Se hizo cargo del plantel principal de Peñarol en un momento caliente de la temporada. Le puso el pecho a las balas y ante el llamado del club, Darío Rodríguez accedió a convertirse en el nuevo entrenador de un equipo que no encontraba rumbo. Y empezó a enderezar el barco.
Los golpes en el plano local y sobre todo, en el internacional, eran grandes y duros, pero con trabajo, paciencia y mucho conocimiento de causa, el flamante técnico comenzó a plasmar su libreto en Los Aromos.
Y ese libreto poco conocido ya que se trata de la primera experiencia de Darío al frente de un plantel principal, empezó a mostrar cosas muy interesantes en el club,
Y esas cosas van más allá de lo que nadie dudaba ya que aspectos como la actitud y el esfuerzo caracterizaron a al ahora técnico durante su etapa como futbolista y ahora, como entrenador, a todo eso le sumó un ingrediente que su equipo mostró y muy bien el domingo en el Campeón del Siglo: el fútbol.
Peñarol, tras estar en desventaja -algo que en la primera parte de la temporada se convertía en constante y el equipo se venía abajo desde todo punto de vista- se rehizo, mejoró y se llevó por delante a Defensor Sporting para ganar el partido por 2 a 1.
Y no fue solamente en base a las ganas, entrega y actitud. Fue gracias a un estilo de juego que ya se deja ver y que si bien tiene aspectos a mejorar, ya le dio buenos resultados a Peñarol.
Las cinco claves del Peñarol de Darío Rodríguez:
La actitud fue otra.
El equipo venía muy golpeado con duras derrotas a cuestas en la Copa Sudamericana y un bajón importante en el plano local, pero tras la llegada de Darío Rodríguez, ese aspecto mejoró y su trabajo en Los Aromos le dio otras herramientas a un plantel que se viene recuperando.
El trabajo basado en una idea de juego.
Desde el estreno de Darío como DT mirasol se comenzaron a ver cosas nuevas respecto a lo que venía mostrando el equipo. Salvo algunos errores defensivos que costaron caros, el aurinegro levantó y busca ser sólido en defensa para desdoblarse al ataque y tener juego, pero también contundencia.
Piezas importantes del plantel levantaron su nivel.
En medio de esas crisis deportiva que se dio con una mala racha de siete partidos sin triunfos hubo varios jugadores que estaban muy por debajo de su nivel, algo que lograron recuperar con la llegada de Darío Rodríguez. Ese aspecto hizo que Peñarol también mejorara desde lo colectivo.
La confianza en los jugadores.
Desde su arribo al club, Darío Rodríguez apostó por un equipo y salvo alguna lesión, siempre intentó repetirlo. De hecho, el domingo salió a jugar con los mismos 11 que había utilizado frente a Boston River (triunfo 1-0) teniendo un acto de confianza hacia sus jugadores, que se la retribuyen en cancha.
Acertó al momento de mover las piezas.
Otro de los aspectos que está demostrando el entrenador mirasol es el manejo del plantel y las opciones a la hora de hacer variantes. El domingo no se demoró, puso en cancha a Matías Arezo y a Valentín Rodríguez, quienes terminaron siendo importantes para dar vuelta el marcador en el CDS.
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