Redacción El País
La primera vez que Romina Celeste nombró a Gustavo Penadés fue en su programa. Richard Galeano indagó en Hacemos lo que Podemos (CRTV) sobre la persona que habría intimado con ella siendo menor y así sacudió a un sistema político que no volvió a ser el mismo. Las derivaciones del caso lo enfrentaron a Ignacio Álvarez, quien lo calificó de “conductor vil" y de hacer "un programa de mierda".

-Este año tu programa Hacemos lo que Podemos mutó hacia una versión televisiva a través de CRTV, ¿cómo fue adaptarse a este nuevo medio?

-Fue un desafío, nunca había hecho televisión. Los primeros días me costaba y no me hallaba. Recién ahora le estoy agarrando la práctica al tema de las cámaras.

-¿Qué ganó el programa con este cambio?

-El impacto visual. La televisión sigue siendo el medio que populariza los contenidos. Nosotros explotamos el año pasado y nos fue muy bien con el sistema multicámara y la transmisión por You Tube, pero salir en televisión por todos los cables y por todo el interior nos ayudó mucho más. Nos permitió llegar a un nuevo público y también nos sirvió en lo comercial.

-¿Extrañás la radio?

-Extraño mucho hacer radio todos los días. De esta nueva forma perdimos mucho del ida y vuelta con la gente en vivo, que es algo que te da la radio y que a mí me gustaba. Ahora hay días que no vamos en vivo y no lo podemos hacer.

-En uno de los primeros programas del año hiciste la famosa entrevista en la que Romina Celeste nombra por primera vez a Gustavo Penadés, ¿cómo se dio esa nota?

-Yo vi un domingo de noche que Romina Celeste era tendencia en Twitter porque acusaba a un importante dirigente político sin nombrarlo de haber estado con ella cuando era menor. La llamé al otro día y le dije que las puertas del programa estaban abiertas. Ella se acordaba que el año anterior yo la había invitado al programa y que esa había sido su primera nota en un medio masivo. Me dijo que hablaría primero en Hacemos lo que podemos y coordinamos para el día siguiente.

-¿Vos sabías que ella iba a acusar a Penadés al aire?

-Yo imaginaba que se refería a Penadés pero no lo sabía. Lo que sí sabía era que iba a hacer todo lo posible para que lo dijera al aire. Durante la nota se sintió con la confianza de decirlo y lo nombró. Enseguida Penadés convocó a la famosa conferencia de prensa y después pasó lo que todos sabemos.

-¿Te imaginabas toda la repercusión de la nota?

-Lo que me sorprendió fue la repercusión en la calle. La gente me empezó a parar para hablarme de esa nota. Algunos incluso me acusaron de que me habían pagado para hacer esa nota y distraer a la opinión pública del caso Astesiano. Yo no era consciente de la importancia que tenía hasta que alguien me dijo que esa entrevista y esa pregunta en particular iban a quedar en la historia política y en la historia de la televisión de este país.

-¿Siempre estuviste seguro de llevarla para hacer esa acusación?, ¿evaluaste que podías estar corriendo un riesgo si no era cierto?

-Sabía que estaba tomando un riesgo, pero no dudé. Cada persona que viene es mayor y se tiene que hacer cargo de lo que dice. En este caso tenía la intuición de que era cierto.

-¿Le creíste todo lo que dijo ese primer día?

-En su relato habían cosas que no me cerraban, pero cuando dio el nombre de Penadés me dio la sensación de que era verdad. Ahora ya se sabe todo, pero hay que acordarse de cómo era el contexto el 28 de marzo.

-Tu nota con Romina derivó en un cruce con Ignacio Álvarez que te calificó como “un conductor vil” que hace “un programa de mierda”.

-No lo conozco personalmente, no sé por qué me calificó de esa manera. Él me parece un conductor y un periodista fantástico. Él dice que nuestro programa tiene poca credibilidad pero sin embargo a la hora de compartir sus registros de audiencia lo hace con información nuestra. Yo sé que él intentó en su momento convencer a Romina Celeste de que hablara primero en su programa. Ella le dijo que lo iba a hacer primero con nosotros y capaz que eso lo que le molestó. Ella habló después en La Pecera y al domingo siguiente en Santo y Seña él mostró fragmentos de su nota como si todo hubiera empezado ahí. Pero no: el tema de Penadés empezó en Hacemos lo que podemos.

-¿Cómo viste el programa del domingo pasado con la amenaza de bomba al canal y su enfrentamiento con Romina Celeste?

-Fue un show televisivo genial. Todo el mundo miraba el programa por el circo de la amenaza de bomba. Lo que no me pareció correcto es que me dio la sensación de que usó a Romina Celeste y a Mastropierro para hundir a la fiscal Ghione por un tema personal.

-¿Por qué tu otro programa Copiloto de Lujo dejó de salir por VTV?

-En febrero me llamaron para decirme que les interesaba que Copiloto de Lujo saliera por VTV. Era un programa que yo hacía en You Tube y a ellos no les generaba costos. Después de una entrevista que le hice a Lourdes Ferro me llamaron para quejarse de la repercusión que había tenido. No les gustaba que las notas del programa aparecieran después en diarios y portales. Me plantearon que tenía que cambiar la manera de hacer las notas, que tenían que tener un perfil más bajo. Al final lo que pasó fue que les dije que no iba a cambiar la forma de hacer las notas, se rescindió el contrato y me fui.

-¿Pero no te convocaron justamente porque habían visto que las notas tenían mucha repercusión?

-Claro, eso es lo que no se entiende. Ellos ya sabían del estilo de las notas y me convocaron por eso. Yo creo que viene por otro lado. Los argumentos no me cerraron para nada.