Redacción El País
Los preparativos para despedir a Luis Suárez fueron el principal atractivo que rodeó este domingo al estadio Arena do Gremio, que fue fijado para recibir el partido entre el tricolor gaúcho y Vasco da Gama por la penúltima fecha del Brasileirao.

El encuentro, que enfrentó al Pistolero con el uruguayo José Luis "Pumita" Rodríguez, fue de suma importancia para la pelea de los primeros lugares en la tabla de posiciones del campeonato brasileño así como también la tabla del descenso.

Gremio quedó en zona de clasificación directa a la Libertadores, con 65 puntos, cuarto en la clasificación. Mientras que Vasco salió de la zona de descenso y se jugará la permanencia en la próxima jornada.

El equipo de Luis Suárez se impuso con un golazo suyo esquinado y quedó en zona de clasificación para la fase de grupos de la Libertadores 2024. El Pistolero llegó a 15 gritos en el Brasileirao y obtuvo una puntuación de 7.9 de Sofascore.

En un contragolpe a toda velocidad, Suárez recibió por izquierda, se perfiló y jugó rápido entre líneas para Cuiabano, quien buscó definir de primera y se la entregó a las manos al arquero Leonardo.

Una gran estirada del arquero de Gremio sobre su costado derecho evitó el empate en los minutos finales.

El Vasco se salvó de milagro. Primero proque Ferreira enganchó hacia el medio y sacó un remate esquinado que tapó el arquero Leonardo y luego porque en el rebote Suárez lo capturó y sin ángulo estrelló la pelota en el palo.

Suárez apareció por la frontal del área, se perfiló y de primera remató abriendo el pie y colocando la pelota contra el palo para el 1-0 del tricolor gaúcho.

Se fueron al descanso sin goles.

El 9 de Gremio recibió sobre la medialuna y lanzó de lejos (a las manos del arquero).

El Pistolero, contra todo pronóstico, tiró un centro al segundo palo y engañó en un tiro libre a toda la defensa del Vasco que perdió la referencia de Rodrigo Ely, quien entró para conectar de cabeza y convertir. Lo anularon por offside.

De una jugada elaborada por derecha, el juego pasó hacia el sector izquierdo, desde donde Reinaldo recibió con espacio y se tuvo fe para sacar un remate desde afuera del área. Remató cruzado y ancho.

Suárez recibió de Ferreira, eludió con un túnel a su marcador y pateó en dirección al arco, pero el intento se le fue por el lateral de la red.

Ya se juega el encuentro en el Arena do Gremio.

Para los hinchas locales, no es un día más. El de hoy es el último partido de Suárez defendiendo los colores del club en su casa y, por lo tanto, el inicio de un cierre de ciclo que se dará por concluido el próximo miércoles cuando visite a Fluminense.

El homenaje de esta jornada consiste en repartir, entre la multitud de 50.000 espectadores que agotaron las entradas, unas 20.000 caretas con la cara del máximo goleador histórico de la selección uruguaya, quien habitualmente es ovacionado por los hinchas tricolores.

Además, el departamento de comunicación colocará tótems con una gigantografía de Lucho y carteles. La hinchada desplegará una bandera y habrá más preparativos que se exhibirán al finalizar el partido, cuando tome la palabra para despedirse.

Suárez ya es consciente del cariño que recibe. En la cancha, está comprometido a ayudar a Gremio para entrar directo a la fase de grupos de la Copa Libertadores y quiere coronarse con un gol frente a su gente.

En Porto Alegre buscan hacerle un homenaje acorde a su importancia para el equipo esta temporada: marcó 26 goles y 17 asistencias en 52 partidos.