Manuella Sampaio
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"Cada vez que él va para ahí, vuelve muy contento y eufórico; me dice ‘Tenés que ir’. Siempre quiso llevarme, y ahora lo consiguió”, cuenta Mart’nália con una risa suelta, sobre el deseo de su amigo Paulinho Moska, con quién tocará mañana sábado en el Festival Medio y Medio de Punta Ballena.

Podría decirse que la sonrisa de esa cantante y compositora brasileña es una de sus principales características, como si en la música y en la vida hiciera una apuesta constante por la alegría. Una sonrisa que incluso se puede notar por teléfono, mientras charla con El País, y cuenta sobre su particular amistad con Paulinho Moska.

Empezó cuándo ambos fueron representados por Márcia Alvarez, actual mánager de la cantante. Uno conoció el trabajo del otro y desde entonces, dice, son “más que familia”. Colaboraron en varias canciones a lo largo de ese tiempo; “Namora Comigo”, “Entretanto” y “Sem Dizer Adeus” son solo algunas.

“Son muchos años juntos. Nos conocimos, nos pegamos y nunca más nos soltamos, nos volvimos compañeros en la música y en la vida”, señala Mart’nália.

El público uruguayo podrá conocer un poco más de esa historia mañana, en el concierto que darán juntos a partir de las 22.30 en el escenario de Maldonado. “Vamos a contar cómo fue esta mezcla del pop con el samba carioca y el inicio de esta amistad”, adelanta.

Dueña de una voz aterciopelada, Mart’nália empezó su carrera haciendo backing vocal o coros en la banda de su padre, el reconocido cantante y compositor Martinho da Vila —que estará el 16 de abril en el Auditoro del Sodre—, y en 1985 lanzó un disco homónimo, el primer de su carrera.

De ahí en adelante hizo varias colaboraciones y fue apadrinada por grandes nombres de la música popular brasileña. Caetano Veloso fue el director artístico de su tercer disco Pé no meu Samba; Maria Bethânia dirigió su quinto álbum Menino do Rio, y Djavan fue el productor de Não tente compreender, lanzado en 2012.

“A mi me gusta la mezcla, en todos los sentidos, las colaboraciones me gustan mucho, y Moska creo que es el ejemplo más grande. Para mí los amigos son sinónimo de familia y la música es una charla de instrumentos y de personas, de sonidos, de ritmos, de sonrisas, de danza, de todo”, sentencia quien en 2017 ganó el Grammy Latino al mejor disco de samba por su +Misturado, logro que repitió en 2019 con Martinalia Canta Vinicius de Moraes, un trabajo en el que hace homenaje al poeta y compositor brasileño.

“Mi carrera va caminando conforme las cosas van llegando y conozco lo nuevo. El hecho de ir a Uruguay, por ejemplo, es algo nuevo y fresco”, señala sobre este estreno que concretará ahora.

Actualmente la cantante sigue trabajando en su último disco, Sou assim até mudar, lanzado en 2021. La canción que le da nombre fue compuesta por Tom Karabachian, hijo de Paulinho Moska, hoy con 26 años y a quien Mart’nália vio crecer. “Fue muy importante, un aliento en la pandemia, descubrir un poco más de mi ‘hijito’, conocerlo como compositor”, dice.

Este año planea seguir con una investigación que realiza sobre el samba en los “Brasis” —como se refiere a un país continental que alberga distintas formas de un mismo ritmo—, y además planea una gira por Europa.

Sobre el espectáculo de mañana, para el que quedan entradas disponibles en RedTickets de 2360 a 2960 pesos, adelanta: “Es un show de voz, percusión y guitarra. Cantaremos prácticamente todas las músicas que grabé de él y él las mías, algunas sorpresas y sambas que pusimos en el setlist a pedido de Moska", dice. Y añade: "Me dijo que tenía el gusto de presentarme a ese lugar que es tan especial para él”.