Alexis Maffei es uruguayo y hace 22 años está radicado en Inglaterra. Con el pecho inflado de orgullo, se jacta de haber llevado la “Patria Gaucha” a Londres y hoy le cocina a su amigo Darwin Núñez, entre otras estrellas del fútbol mundial.
Su familia hizo lo imposible para emigrar tras la crisis del 2002 y al año siguiente se instaló en Londres. “Siempre quise ser cocinero. Me metí en la universidad para hacer el curso de cocinero profesional y trabajé en diferentes lugares, pero siempre he tenido eso en el corazón de que me gusta la parrilla, el asado. Entonces siempre dije que quería poner un negocio de parrillas y dar un servicio diferente al cliente”, le narró con ahínco a Ovación.
En su recorrido previo, hizo escala en hoteles glamurosos como el Hilton y también se nutrió de culturas como la asiática y francesa. En determinado momento, hizo un clic interno. “Acá todo el mundo te cocina en parrillas eléctricas o a gas, y eso no es asado. Entonces yo dije: 'No, tengo que hacerlo bien a la cultura nuestra'”.
Después de ser jefe de cocina en el restaurante argentino Gaucho, estableció contactos con profesionales del rubro que podrían importarle la carne desde Sudamérica y decidió embarcarse en su propio proyecto.
“Mi viejo me ayudó a armar todas las parrillas, conseguí leña buena y empezamos a ofrecer al público asado privados para eventos, cumpleaños, cenas románticas o lo que fuera”, añadió.
La puerta de entrada al ámbito del fútbol se la dio Marc Cucurella, actual lateral del Chelsea. “Él pidió para que yo fuera su cocinero personal y de ahí es cuando me metí al mundo de la Premier League. Percibió que yo sabía cocinarle muchas cosas, le introduje el asado y él se lo comentó a los amigos. Empecé a cocinarle al Chelsea, desde ahí a clubes como Liverpool y Wolverhampton y así fui expandiéndome pudiendo mostrar nuestra cultura y tradición uruguaya”, contó muy agradecido.
A Alexis lo une una amistad con Santiago Bueno y Darwin Núñez. “Santi me introdujo al Wolverhampton, yo les hice el asado de la compañía y fue un momento muy especial con 100 personas incluyendo todos los futbolistas y trabajadores del club. Es muy bonito poder mostrarles nuestra cultura; es como la Patria Gaucha en Inglaterra; eso aquí no existe, ja”, expresó. En referencia a esto, valoró especialmente la calidez humana de Bueno: “Santi ama la cultura de nuestro país y sabe el esfuerzo que hacemos nosotros. Este proyecto lo comparto con mi padre. Nosotros nos vestimos de charrúas, de gauchos y yo sé que cuando nos ven están orgullosos de que estamos trayendo nuestra cultura”.
Cuando lo llaman para trabajar en Liverpool, tiene todo un ritual que transmite la esencia de la parrilla uruguaya. “Tengo un camión que lo enganchamos a mi camioneta y llevamos todo a donde debamos ir: empanadas, provoletas, la mejor carne marinada en sal, el mate y las cosas tradicionales nuestras. Convertimos la casa de los clientes en un restaurante elegante con ritmo alegre, música, tradición y productos propios”, describe.
Es uruguayo, lleva la Patria Gaucha a Londres y le cocina a Darwin Núñez: la historia de Alexis Maffei
Sus anécdotas con el “9” de la selección uruguaya son variadas y él suele ser el cocinero elegido para compartir momento distendidos. “Es algo más privado entre familiares y amigos que él invita, como Luis Díaz. Darwin Núñez es muy amable y siempre habla de los productos que brindamos. Para ellos es importante saber que tienen a alguien que está elaborando este producto en un país tan frío y diferente a Sudamérica. Aparte no es solo comer e irse. Es estar en familia, compartir el asado y reírse hasta la tarde”.
En este sentido, Maffei reveló una imperdible anécdota con Núñez: “Un momento muy chistoso que tuvimos se dio cuando yo llevé un termo con el escudo de Peñarol, que es el equipo que llevo en mi corazón desde que me fui de Uruguay. Él lo vio, me miró y me dijo: '¿Sos manya vos?'. Le respondí que sí y compartimos unas risas porque él jugo allí e imagino que todavía tiene el amor por el escudo. También me firmó la camiseta de la selección uruguaya, que para mí es algo muy importante”.
Y añadió: “Darwin quedó sorprendido al ver el escudo porque al moverte de Uruguay a estos países es otro planeta que la gente no lo entiende hasta que llega. Acá es diferente, es un mundo de trabajar, dormir y seguir. En cambio, allá en Uruguay es otra vida, vivís tranquilo y el fin de semana vas a estar con amigos y en familia compartiendo un asado. Entonces traer eso para acá le hace acordar a la gente lo que es la vida”, concluye emocionado.
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