El Tribunal Oral en lo Criminal N.º 2 de Zárate-Campana dictó sentencia este miércoles 13 de agosto contra Claudio Contardi, exesposo de la modelo y conductora Julieta Prandi, y lo condenó a 19 años de cárcel por abuso sexual con acceso carnal agravado.
¿Pero quién es Claudio Contardi? Empresario vinculado al rubro gastronómico, cobró notoriedad pública a partir de su relación con Prandi. La pareja se casó en 2011 y mantuvo una relación de 10 años, de la que nacieron dos hijos: Mateo y Rocco.
En 2019, el divorcio se concretó. Desde la separación, Contardi acumuló varias denuncias por parte de su expareja, incluyendo violencia familiar, económica y abuso sexual.
La denuncia de Julieta Prandi a Claudio Contardi
En 2021, Prandi denunció a su exmarido por abuso sexual con acceso carnal agravado, señalando que los hechos ocurrieron entre julio de 2015 y marzo de 2018 en la vivienda que compartían en Escobar. La modelo sostuvo que esta situación afectó gravemente su salud mental.
Según el fiscal Christian Fabio, Contardi mantuvo relaciones sexuales con Prandi en reiteradas ocasiones sin su consentimiento. En el pedido de elevación a juicio, se detalló que el acusado ejercía “violencia física, psicológica y simbólica” y que imponía el vínculo sexual bajo el argumento de ser su esposo. La denuncia estimó que los abusos se repetían al menos dos veces por semana, sumando un mínimo de 144 hechos. El juez de Garantías Luciano Marino consideró que había pruebas suficientes para llevar el caso a juicio oral.
Prandi ha descrito su relación con Contardi como un vínculo marcado por el control y el maltrato sistemático. “Era una persona que me degradaba, me insultaba y me amenazaba todo el tiempo”, afirmó en entrevistas.
Relató episodios concretos, como el día que no pudo viajar a Uruguay por trabajo porque Contardi escondió su billetera y su celular en el freezer. También denunció violencia económica, asegurando que su exmarido le hizo firmar un poder para manejar sus cuentas y cobrar su sueldo: “Me sacó 22 años de trabajo, todo lo que estaba en mi caja de seguridad. Me tuve que ir de mi propia casa pidiendo un préstamo al banco”.
La modelo sostuvo que sufrió agresiones físicas: “Me agarraba del cuello, me ponía el puño en la cara y me decía que si era un hombre no me dejaba un hueso sano. Me tiraba de los pelos”. El quiebre definitivo llegó al ver el impacto en sus hijos: “Cuando vi a Mateo convertirse en Julieta, ya que tenía el mismo dolor que yo, ahí me saqué la última venda que me quedaba”.
Con base en La Nación/GDA