"Mirá que yo estoy": la decisión detrás del cambio de camiseta de Gonzalo Petit y el ídolo que le mandó mensaje

Son varias las coincidencias. Surgieron de la cantera de Nacional. Empezaron con un número de camiseta y al año probaron suerte con el 9. Los tiró al agua Martín Lasarte y los dos convirtieron un gol en su primer partido oficial contra Peñarol.

Gonzalo Petit y Luis Suárez tienen un origen común goleador que hoy, en parte, une sus caminos futbolísticos. El primero es apenas un juvenil, que hace menos de seis meses cumplió la mayoría de edad (18), y el otro es un veterano consagrado para los libros de historia que, bien o mal, sigue haciendo goles con 38 en Estados Unidos, pese a ya parecer listo para colgar los botines.

Aunque las comparaciones muchas veces suenen odiosas (o injustas), esta tiene elementos de dónde agarrarse. Y todo parte de aquel frío 12 de julio de 2024, cuando Petit se enteró en la concentración de Nacional que su nombre no estaba entre la lista de convocados de Uruguay para viajar a España a jugar el torneo Sub 20 de L’Alcudia.

La noticia si bien no le cayó como un baldazo de agua fría, sí llevó a que su entrenador lo llamara preocupado para darle un espaldarazo: “Me tocó enterarme de esa noticia en la concentración con Nacional. Capaz que eso me llevó a no pensarlo tanto, a disfrutar del momento que estaba viviendo”.

Al otro día, la tortilla se dio vuelta y medio país ya estaba hablando de él por haber debutado con gol en su primer partido por el Uruguayo. “Recibió un golpe fuerte porque quedó afuera de la selección uruguaya Sub 20. (...) Es difícil ver un jugador tan alto y con tanta técnica”, dijo Lasarte, reconociendo su valor, después de que le convirtiera a Danubio en Jardines del Hipódromo.

Ignacio Sanchez/Archivo El Pais

A Suárez, en su momento, le pasó algo similar, pero la cachetada deportiva de ese entonces se la dieron los propios hinchas tricolores que, furiosos con su ineficacia frente a las redes, lo silbaron y le reprocharon más de una vez para que hiciera valer el peso de estar jugando en el primer equipo. “Me acuerdo que cuando recién inició entraba y erraba muchos goles. Había mucha competencia y creo que la impaciencia de la hinchada de Nacional se notaba mucho en el Parque. Había que hablarle, pero enseguida él levantaba. Creo que a todo el mundo cuando está aprendiendo le cuesta si lo critican. Y a él le costó entender los silbidos”, recordó a Ovación Diego Jaume, su excompañero.

A pesar de la distancia en años (Petit no había nacido cuando Suárez debutó), pasado el tiempo, la número 9 de Nacional sigue teniendo un peso importante. En el medio de ellos la usaron jugadores que pasaron sin pena ni gloria por el club, como el brasileño Giancarlo, otros del montón (Martín Cauteruccio, Sebastián Balsas, Juan Cruz Mascia, Sebastián Taborda, Hugo Silveira, Thiago Vecino, Diego Coelho, Pierre Webó, Emmanuel Gigliotti o Bruno Damiani), así como también hubo quienes dejaron su sello goleador (Bruno Fornaroli, Alexander Medina, Nicolás López, Gonzalo Bergessio, Ignacio Ramírez).

Foto: Ignacio Sánchez.

Al nuevo dueño de esta camiseta poco le importó la presión y el pasado domingo aprovechó su primera muestra amistosa en cancha para lucirse con un gol que se robó todos los aplausos del Estadio Luis Köster, en Soriano.

De la misma manera lo había hecho en su día Suárez, que primero probó suerte con la 13 de Sebastián Abreu (su padre futbolístico), también usó la 25 y finalmente se quedó con la número 9, que fue su trampolín para llegar a los 386 festejos que tiene hasta ahora en su carrera.

“Él usaba siempre la 13 y yo lo tenía como admirador. Mi deseo era ser como Abreu y menos mal que no lo fui, ja. (...) Después, él me decía que no iba a tener la autoridad ni la responsabilidad de jugar con la 13 cuando se fuera y le dije que sí; que no tenía ningún problema. Pero hubo seis meses en los que no le hacía un gol a nadie y me la cambié por el número 9 y ahí empecé a hacer goles”, recordó el salteño en una entrevista que concedió en 2016.

Foto: Leonardo Mainé/Archivo El País.

En mayor o menor medida, al que le toca ahora enfrentar el desafío de ser uno de los herederos del dorsal es a Petit, que dejó atrás la número 24 con la que le hizo un golazo en la final del Torneo Intermedio a Peñarol y asumió la responsabilidad después de volver del Sudamericano Sub 20.

¿Cómo se dio? Según pudo saber Ovación, en el cambio intervino Nicolás Perchman, su representante, quien lo asesoró considerando que era “importante” que un juvenil con sus condiciones usara un número tan significativo dentro del plantel. La respuesta del futbolista, viendo que la salida de Bruno Damiani dejaba libre ese lugar, fue contundente: “Mirá que yo estoy”.

Foto: Enzo Santos.

Solo el futuro sabrá de qué está hecho verdaderamente Petit o si estos primeros pasos le alcanzan para sellar una marca que no borre la huella que ya dejó en el clásico del Intermedio. Por lo pronto, Lasarte está convencido de que es uno de los proyectos a seguir, y así lo señaló tras hacerlo debutar: “No lo quiero apurar, pero estamos en presencia de un proyecto que a futuro es muy interesante. Tenemos que ayudar a conducirlo”.

El técnico fue uno de los que le dio alas y en su momento se le acercó a hablarle para interiorizarse sobre su puesto: “A vos te veo como un 9 y medio. Algo parecido a lo que hacía Francescoli en su época”, le terminó diciendo en ese primer intercambio de palabras.

El momento bisagra se le dio pronto -apenas dos partidos después de su estreno en Primera-, cuando se calzó el traje de héroe clásico y cumplió con las expectativas que tenía Flavio Perchman de él. “Le sugerí a Martín que arrancara Petit de titular y no Santander porque se podía romper”.

Lasarte había tenido hace muchos años una charla particular con Suárez, que siendo apenas un juvenil ya predecía que algún día llegaría su oportunidad de jugar en el Barcelona: “En líneas generales, siempre tuve, creo, una buena manera de dirigirme. A Suárez lo saqué a pasear por las dos canchas juntas de Los Céspedes y lo primero que le dije fue algo negativo: que no iba a jugar. Era mentira mía para hacerlo reaccionar, y él se había enojado. Después, empecé a intentar calmarlo, me empezó a contar que iba a jugar en el Barcelona, y yo pensaba para mí: ‘¿Barcelona? Es bueno, pero... ¿Barcelona?’. Tenía una determinación tremenda y al terminar la caminata otra vez era él; no era el pibe que yo estaba viendo un poquito agrandado y que tenía a mucha gente alrededor.”

Estefania Leal/Archivo El Pais

Esa profecía no solo evolucionó bien con el tiempo, sino que el destino quiso que Petit -que había sido testigo de una charla suya a juveniles en 2022, en Los Céspedes- lo terminara considerando como su máximo ídolo. Suárez le devolvió la gratitud felicitándolo públicamente por su gol clásico: "Locazo, qué locura de gol".

El potencial del nacido en Carmelo también fue bien valorado por Pablo Budna, actual secretario secretario técnico de Nacional: “Va a tener un cambio físico naturalmente. No todos los desarrollos son iguales. Lo que hay que definir es su posición en el campo de juego”.

La cláusula de su contrato es de US$ 17 millones y para sentarse a negociar por él no será nada sencillo. Ahora, es momento de que el “9” hable en la cancha.