Tuvo un debut soñado en Boca Juniors, fue campeón continental, jugó en Uruguay y hoy atiende una peluquería

Por Redacción El País
La referencia es para Ricardo Noir que debutó en un Boca Juniors lleno de estrellas y con 17 años hizo un gol agónico para ganarle a Racing en La Bombonera.

Apadrinado por Juan Román Riquelme, que lo llevaba a entrenar, Tito salió campeón de la Recopa Sudamericana con el Xeneize y recuerda como si fuera ayer su debut como profesional.

"Hoy miro las fotos de esos momentos o veo el gol en videos y se me llenan los ojos de lágrimas porque es el debut que cualquier jugador sueña. Yo ahí no lo podía creer, imaginate que tuve que apagar el teléfono ese día, lo tenía colapsado. No entendía nada", le dijo Noir al medio Bolavip en una entrevista y explicó las razones de su retiro.

"En noviembre de 2019 falleció mi viejo y él era el que me llamaba siempre después de los partidos. Era mi crítico, siempre para bien, y hablábamos todo el tiempo de mis partidos. Después de eso me agarró un bajón importante y ya el último año de carrera fue todo medio forzoso: ya no tenía muchas ganas de seguir jugando. Y no solo por eso, sino también porque tenía a mi nena ya con 13 años en ese momento, y un día me dijo mientras comíamos en Bolivia que ya estaba un poco cansada de cambiar de ciudad seguido y de no tener grupo de amigas en la escuela. Yo, que venía ahí más o menos anímicamente, le dije, “bueno, ya está. Terminamos acá en Bolivia, me retiro, y nos vamos a vivir a la provincia (Entre Ríos)“

Pero ese retiro tuvo un breve impasse y es que Villa Elisa, donde vive Noir, está a 30 kilómetros de Paysandú y desde Uruguay tentaron al exBoca Juniors para ir a jugar a la tercera división.

"Estaba lindo, yo lo disfruté porque los compañeros estaban contentos que estaba ahí con ellos y eso me hacía sentir bien. El técnico la verdad que un fenómeno, muy linda idea de laburo tenía. Entonces lo difruté al máximo, fueron dos o tres meses pero lo disfruté al máximo. Viviendo en Villa Elisa yo estaba a 30 y pico de kilómetros de la cancha. Iba y venía todos los días de Argentina a Uruguay. Y ahora hace ya dos años más o menos que ya no más nada; me instalé en mi pueblo. Jugué unos meses en Paysandú porque me invitaron y me quedaba cerca. Cuando decidí, me retiré y ya me instalé en mi casa", le contó a Bolavip.

En su tierra natal y precisamente en su casa, Tito decidió abrir una peluquería. Estaba de vacaciones tras su retiro pero el fútbol le hacía falta y decidió hablar con un psicólogo que tuvo en su paso por Racing que le recomendó reemplazar el deporte por algo más.

"Me acordé que de chico me gustaba cortar el pelo y me puse a hacer el curso de peluquero. Hoy acá en casa me armé una peluquería en donde tenía una habitación para las camisetas de fútbol. Le corto a los conocidos, a los que tengo en el WhatsApp, y hago todos los cortes modernos que les gusta a los futbolistas ahora, ja. La paso bien, hablo de fútbol ahí que es algo que me encanta. Siempre pongo los partidos ahí y los vemos mientras corto", contó Tito.