CAMPEONATO URUGUAYO

Defensor Sporting puso en marcha el proyecto del fútbol femenino en 2019 y tan solo tres años después se transformó en el nuevo campeón del Uruguayo 2021 luego de superar a Nacional en la tarde del domingo por 2-1.

¿Casualidad? Para nada, y es que desde 2019 que en filas violetas “sabían” que el título iba a llegar esta temporada. “Venimos trabajando muy bien desde el primer año y cumpliendo los objetivos que nos habíamos trazado año a año. En 2019 era el ascenso a Primera y lo logramos, en 2020 terminar entre las cinco primeras y lo conseguimos y en 2021 el objetivo era el campeonato”, afirma Ana Gómez, coordinadora del fútbol femenino de Defensor Sporting, en diálogo con Ovación.

El resto ya es conocido. Ese objetivo se cumplió y lo importante para Gómez es que “hacia afuera se ven los resultados de cómo trabajamos adentro”. “Cuando vi el cuerpo técnico y el plantel que teníamos, sentía que podíamos ser campeonas”, afirmó con convicción.

“En lo personal es un sueño hecho realidad, es el punto máximo de lo que quería”, confiesa quien también admite que en el club quedaron muy contentos por el título que, además, le permite ser uno de los siete equipos que hasta hoy pudieron levantar el trofeo del máximo torneo femenino de fútbol uruguayo.

El trabajo de equipo para alcanzar este tipo de objetivos es clave, pero nadie puede dudar que buena parte de lo que consiguió Defensor Sporting en el Franzini fue gracias a Oriana Fontán, la zaguera que con sus dos goles le dio la consagración a las violetas.

Tiene tan solo 20 años, pero una actitud y una madurez dentro de la cancha, aunque según admite fue algo en lo que tuvo que trabajar: “En mi corta carrera he tenido muchos altibajos. Este año pude estar en la selección Sub 20 y me ayudó tener una madurez grande. Antes como gurisa chica tenia mis caprichos y así no llegaban las cosas. Me dije que si quiero vivir de esto o seguir mi carrera acá tengo que cambiar la cabeza. Cuando me vine a Defensor hace dos años, me encontré otro mundo y fue un cambio tremendo y favorable”.

El toque corto con Josefina Villanueva vencida y el remate bajo que sacó en el penal, y que se terminaron convirtiendo en los goles del triunfo, tampoco son casualidad.

“Voy a admitir que me gusta tener esa responsabilidad. Mis compañeras me dan la confianza y cuando la jueza pitó, salí corriendo y le dije a Sofi (Oxandabarat), dejamelo que pateo yo y estaba tranquila. Miré el reloj e iban 89’ y dije es ahora o nunca”, confiesa.

Claro está que el juego no fue sencillo para las violetas que al descanso se fueron 0-1 en el marcador: “Cuando nos fuimos al entretiempo perdiendo por la cabeza pasaban mil cosas porque teníamos que ganar. Entramos al vestuario y el cuerpo técnico nos dejó en claro que teníamos cosas para darlo vuelta porque el partido son 95 minutos”. Aunque todo pareció más cuesta arriba cuando el equipo se quedó con 10: “Cuando echaron a Paz (Vila) dije ‘pah, se complicó’, pero dimos el 200% y cuando llegó el primer gol tenía la confianza de que podía llegar el segundo y por suerte así fue”.

No es la capitana y tampoco la referente, pero dejó un mensaje muy importante tras el encuentro ya que “antes de ir festejar fui a saludar a quienes fueron mis compañeras de la selección porque es lo que me gustaría que hicieran conmigo”, confiesa y da otra prueba de carácter.

El gol de Oriana Fontán tal vez no hubiera llegado si el centro no hubiera complicado a la guardameta y la ejecutora de ese centro también tiene una gran cuota parte en esta consagración y la referencia es para Sofía Oxandabarat.

La delantera salteña, junto a Juliana Castro, fue la goleadora violeta en la temporada ya que marcaron siete goles cada una y aunque no pudo convertir este domingo, dejó su sello en el resto del campeonato.

Lo cierto es que lleva dos temporadas jugando a nivel AUF y en las dos levantó títulos porque tras hacer su estreno en Racing, donde fue goleadora, logró el ascenso y también el título de la Segunda División, festejó ahora con la camiseta de Defensor Sporting.

“Se me están dando las cosas y es algo muy lindo e increíble”, afirma Oxandabarat, el día después de la consagración y con el cansancio del partido y del festejo que siguió durante varias horas el domingo y que reflejó el estado de ánimo del plantel.

Más allá de sus goles, la delantera destacó mucho el trabajo grupal porque “las individualidades son importantes, pero es el grupo humano el que te saca campeón”.

“Desde el primer partido sabíamos que nuestro objetivo era ser campeonas, los favoritos eran los demás, pero teníamos un buen equipo para dar pelea. Nuestra primera fase fue más bien para conocer los rivales y esta etapa a matar o morir. Con Peñarol empatamos, se nos fueron dando los resultados y sabíamos que este era nuestro partido y estábamos convencidas de que lo íbamos a conseguir”, afirma la atacante de un Defensor Sporting que no perdió en la fase final y que en la temporada regular solo cayó dos veces en los nueve partidos que disputó: ante Peñarol y ante Nacional.

“Fue una locura por cómo se dio todo, pero ahora podemos festejarlo”, sentenció.

Detrás del plantel está el cuerpo técnico que es igual o más importante que las futbolistas que salen a la cancha. Encabezado por Líber Correa desde hace cuatro meses, se pudo lograr el objetivo trazado.

“No es el cassette, lo mejor de este equipo fue el grupo. Fue así y lo sentí así desde que empecé a trabajar”, aseguró Correa quien volvió al club a principio de este año en una especie de revancha.

“Llegué para dirigir la Sub 19 en 2019, nos fue bien, pero me tuve que ir de Defensor y luego volví cuando me llamó Ana, pero para trabajar en Primera”, confiesa quien fue ayudante técnico de Graciela Rebollo en la histórica clasificación de Uruguay al Mundial Sub 17 de Azerbaiyán en 2012.

A su favor jugó que había muchas juveniles que ya las conocía de sus pasaje en formativas y otras de enfrentarlas, pero Correa afirmó que si fueron campeonas es porque “hubo confianza, trabajo y que se creyó en el colectivo para cumplir el objetivo”.

Así fue, se cumplió el objetivo y hoy Defensor Sporting puede decir con orgullo que es campeón uruguayo.

“Dimos la cara y ahora nos vamos a la Copa Libertadores. Ahora tenemos que prepararnos para eso porque la gran mayoría va a jugar por primera vez un torneo de esta magnitud y es una alegría tremenda”, confiesa Sofía Oxandabarat que va por el mismo camino que su compañera Oriana Fontán: “Cuando vimos que el usuario de Twitter de la Copa Libertadores femenina nos entró a seguir y subieron la foto que decía ‘bienvenidas campeonas’ no lo podía creer. Te lleva a mirar para atrás y decir ‘qué lindo esforzarse y que salgan las cosas.

Todavía no caemos en que vamos a jugar la Libertadores porque nuestro objetivo principal estaba en lo local, pero desde mañana que volvemos a entrenar ya vamos a estar pensando en ese torneo”, aseguró Gómez.