La llegada de Lionel Messi al Inter Miami de la Major League Soccer de Estados Unidos cautivó la atención del mundo del fútbol y, poco a poco, va haciendo lo mismo con el público norteamericano.

"Siempre lo dije, más allá de lo que pueda ser como jugador o persona conocida, intento vivir la vida como uno más", declaró una vez durante una entrevista a Directv el capitán de la selección argentina y precisamente eso es lo que trató de hacer al llegar a Florida. El primer intento resultó bien, se fue de compras a un supermercado con su familia, pero su paseo por un shopping de la ciudad no tuvo el mismo resultado.

Antes de debutar con el equipo que dirige el argentino Gerardo Martino, Messi disfrutó de hacer las compras en un supermercado junto a su esposa Antonela Roccuzzo y sus tres hijos Thiago, Mateo y Ciro.

Lejos de medidas extremas de seguridad, los cuatro pudieron disfrutar de poder hacer algo simple y cotidiano sin ser molestados y solo algunos concurrentes al supermercado los filmaron de lejos. La vida en Miami parecía tranquila para la familia Messi pero un tiro libre en minutos de descuento dejó eufóricos a propios y ajenos.

En su debut en Inter Miami ante Cruz Azul, Lionel Messi ingresó desde el banco de suplentes para anotar con un magistral tiro libre el segundo de su equipo y así conseguir la victoria ante el conjunto mexicano por la Leagues Cup. Después de semejante muestra de talento, parece que no hay nadie que no se haya enterado de la llegada del argentino a Estados Unidos y ya no es tan fácil pasar desapercibido.

El segundo paseo en familia de los Messi fue a un shopping pero no les fue tan bien como en el supermercado. Algunos fanáticos no respetaron su espacio personal y los abordaron de cerca con sus celulares para llevarse un recuerdo de uno de los mejores futbolistas de todos los tiempos.