PEÑAROL
El entrenador aurinegro analizó un nuevo empate de su equipo, los minutos de Federico Carrizo y la salida de Agustín Canobbio.

"Una mezcla de tristeza e impotencia”, tan simple como eso definió Mauricio Larriera su sentir tras el empate 1-1 de Peñarol ante Deportivo Maldonado que lo llevó a dejar dos puntos más en el Apertura.
“Hay detalles tácticos a corregir, muchos, demasiados. No se pudo sostener el partido por muchos motivos no es unicausal. Venimos en una reconstrucción que se está haciendo demasiado dura”, agregó el entrenador.
En diálogo con la transmisión televisiva, sostuvo: “El plantel es el mismo que teníamos cuando iniciamos el campeonato. Tenemos que apelar a la creatividad y buscar en la cantera del club soluciones que por ahí no hemos encontrado. Seguimos en esa reconstrucción y seguir conociendo porque hay algunos con lo que conocemos el nombre nomás”.
Respecto a la modificación de Federico Carrizo, manifestó: “Hubo varios argumentos había para ese cambio, entre ellos que había que hacer un cambio de sistema. Me quedo satisfecho con lo que mostró y nos va a dar soluciones donde no habíamos encontrado”.
En relación a la inminente transferencia de Agustín Canobbio a Paranaense, cerró: “Hablamos con él hace unos días en una linda charla. La salida es normal. En un equipo que anduvo tan bien el año pasado, el último que apague la luz. Si se tiene que ir son cosas del fútbol”.