.

Cantar es uno de los métodos más accesibles y placenteros para estimular el nervio vago. Su efectividad se basa en dos mecanismos clave:

1. Activación física: Al cantar, se ponen en movimiento los músuculos de la laringe y la garganta, por donde pasa directamente el nervio vago. Acciones como tararear o hacer gárgaras producen un efecto similar.

2. Promoción de la respiración profunda: Cantar exige y fomenta de manera natural la respiración diafragmática (profunda y abdominal). Esta respiración lenta es una señal poderosa que el nervio vago transmite al cerebro para activar la respuesta de relajación.

Este doble estímulo no solo calma el sistema nervioso, sino que también puede llevar a la liberación de hormonas del bienestar como endorfinas, serotonina y oxitocina, promoviendo una sensación de relajación y conexión social.

Foto: Freepik.

Además de cantar, existen otras prácticas sencillas para estimular el nervio vago y entrenar un tono vagal saludable:

• Respiración diafragmática: Practicar inhalaciones profundas por la nariz (hinchando el abdomen) y exhalaciones lentas.
  
• Exposición al frío: Terminar la ducha con 30 segundos de agua fría o salpicarse la cara.
  
• Ejercicio moderado: Practicar yoga, tai chi o caminatas.
  
• Meditación y mindfulness: Para fomentar la calma y la conciencia plena.
  
• Conexiones sociales positivas: La risa y la interacción social cálida lo activan.

Cuidado de la microbiota intestinal: Dada la fuerte conexión del eje intestino-cerebro mediada por este nervio, consumir probióticos y una dieta saludable favorece su función.