Ricardo Ocampo, director de la galería Walden Naturae, nació en Paysandú y cuando hace 12 años visitó Pueblo Garzónpor primera vez tuvo la sensación de que se parecía a muchos de esos sitios de su departamento natal. En plena pandemia, decidió embarcarse en un proyecto para sumar a la actividad cultural de lo que empezaba a vislumbrarse como un polo de arte en el Este uruguayo. Así surgió Walden Naturae de Garzón, un espacio cultural que está cumpliendo su primer año.

“Queríamos que la zona tuviera un programa cultural que saliera de lo típico de Punta del Este o José Ignacio. Queríamos puntualmente enfocarnos en lo que es este precioso lugar”, explica Ocampo.

A fines de 2021, la galería de arte y centro de exposiciones Walden Naturae cumplió con su cometido y se sumó a la oferta natural. Por el espacio pasaron exposiciones, eventos y alcanzaron su meta de permanecer abiertos todo el año.

“El pueblo tiene mucho que ofrecer y es un gran paseo. Venir a disfrutar de Garzón es una experiencia única”, señaló Ocampo.

Para el director de la galería, la pandemia atravesó al mundo del arte y puso la escultura en otro lugar, valiéndose de la tecnología, avances y nuevas formas de expresión. La manufactura, como el crear con las manos, entra en esta nueva valoración de lo artístico y rescatando a la cerámica como una expresión del arte (y no artesanía).

Este 27 de diciembre, la galería presentará la exposición Lecho Marino de la artista argentina Ana López, que permanecerá hasta el 19 de enero.

“Esta expo se presenta como una especie de reconstrucción de lo que es un lecho marino, a través de estas piezas de cerámica inspiradas en el universo del mar”, explicó Ocampo e indicó que López crea su propio universo marino.

“Cuando uno se sumerge en la exposición puede ver el diálogo de cada una de las piezas y se completa con el texto de Santiago Villanueva (el curador de la exposición)”, indicó.

El curador, define a la muestra de la siguiente manera: “Para Ana el papel es un amor tóxico, como el barro: la relación parte del rechazo, el daño y la resistencia, es una conquista desde el cariño y desde la posibilidad de que las cosas fallen. Hay una propuesta ficticia de conquista, una ficción por denuncia, pero es otra obra en la que no hay historia posible, no hay fechas precisas, sólo una intención de empezar de nuevo. Algunas lecturas hay que hacerlas desvinculando unas cosas de otras. En la obra de Ana el principio de movimiento parte de la obra y afecta a la artista, por eso es un movimiento que desordena y convierte un cuerpo en un archivo político vivo”.

La muestra que la secundará será la del artista plástico riverense Carmelo Arden Quin (1913-2010). “Presentaremos, por primera vez en Uruguay, una serie de tres trabajos que están hechos en aerosol a mediados de los años ‘70 en París”, explicó el director de Walden Naturae.

Las obras de Arden Quin acaban de protagonizar una exposición en el Museo Nacional de Bellas Artes de Buenos Aires y llegarán a Garzón por primera vez.