Mau y Ricky, una carrera sin "plan B", el gen "Montaner" y la canción con la artista más escuchada de Brasil

Mau y Ricky saben lo que es picar piedra hasta que algo prende. Hoy acumulan más de 5 mil millones de streams, discos de platino y nominaciones al Latin Grammy, y una intuición que los llevó a convertirse en compositores influyentes del pop latino que ahora cruzan fronteras.“Tocando Madera” es la puerta de entrada a Brasil, y la llave la sostiene Luísa Sonza, que viene quemando récords a la velocidad de la luz.

Con más de 3 mil millones de streams, nominaciones al Grammy Latino y el título de artista pop número uno de Spotify Brasil durante tres años seguidos, Sonza está en plena expansión global. Sobre su presente, el germen de “Tocando madera” y la mezcla de estilos, los artistas hablaron con Sábado Show.

—¿Nunca pensaron en otra carrera o el gen Montaner era demasiado fuerte como para evitarlo?
Ricky: Nunca hubo plan B para nosotros. Estuvimos picando piedra como 13 años antes de que funcionara la primera canción. Empecé a grabar cuando yo tenía 15, Mau tenía 12, y no fue hasta que “Mi mala” salió, cuando tenía 27 años, que tuvimos la primera canción que conectó. Entonces ya llevábamos 13 años, yo era un adulto de 27 años, literalmente teniendo que tomar decisiones de hacer de esto mi vida, no o qué carajos voy a hacer para poder comer, para pagar la renta. Pero jamás hubo un plan B que no fuese a través de la música. A nosotros se nos dio de que empezamos escribiendo canciones para otros artistas, que es algo que hicimos por mucho tiempo, pero nunca hubo un plan B a eso.

—Hablando de esas canciones que escribieron para otros artistas, ¿hay alguna que ahora digan, por qué no me la quedé?
Mau: No, porque amo esas canciones, pero funcionaron por ellos. Esas canciones funcionaron porque la gente creyó y adoptó lo que esos artistas querían contar. Nuestro trabajo era darles las herramientas para que ellos contaran esas historias a su público. Y gracias a Dios funcionaron así. Es muy posible que no hubiese funcionado “Sin Pijama” de Becky G con Nati Natasha con nosotros cantándola.

Ricky: El éxito, siento, es como los planetas alineándose, porque es una cosa que se suma a otra y a otra, y así.

—¿Y qué entienden que tiene que tener una canción para que sea muy Mau y Ricky?
Ricky: Tiene que ser muy nuestra, número uno, tiene que tener nuestra letra.

Mau: Melodías que se te queden en la cabeza y una letra que proponga una manera diferente de decir las cosas.

—En “Tocando Madera” cruzan tres culturas gracias a Luisa Sonza y Big One, ¿cómo surgió esa fusión de distancias?
Mau: Eso fue con Big One. Nosotros empezamos la canción en una casa aquí en Miami con Big One. Ya habíamos trabajado juntos y es muy fácil crear música con él porque nos llevamos bien. De repente nos muestra un track que era el de “Tocando Madera”, que ya la había comenzado, Ricky y yo de una conectamos con esas fusiones. Sentí que era algo único y motivaba demasiado. No solo a querer movernos, también a tirarle melodías y letras. Empezó de esa forma. Además vimos la oportunidad de entrar a un mercado que amamos y todavía no conocemos personalmente. Y Luisa se nos vino a la cabeza de una.

—¿Ya la conocían?
Ricky: No, y empezamos a buscar entre amigos quien la conocía para hacerle llegar la canción. Lo logramos y aunque no lo creas, nos estamos conociendo en este momento.

Mau: Llevamos unos 10 minutos de amistad a través de Zoom y es muy lindo porque así es la música, te conecta con gente que no conoces, que hace 20 años lleva su vida por un lado, tu por otro y te juntas para siempre en dos minutos y medio de canción. Y vamos a estar matcheados en la historia de cada uno, eso es muy bonito.

—¿Cómo fue lograr esa unión de géneros?
Ricky: Cuando empezamos a escuchar los beats en casa de Big One, tiene mucho del merengue venezolano con el ritmo del funk que va a la yugular directo. Yo primero que sale es el “Me quiere secuestrar, dale, vente pa' acá”.

—¿Y cómo surge esa línea?
Mau: Acababan de hablar mal de nosotros en una cadena nacional en Venezuela, estábamos con eso en la cabeza, y esa fue la primera línea que salió.

Ricky: Ahí empezamos la canción que la hicimos en dos horas y media, tres con Big One. Además, es muy sexy la canción entonces se siente mucho lo físico y nos gustaba mucho la idea de que la gente cuando la escuchara pensara que eso les provocara a ellos una vaina de que les diera calor.

—Luisa, muchos artistas te describen como alguien sin miedo al cambio y eso se nota en una carrera espectacular. ¿Qué te desafió o te sacó de la zona de confort en esta canción?
Luisa: Creo que hacer las partes en español, porque es un idioma que puedo hablar con algunos errores, pero una canción es un poquito más difícil. Tuve ayuda para escribir, mezclando el portugués y el español, y quedé muy feliz cuando empezaron a surgir las palabras en los dos idiomas. Fue de manera natural, no intentando ser una persona que no soy. Entonces lo hice con un poco de acento y sin tener miedo a sonar brasileña, porque la mezcla también es eso. Quería que sonara bien, natural y ser la brasileña en la canción.

—Has tenido varias colaboraciones importantes con Danna Paola, Emilia y ahora Mau y Ricky, ¿cómo vivís este momento?
Luisa: Es muy cool porque empecé a pensar en la carrera fuera de Brasil en 2025. Antes estaba haciendo muchas más cosas en Brasil. Brasil es muy grande y me gusta hacer las cosas con calma. Así que empezamos, a fines de 2024, a hacer cosas fuera de Brasil y hacer música con personas de otros países. Como Demi Lovato pero ella cantando en portugués, después empezamos a tener contacto por Instagram, no a través de la disquera. Las personas piensan que una como una máquina que está haciendo las cosas afuera, pero no, empezamos a hablar así, como también pasó con Emilia o tantos otros artistas a los que solo les mandé un mensaje de “me gusta tu trabajo”, y hoy tenemos una amistad. Pasó ahora con Mau y Ricky porque la música tiene este poder tan mágico que parece surreal. Ahora estoy haciendo mi nuevo álbum y tengo muchos amigos que me están ayudando.

—Si tuvieran que poner un titular para este momento de sus vidas, ¿cuál sería?
Mau: Nosotros hemos pasado dos años muy bonitos porque hemos hecho uno de los álbums que más amo de nuestra carrera, y el viaje que más nos ha reconectado con nosotros mismos, volviendo a Venezuela. Fueron dos años de transición y de muchos cambios y de incertidumbres con muchas cosas. Nos cambiamos de casa disquera volvimos a la disquera de donde nos fuimos, y si bien ese tiempo fue oscuro, ya estamos viendo la luz. Te diría que este momento de mi carrera es “viendo la luz y ligero”. Porque se siente ligero.

Luisa: Para mí es ansiedad. Porque estoy con muchos proyectos. Entonces, estoy muy ansiosa, pero muy feliz. Tengo Coachella también, así que es una ansiedad pero de la buena.