"Lo tengo en la punta de la lengua": las razones por las que a veces tu cerebro se bloquea

Redacción El País
El fenómeno de la punta de la lengua es una experiencia común relacionada con la memoria y el lenguaje, y la neurociencia tiene explicaciones fascinantes sobre ello.

¿Alguna vez has intentado decir algo, sabes exactamente lo que quieres expresar, pero la palabra no sale? Este momento de "colapso" mental, lejos de ser un problema patológico, es un fenómeno psicológico conocido como TOT (por sus siglas en inglés Tip Of The Tongue) o estado de punta de la lengua.

El TOT es un fallo en la recuperación léxica. La persona conoce el significado de la palabra, a menudo recuerda su letra inicial o número de sílabas, pero los sonidos específicos (su forma fonológica) se bloquean temporalmente. Es como si el sistema semántico (que almacena significados) funcionara, pero el sistema fonológico (que procesa sonidos) fallara en la conexión.

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Investigaciones, como las del experto Eduardo Navarrete publicadas en Memory & Cognition, señalan que el TOT está fuertemente conectado a la memoria. Durante un episodio, se activan áreas cerebrales como la corteza cingulada anterior y la corteza prefrontal derecha, zonas vinculadas al esfuerzo cognitivo y la recuperación de recuerdos.

El cerebro intenta superar el bloqueo visualizando imágenes o asociaciones que activen la palabra objetivo. Esto explica por qué a veces recordamos dónde vimos algo o su contexto, pero no el término preciso.

Envejecimiento: una causa común, ya que la velocidad y eficiencia de la recuperación léxica pueden disminuir con la edad.

Bilingüismo o multilingüismo: hablar más de un idioma puede incrementar estos episodios. El cerebro debe gestionar y seleccionar entre múltiples sistemas fonológicos, lo que puede generar interferencia.

Edad de adquisición de las palabras: Las palabras aprendidas en la infancia se recuperan más rápido y con mayor precisión que las adquiridas en la edad adulta.

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No se recomienda que otras personas lancen palabras aleatorias para ayudar. Esto puede bloquear la recuperación y aumentar la frustración.

Se sugiere relajarse y cambiar el foco de atención. Muchas veces, la palabra emerge espontáneamente tras un momento de distracción.

Buscar sinónimos o dar rodeos para explicar el concepto puede activar indirectamente la red semántica y fonológica necesaria.

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Superar un estado TOT genera una sensación de placer y orgullo, como haber resuelto un rompecabezas cognitivo. Por el contrario, no hallar la palabra puede producir malestar y decepción, evidenciando el vínculo entre el lenguaje, la memoria y la experiencia emocional.

En conclusión, la próxima vez que una palabra se quede en la punta de la lengua, recuerda que es una experiencia universal que revela la compleja y fascinante interacción entre tu memoria, tu lenguaje y tu cerebro.